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UAQ

Facultad de Derecho
Mauricio Rebolledo Del Castillo
Ciencia Política
Andrés Garrido del Toral
4° Semestre

Apuntes Ciencia Política


C1/100106

Conceptos Básicos

Política / Latus Sensu /

Toda actividad humana en función de la colectividad.

Política / Strictu Sensu /

Toda actividad humana en función de la colectividad, pero


caracterizada por relaciones de poder.
Político = Poder que tiene repercusiones en la
sociedad.

Ciencia Es aquella disciplina que observa,


describe,
Política analiza y crítica los
fenómenos de poder.
Hotkey = O-D-A-C

Maquiavelo 1501 (SC –


Ser)

Objeto Formal Objeto Material

Fenómenos de Poder Sociedad Humana

Sociedad

Diferencia ente la Ciencia Política y la Teoría del Estado


CP TE

= El estado es el principal fenómeno político


de todos los tiempos, pero no el único.
E E+
Apuntes
Mayor creación de la Política.
Ciencia Política C2/110106

Exposiciones:

Política y Sociedad Política y Economía


Política y Cultura Política y Ciencia

Apuntes Ciencia Política C3/120106

Evolución de la Ciencia Política

Grecia Antigua Polis

Confusión = Filosofía, religión, sociología, derecho y


economía.

Mvq CXVI )))) CP Ciencia / Derecho / Política(o)

Mtq Derecho Político =


Conjunto de normas jurídicas que regulan las
relaciones del poder público.

So…. Para la Ciencia Política; el poder público es solamente el poder


formal o de gobierno, sino cualquier manifestación de poder que
tenga repercusiones en la sociedad. (Der. Económico / Der.
Electoral / Der. Administrativo)

La Denominación

Sociología Política

Politología

Teoría Política

Ciencias Políticas
Apuntes Ciencia Política C4/160106

Poder

Mtq = Poder = Capacidad para lograr bienes a futuro

Rss = Poder = Capacidad para imponer la propia


voluntad

Mw = Poder = Es la fuerza material legitimada para imponer


decisiones

PODER
Relacionista
Sustantiva
¿De qué sirve el poder como El poder llega a confundirse
con
sustancia sino es capaz de un bien, propiedad de una
ejercerlo sobre otro? 90% persona que lo
posee.10%

Formas de Poder

Poderío Mando Influencia


Autoridad
Se caracteriza Forma de Basada en la Esta clase de
por imponerse poder basada motivación poder tiene su
sobre la en la psicológica y fundamento
conducta de normatividad. subjetiva por en la
los demás en Recurre a la parte del ejemplaridad.
base al uso de amenaza de sujeto cuya Es el último
la fuerza. Es la sanciones conducta se peldaño de
ley del más para modificar condiciona o una escala de
fuerte. (F/E) la conducta de induce. Existe valores de
los demás. más el interés mayor a
Temor a la por una menor
sanción + la recompensa coactividad.
sensación de que al temor
que quien de un castigo.
manda esta
Apuntes Ciencia Política C5/170106

Poder General y Poder Político en Particular

Toda relación es poder político El único poder político es el


poder del Estado

Ambas teorías son erróneas


Estructura delpara medirPolítico
Poder cuanto poder político
hay
Definición: Administración efectiva del poder entre los diversos
grupos sociales
Teorías sobre la Estructura del Poder Político:

En todas las sociedades aparecen 2 clases:

1) Gobernante:
Menos numerosa, cumple con la función política
y monopoliza el poder, disfrutando de sus
ventajas.

2) Gobernada:
Más numerosa, es gobernada y controlada de
modo más o menos legal, arbitraria o
violentamente.

Wilfredo Pareto
Teoría Elitista La élite preeminente, quiere conservarse en el
poder, y para ello se renueva cooptando nuevos
miembros.

Circulación de la élite:
E1
E2

Wrigth Mills
Élites integradas por:

1) Mandos Militares
2) Políticos (líderes)
3) Dueños del Dinero (Élite Económica)

Se cohesionan de tal manera que lis intereses


de unos
se identifican y refuerzan con los de los otros, e
imponen sus decisiones a la colectividad.
Existen distintos centros de poder:

1)

Teoría Pluralista
Ok) P1 P2
PD
P3 P4
Fenó
menos
Com
pensatorios
Wr) P1 P2
PD
P3 P4

“Marx” Relaciones de poder determinadas por


la relación
Teoría Clasista de grupos sociales con los medios de
producción.

La estructura del poder político se deriva


(Cc/ MP)
de la estructura económica (Cc/FT)

Apuntes Ciencia Política C6/180106

Dinámica del Poder

Poder y Organización

El poder se mide por la capacidad para ejercerlo, se tendrá poder en


la medida en la que se ejerza.

Hermman Heller = El poder objetivo de la organización lo


identifica como la capacidad de acción del
todo, es decir, de la organización en su conjunto.

Apuntes Andrés Garrido del


Toral

Generalidades

SISTEMA: Es un conjunto de reglas, principios y elementos enlazados


entre sí coordinada y subordinadamente para formar una unidad y
conseguir un fin.

SISTEMA POLÍTICO: Conjunto de instituciones, grupos, principios y


procesos políticos caracterizados por un cierto grado de
interdependencia recíproca.
INSTITUCIÓN: Conjunto de actos o de ideas instituidos que los
individuos encuentran ante sí y que de alguna manera se les
imponen. Concepción sociológica.

INSTITUCIÓN: Conjunto de normas jurídicas relativas a un mismo


objeto y a las mismas funciones, que constituyen un todo coordinado.
Concepción jurídica.

INSTITUCIÓN ES “EL CONJUNTO DE LAS FORMAS O ESTRUCTURAS


FUNDAMENTALES DE ORGANIZACIÓN SOCIAL, TAL COMO SON
ESTABLECIDAS POR LA LEY O COSTUMBRE DE UN GRUPO HUMANO.”
DUVERGER LA TOMA PARA SÍ ACLARANDO QUE LAS INSTITUCIONES NO SON
SOLAMENTE FORMAS Y ESTRUCTURAS DE ORGANIZACIÓN SOCIAL, SINO
TAMBIÉN REPRESENTACIONES COLECTIVAS QUE SIEMPRE SE VALORAN EN
ALGUNA MEDIDA Y QUE ESA VALORACIÓN CONSTITUYE UN ELEMENTO
ESENCIAL DE SU EFICACIA.

REPRESENTACIÓN POLÍTICA: Es un sistema institucionalizado de


responsabilidad política, realizada a través de la designación electoral
libre.

Existen tres modelos interpretativos alternativos:

1.-La representación como relación de delegación en que el


representante es concebido como un ejecutor, carente de iniciativa y
de autonomía, de las instrucciones que los representados le imparten;
su papel se acerca mucho al de un embajador. Este modelo es de
origen medieval y las modernas constituciones lo rechazan
prohibiendo explícitamente “el mandato imperativo”. Se le encuentra
en cambio comúnmente en entidades políticas poco integradas.

2.-La representación como relación fiduciaria en que se atribuye al


representante una posición de autonomía y supone que la única guía
para su acción es el interés de los representados como es percibido
por él. Es el papel del representante como un trabajo de razón y juicio
al servicio del bien general y no del simple querer de los prejuicios
locales.

3.-La representación como espejo o representatividad sociológica que


se centra más sobre el efecto de conjunto que sobre el papel de los
representantes individuales. Concibe al organismo representativo
como un microcosmos que reproduce fielmente las características del
cuerpo político.

NINGUNO DE LOS TRES MODELOS ENCUENTRA UNA EJECUCIÓN


COMPLETA EN SU FORMA PURA, PERO LA DE FIDUCIARIA SERÍA
RESCATABLE SIEMPRE Y CUANDO FUERA FIDUCIARIA CONTROLADA
POR EL ELECTORADO.
LA REPRESENTACIÓN ES UN FENÓMENO COMPLEJO QUE
CONSISTE EN UN PROCESO DE ELECCIÓN DE LOS
GOBERNANTES Y DE CONTROL SOBRE SU OBRA A TRAVÉS DE
ELECCIONES COMPETITIVAS.

Democracia

REGÍMENES ABSOLUTISTAS O AUTORITARIOS: Son los que están


desvinculados del control político de sus súbditos.

DEMOCRACIA DIRECTA: Aquella forma de gobierno en la que


desaparece la distinción entre gobernantes y gobernados.

EN LA TEORÍA DE LA DEMOCRACIA CONFLUYEN TRES


TRADICIONES HISTÓRICAS: La teoría clásica aristotélica de las
formas puras e impuras; la teoría medieval en base a la cual se
contrapone una concepción ascendente a una concepción
descendente de la soberanía según que el poder supremo derive del
pueblo y sea representativo o derive del príncipe y sea transmitido
por delegación del superior al inferior; y la teoría moderna conocida
como teoría maquiavélica, nacida con el surgimiento del estado
moderno en la forma de las grandes monarquías y la república.
República y democracia coinciden en ser formas de gobierno
opuestas a toda forma de despotismo y que son libres de los
regímenes autocráticos.

DEMOCRACIA Y LIBERALISMO: Por Lo que se refiere a la relación


de la democracia con la concepción liberal del estado, el punto de
partida fue el célebre discurso de Benjamín Constant sobre “LA
LIBERTAD DE LOS ANTIGUOS COMPARADA CON LA DE LOS
MODERNOS”. Para Constant, la libertad de los modernos –que debe
ser promovida y acrecentada- , es la libertad individual respecto del
estado, aquella de la que son una manifestación concreta las
libertades civiles y la libertad política (aunque no necesariamente
extendida a todos los ciudadanos), mientras que las libertades
antiguas de participación directa en la formación de las leyes ya es
impracticable y dañina.

El ideal rousseauniano de democracia directa se va transformando


con Constant, Toqueville y John Stuart Mill en el siguiente postulado:
LA ÚNICA FORMA DE DEMOCRACIA COMPATIBLE CON EL ESTADO
LIBERAL ERA LA DEMOCRACIA REPRESENTATIVA O PARLAMENTARIA,
donde la tarea de hacer leyes concierne no a todo el pueblo reunido
en asamblea sino a un cuerpo restringido de representantes elegidos
por aquellos ciudadanos a quienes se reconozcan derechos políticos.
El derecho de elegir sus gobernantes y de ser elegidos es la piedra
angular de la democracia liberal junto con el otro elemento que es el
de influir sobre la política a través de reunirse o de asociarse, más
allá de simplemente opinar.

NO PUEDE HABER DEMOCRACIA SINO EN DONDE SE RECONOZCAN


ALGUNOS DERECHOS FUNDAMENTALES DE LIBERTADES QUE
POSIBILITEN UNA PARTICIPACIÓN POLÍTICA GUIADA POR UNA
DETERMINACIÓN AUTÓNOMA DE LA VOLUNTAD DE CADA INDIVIDUO.

En general, la línea de desarrollo de la democracia liberal debe ser


buscada en dos direcciones: a) La gradual ampliación del derecho de
voto y ) la multiplicación de los órganos representativos. LA
DEMOCRACIA NO SE PRESENTA COMO UNA ALTERNATIVA AL RÉGIMEN
REPRESENTATIVO SINO COMO UN COMPLEMENTO DEL MISMO; NO ES
SU TRANSFORMACIÓN SINO SU CORRECCIÓN.

DEMOCRACIA Y SOCIALISMO: Respecto del socialismo, el ideal


democrático representa un elemento integrante y necesario pero no
constitutivo. Integrante, porque una de las metas del socialismo es el
refuerzo de la base popular del estado; necesario, porque sin este
esfuerzo jamás habría la profunda transformación de la sociedad;
pero también no constitutivo porque la esencia del socialismo es y ha
sido el revolucionar las relaciones económicas y no sólo las políticas:
EMANCIPACIÓN SOCIAL Y NO SÓLO LA EMANCIPACIÓN POLÍTICA DEL
HOMBRE.

Lo que cambia en un sistema y otro es la manera de entender el


proceso de democratización: para los liberales el sufragio efectivo es
el punto de llegada y para los socialistas es el punto de partida. Para
éstos la profundización en lo democrático se da de dos modos: a
través de la crítica de la democracia solamente representativa y la
consiguiente continuación de la democracia directa, y a través de la
demanda de que la participación popular, y por lo tanto el control del
poder desde lo bajo, se extienda de los órganos de decisión política a
los de decisión económica, de algunos centros del aparato estatal a la
empresa, de la sociedad política a la sociedad civil, llegando a la
democracia económica, conciliar y de pasaje del autogobierno a la
autogestión.

DIFERENCIAS ENTRE LA COMUNA (AUTO GOBIERNO DE LOS


PRODUCTORES)Y EL RÉGIMEN LIBERAL O REPRESENTATIVO:

1.-Mientras que el régimen representativo está basado en la


distinción entre poder legislativo y el ejecutivo, el nuevo estado de la
comuna debe ser no un órgano parlamentario sino de trabajo,
ejecutivo y legislativo a la vez.
2.-Mientras que el sistema liberal, injertado en la tradición de los
viejos estados absolutistas ha dejado sobrevivir junto a sí órganos no
representativos y relativamente autónomos, que desarrollados con
anterioridad a los parlamentos constituyen una parte esencial del
aparato estatal –como el ejército, la magistratura y la burocracia-, la
comuna extiende el sistema electoral a todas las ramas del estado.
3.-En el sistema liberal la elección es irrevocable y en la comuna es
revocable en cualquier momento.
4.-Mientras que el sistema parlamentario no ha logrado destruir la
centralización política y administrativa de los viejos estados, sino que
más bien la ha confirmado a través del parlamento nacional, el
sistema socialista tendría que descentralizar al máximo sus propias
funciones en comunas rurales. La democracia socialista ha reconocido
que en la sociedad capitalista se ha producido un traslado de los
centros de poder de los órganos tradicionales del estado a la gran
empresa y que por tanto el control que el ciudadano puede ejercer
mientras los canales tradicionales de la democracia solamente
política no es suficiente para impedir los abusos de poder cuya
abolición es el objetivo final de la democracia.

EL NUEVO TIPO DE CONTROL NO PUEDE PRODUCIRSE MÁS QUE


SOBRE LOS PROPIOS LUGARES DE LA PRODUCCIÓN Y ES EJERCIDO,
NO POR EL ABSTRACTO CIUDADANO DE LA DEMOCRACIA FORMAL,
SINO POR EL CIUDADANO EN CUANTO TRABAJADOR A TRAVÉS DE LOS
CONSEJOS DE FÁBRICA. ÉSTE SE HACE ASÍ EL GERMEN DE UN NUEVO
TIPO DE ESTADO QUE ES EL ESTADO COMUNIDAD DE LOS
TRABAJADORES EN CONTRAPOSICIÓN AL ESTADO DE LOS
CIUDADANOS A TRAVÉS DE UNA EXPANSIÓN DE ESTE TIPO DE
ORGANISMO A TODOS LOS LUGARES DE LA SOCIEDAD EN LOS QUE
EXISTEN DECISIONES IMPORTANTES. EL SISTEMA ESTATAL EN SU
CONJUNTO SERÁ UNA FEDERACIÓN DE CONSEJOS UNIFICADOS.

DEMOCRACIA Y ÉLITE: La soberanía es un ideal límite y jamás ha


correspondido ni puede corresponder de ninguna manera a una
realidad de hecho, porque en todo régimen político, cualquiera que
sea la fórmula política, es siempre una minoría de personas llamada
clase política la que detenta el poder efectivo. Caetano Mosca,
Vilfredo Pareto y Ludwig Gumplowicz.

UNA CLASE POLÍTICA PUEDE LLAMARSE DEMOCRÁTICA CUANDO SU


PERSONAL ES OBTENIDO MEDIANTE UNA LIBRE COMPETICIÓN
ELECTORAL Y NO POR LA TRANSMISIÓN HEREDITARIA O POR LA
COOPTACIÓN.

LA DEMOCRACIA ES MÁS PROCESAL QUE SUSTANCIAL, POR ELLO


CABE EN TODAS LAS FORMAS POLÍTICAS AUNQUE ÉSTAS SEAN
ENCONTRADAS.
DEMOCRACIA POPULAR: Aquella cuyo principio fundamental es la
soberanía de la mayoría.
DEMOCRACIA FORMAL: Aquella que en la letra de la ley contiene
todos los elementos de una democracia procesal pero que en la
realidad no se aplican.

DEMOCRACIA SUSTANCIAL: Aquella que es un gobierno para el


pueblo.

TODAS LAS CONCEPCIONES DE DEMOCRACIA TIENEN EN COMÚN EL


FIN ÚLTIMO QUE ES EL DE PROVEER LAS CONDICIONES PARA EL
PLENO Y LIBRE DESARROLLO DE LAS CAPACIDADES HUMANAS
ESENCIALES DE TODOS LOS MIEMBROS DE LA SOCIEDAD.

NINGUNA DEMOCRACIA PERFECTA –HASTA AHORA EN NINGÚN LUGAR


REALIZADA- PUEDE SER AL MISMO TIEMPO FORMAL Y SUSTANCIAL.

Estados Unidos

EL CASO DE LOS ESTADOS UNIDOS DE NORTEAMÉRICA: Es la


democracia occidental en que existe el régimen presidencialista más
puro:

El gobierno tiene a un presidente electo por cuatro años mediante


sufragio universal. También tiene un Congreso cuyas dos cámaras son
elegidas igualmente por sufragio universal y no puede obligar a los
ministros del ejecutivo ni a éste a dimitir. No hay preguntas, ni
interpelaciones ni voto de censura contra aquél.

El sistema de partidos es un multipartidismo en el que dos grandes


partidos monopolizan la representación. El partido Republicano y el
Demócrata, cada uno de ellos son partidos de cuadros con una fuerte
osamenta local y una débil estructura nacional sin disciplina de voto
en el Congreso. Este régimen político dura desde 1787 pero ha ido
tomando gradualmente su fisonomía actual.

La originalidad técnica del régimen americano es grande en relación


con las demás democracias occidentales que le viene de su
estructura económica, su nivel de desarrollo, su ideología, su sistema
de valores que son mucho más importantes que en otro lado. No se
puede comprender la vida de los E.U. y el funcionamiento de sus
instituciones si no se conocen los siguientes rasgos particulares de su
medio ambiente.

1.-Los EE.UU. son más puramente capitalistas que las demás


democracias occidentales. La empresa privada está más extendida
que en otras partes, el sector público es más reducido, que los
medios de intervención del estado son más débiles y sobre todo están
más orientados hacia una perspectiva capitalista. En la nación más
rica del mundo las personas de bajo nivel de vida están mucho peor
protegidas que en otras partes contra los riesgos sociales, pues los
seguros privados son caros e insuficientes. También los servicios
colectivos son más insuficientes que en las demás democracias. No
hay planificación ni control de los precios. El estado no dispone de
una gran parte del ahorro que le permita orientar las inversiones. No
cuenta con medios para modificar profundamente la distribución de la
seguridad social. El estado sólo debe intervenir a título de regulador.
Las leyes antimonopolio tienen como objetivo mantener o restablecer
la concurrencia.

2.-Están más avanzados técnicamente. Su superdesarrollo industrial,


desarrollo tecnológico y sociedad de consumo. La distribución del
ingreso sigue siendo muy desigual. La publicidad crea sin cesar
nuevas necesidades para provocar nuevos deseos de compra.

3.-Ocupan una posición dominante en el mundo. Están solos en la


cúspide, cosa que no pasaba desde el Imperio Romano. El
imperialismo y sus límites: Tienen los EE.UU. menos del 6% de la
población mundial pero consumen casi el 50% de las materias primas
explotadas mundialmente. Privan al resto del mundo de un consumo
normal y su riqueza se basa en el empobrecimiento de los demás.
Imperialismo significa explotación de los países subdesarrollados.

4.-Han sufrido poco la influencia de las ideologías socialistas y de las


tradiciones conservadoras. La libertad de expresión es mayor que en
Europa, pero los EE.UU. son más monolíticos que Europa porque la
ideología liberal no es impugnada seriamente. El liberalismo se
desarrolló con una adhesión casi general. Nunca ha tenido gran
importancia y siempre ha sido muy minoritario el socialismo en
Norteamérica.

5.-La ideología liberal es más general y menos impugnada que en


otras partes. Sin duda ha contribuido la falta de conflictos
fundamentales anteriores y el carácter unánime y conformista de la
sociedad. Los proletarios norteamericanos no tenían la impresión de
estar encerrados en un mundo sin más salida que la revolución como
sus hermanos europeos. Por lo demás siempre les quedaba la
posibilidad de intentar la aventura del oeste. Los republicanos están
un poco más a la derecha y los demócratas un poco menos; los
primeros son acérrimos partidarios de la no libre empresa y los
segundos son más tolerantes a la intervención estatales.

6.-En materia de tradiciones culturales retendremos tres de ellas: la


influencia de la religión, la introversión y el localismo. Toqueville
afirmaba no estar seguro de que sean muy religiosos pero sí de que la
consideran necesaria para el mantenimiento de las instituciones
republicanas. Más de un siglo después, Truman veía en la Biblia las
bases fundamentales de la Constitución. En los EE.UU. el pueblo es
religioso y por consiguiente la hipocresía debe ser común, dijo
también Toqueville. Aunque no es muy profunda, la religiosidad está
muy difundida fomentando la intolerancia respecto a la irreligiosidad.
La introversión radica en que ven en su país que las instituciones
democráticas prosperan hasta el presente y que en cambio fracasan
en el resto del mundo; se tienen pues en una inmensa estima a sí
mismos y no están lejos de creer que forman una especie aparte del
género humano. No toman muy en serio a los demás. Los EE.UU.
están formados por una multitud de pequeñas ciudades y pequeñas
comunidades replegadas sobre sí mismas y dedicadas esencialmente
a sus problemas particulares.

LAS INSTITUCIONES Y LA VIDA POLÍTICA: La Constitución de


Filadelfia de 1787 es la más antigua de las actualmente en vigor.

EL CONGRESO NORTEAMERICANO: El Congreso está formado por


dos cámaras. La de Representantes y el Senado. La primera se
compone de 435 miembros elegidos para dos años en proporción al
número de habitantes; es un mandato muy corto que constituye una
molestia bastante considerable. En cambio el Senado es elegido por
seis años renovándose por tercios cada dos años. Cada uno de los
cincuenta estados de la Unión tienen dos senadores sea cual sea el
número de sus habitantes. Para poder ser electo como miembro de la
cámara hay que tener 25 años y 7 de nacionalidad americana. Para
ser senador hay que tener 30 años y 9 de nación norteamericana. El
funcionamiento del Legislativo: celebra una sesión anual que empieza
el 3 de enero y termina a más tardar el 31 de julio salvo en caso de
estado de guerra o crisis declarado por el ejecutivo o por decisión del
propio Congreso. Sus debates están menos organizados que en
Europa porque la obstrucción es frecuente y a menudo está
paralizado. La Cámara de Representantes está presidida por un líder u
orador principal que ella misma elige, pero éste no tiene ni la
imparcialidad ni la autoridad de su homónimo inglés. El Senado está
presidido por el vicepresidente de la República y en ausencia de éste
por un senador elegido como presidente interino. Las cámaras
norteamericanas tienen un sistema de grandes comisiones
permanentes y especializadas. Actualmente hay 20 en la de
Representantes y 16 en el Senado, independientemente de que se
pueden constituir en todo momento comisiones ad hoc. Las
comisiones tienen poder para investigar. Entre los poderes del
Congreso contamos el hacer leyes y decretos por las dos cámaras,
una y otra están en situación de igualdad al respecto, salvo en
materia de impuestos en que la iniciativa pertenece a la cámara baja
únicamente. De hecho, el Senado ejerce poco su iniciativa, pues la
mayoría de las leyes votadas se deben a la de los representantes Si
las dos asambleas no están de acuerdo sobre un proyecto de ley, se
constituye una comisión de conciliación formada por miembros de las
dos asambleas. Si ésta no consigue llegar a un acuerdo el proyecto es
rechazado. También se tiene el poder constituyente permanente, pues
con una mayoría de dos tercios en cada asamblea se pueden adoptar
enmiendas a la Constitución junto con las tres cuartas partes de las
asambleas legislativas de los estados. Además el Congreso tiene un
poder electoral subsidiario: si el voto popular no da una mayoría
absoluta, el ejecutivo federal es elegido por la Cámara de
Representantes y el vicepresidente por el Senado. También se incluye
el poder de supervisión y control sobre los servicios públicos.
Finalmente ejerce un control jurisdiccional mediante el juicio de
responsabilidad de los funcionarios públicos, llamado impeachment,
que se desarrolla en una cámara acusadora y otra erigida en gran
jurado. La sanción es la revocación que debe imponerse por una
mayoría de dos tercios. El Senado tiene un poder importante en
materia de relaciones exteriores y maneja la ratificación del personal
diplomático y consular al que se le aplican exámenes, se le obliga a
comparecer cuando son candidatos a algún puesto e inclusive se les
investiga en lo personal (40,000 empleos). En este renglón, el
ejecutivo intenta invalidar la intervención senatorial mediante los
acuerdos ejecutivos que a decir de la Suprema Corte tienen el mismo
rango que los tratados internacionales.

El PODER EJECUTIVO FEDERAL: La elección del presidente se hace


en tres fases: La primera es la de la designación de los candidatos,
que se subdivide, a su vez, en dos momentos sucesivos. En primer
lugar, se designa a los delegados de cada partido en los estados;
estos delegados se reunirán luego en una “convención” para escoger
al candidato presidencial del partido. En 18 estados se celebran
“elecciones primarias presidenciales” para designar a los delegados,
debiendo éstos indicar a qué candidato a la Presidencia apoyarán en
la Convención del Partido. En los demás estados, son los comités de
los partidos los que se encargan de designar a los delegados,
siguiendo para ello diversos sistemas (elección por el comité local,
convenciones sucesivas a escala cada ves más amplia, etc...); a veces
los comités o las municipalidades organizan “primarias presidenciales
locales”. El conjunto de los delegados designados se reúne en una
“Convención Nacional” generalmente en Chicago. La Convención es
una asamblea numerosa y pintoresca, pero las negociaciones
esenciales se celebran en los pasillos; el resultado final es la
designación de los candidatos oficiales de cada partido a la
Presidencia y la Vicepresidencia. Estos candidatos deben ser
norteamericanos de nacimiento, tener 35 años como mínimo y llevar
catorce de residencia en los Estados Unidos. Entonces empieza la
segunda fase de las elecciones. El martes siguiente al primer lunes de
noviembre (desde 1845) el pueblo norteamericano designa, mediante
escrutinio de lista, en el marco de los estados, los “electores
presidenciales”. De hecho, elige directamente al presidente y al
vicepresidente, pues los electores presidenciales se comprometen a
votar por los candidatos de su partido a la Presidencia y a la
Vicepresidencia, y así lo hacen en la práctica. En 6 estados, incluso, la
ley les obliga a ello expresamente. La tercera fase de la elección tiene
lugar el lunes siguiente al segundo miércoles de diciembre, en que los
electores presidenciales votan por el presidente y el vicepresidente;
este acto, que constituye jurídicamente la elección presidencial, se ha
convertido sólo en formulismo que pasa inadvertido para el pueblo
norteamericano. Un candidato presidencial puede tener la mayoría de
los votos populares, pero una minoría de electores presidenciales, y
viceversa, pues una mayoría aplastante en un Estado no da más
electores presidenciales que una mayoría débil; el candidato que
tenga mayorías débiles en más estados puede resultar, pues, elegido.
El hecho se ha dado TRES veces en la historia El presidente es elegido
por cuatro años. En la fórmula original de la Constitución, era
indefinidamente reelegible.

2. La Organización de la Presidencia: Se puede distinguir el gabinete y


el “Despacho”. El gabinete está formado por secretarías y
departamentos. Éstos son designados por el presidente de acuerdo
con el Senado. Los ministros sólo dependen del presidente, que puede
destituirlos cuando quiera. No tienen una política personal, sino que
son auxiliares del presidente; éste decide solo. Los ministros no
constituyen un gabinete en el sentido técnico del término, es decir,
un órgano colectivo con poder de decisión.

El Despacho del presidente comprende colaboradores directos de él:


luego la Oficina de Presupuestos, que ayuda al presidente a preparar
el presupuesto y el programa fiscal; el muy importante Council of
Economic Advisers, formado únicamente por tres consejeros y
encargado de preparar el informe económico semestral del Presidente
al Congreso y la parte económica del mensaje sobre el estado de la
Unión; finalmente, una oficina del personal. También se vincula al
Despacho del Presidente el Consejo Nacional de Seguridad, así como
otros consejos y oficinas. Pero se trata, más bien, de organismos
consultivos permanentes.

3. Los poderes del Presidente: El derecho de gracia, vigilar la


ejecución de las leyes, tiene la potestad reglamentaria. Los
secretarios y determinadas oficinas poseen también esta potestad, en
un marco más restringido, en forma de rules and regulations. El
presidente es el jefe de la administración federal. Nombra todos los
funcionarios federales (algunos de ellos, como hemos visto, con el
acuerdo del Senado); puede revocarlos sin pedir opinión al Senado,
en la media compatible con las reglas del Civil Service. El desarrollo
de las garantías para los funcionarios ha limitado el “sistema de los
despojos” aplicado desde la época del Presidente Jackson y que
convertía los puestos administrativos en una recompensa para los
miembros del partido que habían contribuido a la victoria electoral.
Pese a todo, la administración norteamericana está más politizada
que la inglesa y la francesa: depende, pues, estrechamente del
presidente. Por lo demás, éste no se limita a nombrar y revocar, sino
que posee un derecho de inspección generalmente sobre todos los
servicios y un poder de decisión supremo. El presidente tiene
funciones muy importantes en materia de política exterior. Asegura la
dirección de las relaciones diplomáticas, nombra a los embajadores y
los cónsules, procede al reconocimiento de los Estados, negocia y
concluye los tratados. En materia militar es el comandante en jefe de
los ejércitos. En época de crisis, los poderes del presidente se
incrementan todavía más. La Constitución no dice nada al respecto,
pero la tradición es firme: el presidente debe hacer todo cuanto esté
en su poder para mantener el orden y asegurar la vida de la nación y
su continuidad. En época de guerra, el presidente tiene poderes casi
dictatoriales sobre la persona y los bienes de los ciudadanos.

4. Las relaciones entre el Presidente y el Congreso: El Congreso no


puede obligar al presidente a dimitir; el presidente no puede disolver
el Congreso. Pero sería un grave error creer que los dos órganos están
absolutamente separados. El presidente dispone en primer lugar, de
un derecho de veto respecto a las leyes votadas por el Congreso; el
veto presidencial sólo puede ser neutralizado mediante un voto de
cada una de las cámaras con una mayoría de dos tercios. El
presidente participa en la iniciativa de las leyes. Los presidentes se
limitaban a sugerir al Congreso la adopción de una ley sobre una
cuestión determinada. Hoy se tiende a volver al sistema primitivo.
Estos “mensajes sobre el estado de la Unión” están previstos por la
Constitución, que obliga al presidente a tener al Congreso al corriente
de la vida del país. El presidente siempre puede hacer presentar
proyectos de ley por un parlamentario miembro de su partido. El
patronaje sigue siendo muy importante. La amistad del presidente
permite a los senadores y a los representantes colocar de este modo
algunos protegidos. El presidente es, de hecho el líder de su partido.
El apoyo de la opinión pública es un elemento fundamental del poder
presidencial. El presidente tiene un gran prestigio entre el pueblo
norteamericano, mucho más desde luego que los congressmen. Por el
poder legislativo y el financiero (tiene los cordones de la bolsa) puede
limitar eficazmente al ejecutivo, al que por otro lado, controla
estrechamente gracias a los poderes judiciales de sus comisiones de
investigación.

EL TRIBUNAL SUPREMO Y EL CONTROL DE LA


CONSTITUCIONALIDAD. El poder de controlar la constitucionalidad
de las leyes no pertenece tan sólo al Tribunal Supremo de los Estados
Unidos, sino a todos los Tribunales federales o de Estado, sea cual sea
su grado. En el Tribunal Supremo se pueden remitir finalmente todos
los asuntos. Sólo él tiene un gran prestigio y una real influencia
política.

1. La organización del Tribunal Supremo: Se compone actualmente de


un presidente, el Chief Justice, y ocho jueces, nombrados con carácter
vitalicio por el presidente de la nación, de acuerdo con el Senado.
“Un miembro del Tribunal Supremo no dimite nunca y raramente
muere”. Los nombramientos de miembros del Tribunal Supremo
tienen a menudo un carácter político; pese a todo, los presidentes
observan ciertas tradiciones destinadas a equilibrar la composición
del tribunal tanto desde el punto de vista político como desde el
punto de las minorías raciales o religiosas. Su presidente es el
segundo personaje del Estado, después del presidente de la nación.
Tiene más importancia y más prestigio que el vicepresidente.

2. Los poderes del Tribunal Supremo. Asuntos: unos en primera


instancia (cuando son partes un embajador, un cónsul, un ministro,
Estado), otros en apelación (es el caso más frecuente). El Tribunal sólo
puede tomar decisiones si participan seis de sus miembros. Este
derecho de controlar la constitucionalidad de las leyes no inscrito de
modo expreso en la Constitución de los Estados Unidos, que prevé,
más bien, los conflictos entre las leyes federales y las leyes de los
estados.

LAS INSTITUCIONES POLÍTICAS DE LOS ESTADOS

LAS LEGISLATURAS.- Salvo en Nebraska, todos los estados tienen dos


cámaras, el Senado y la Cámara de representantes. El bicameralismo
no tiene ninguna razón de ser y hay quien habla de suprimirlo.

LOS GOBERNADORES.- En general, el gobernador es elegido mediante


sufragio popular directo; a veces los electores eligen delegados para
una convención de Estado, que es la que designa al gobernador.

LA DEMOCRACIA SEMIDIRECTA.- El rasgo original de la


organización de ciertos Estados es la existencia de procedimientos de
democracia semidirecta. Existe un derecho de iniciativa popular en
una veintena de estados: un grupo ciudadanos puede presentar un
proyecto en forma de petición, a condición de recoger un número
determinado de firmas ( de 8 al 10 por ciento del cuerpo electoral, por
término medio). En el caso de la iniciativa “directa”, el proyecto es
votado por los electores mismos (al mismo tiempo que la próxima
elección regular, en general; a veces, con ocasión de una votación
especial); en el caso, más frecuente, de iniciativa “indirecta”, el
proyecto es sometido es sometido a la Legislatura; si ésta lo rechaza,
se procede generalmente a un referéndum. En conjunto, los
resultados de la iniciativa popular han sido malos, pues las leyes
adoptadas con ese procedimiento, son generalmente muy
conservadoras. El referéndum a veces es facultativo, es decir, que las
cámaras deciden si el proyecto votado por ellas debe someterse o no
al voto popular; lo más frecuente es que sea obligatorio. Pero, en
general, toma la forma técnica de un veto popular: dentro de un plazo
fijo, una petición redactada por un cierto número de electores
reclama un referéndum; a falta de esta petición, la ley se aplica sin
referéndum. En varios Estados existe una institución muy original: el
recall (la revocación). Se trata de la destitución de un funcionario o de
un diputado por voluntad de los electores. El procedimiento se pone
en marcha por petición de un cierto número de electores (del 10 al
35 por ciento) reclamando dicha destitución; acto seguido se celebra
una elección en la que se pueden presentar otros candidatos, además
del funcionario en cuestión. Es elegido el que obtiene más votos.
Generalmente se exige un cierto plazo (seis meses) y un funcionario
sólo puede ser sometido al recall una vez durante su mandato. El
sistema funciona sobre todo en el plano municipal, pero 12 estados lo
han adoptado en el plano estatal. En la prática, apenas se aplica. Se
cita únicamente el caso de un gobernador víctima del recall, el de
Oregón en 1921.

LOS PARTIDOS POLÍTICOS. Los Estados Unidos tienen un régimen


de bipartidismo muy diferente del bipartidismo inglés. Los partidos
políticos norteamericanos son muy originales por su estructura, su
papel y su significación.

1. La carencia de ideología. En general, los partidos políticos se


caracterizan a la vez por una cierta ideología y una cierta
infraestructura social. Las diferencias son mucho mayores dentro de
cada partido, que entre los dos partidos. Los demócratas del Sur son
más reaccionarios que muchos republicanos.

2. La organización de los partidos americanos. “Partido de cuadros” ,


que se basa en pequeños comités de notables. El sistema de las
“elecciones primarias”, que será estudiado más adelante, tiene como
efecto, en algunos Estados, el registro o censo de todos los electores
de un partido. Los partidos americanos se organizan de modo
esencialmente descentralizado. No existe, de hecho, una autoridad
federal sobre todo el partido: únicamente el presidente de los Estados
Unidos aparece como líder del partido mayoritario, aún cuando
frecuentemente se trata de un líder sin autoridad real; el “comité
nacional” al frente de cada partido no tiene ningún poder. Más que
referirse a dos partidos norteamericanos, seria necesario hablar de
los 100 partidos norteamericanos, puesto que existen 50 partidos
demócratas y 50 partidos republicanos casi independientes, a razón
de uno por cada estado. La “Convención Nacional”, que reúne a sus
delegados cada cuatro años para la designación del candidato a la
Presidencia, constituye una especie de asamblea de señores feudales
omnipotentes.

3. La función oficial del partido: las “nominations”. La “primaria”


consiste en una elección directa de los candidatos por el conjunto de
electores, organizada oficialmente al modo de las elecciones
propiamente dichas. Tres son los tipos de primarias: las primarias
cerradas, las primarias abiertas y las primarias “no partidistas”. En las
primarias cerradas, los electores deben declarar oficialmente si son
demócratas o republicanos: su afiliación al partido se registra y es
hecha pública. Cada elector recibe la papeleta (ballot) del partido al
que se declara afiliado: en esta papeleta figuran los nombres de los
“candidatos a la candidatura” para cada uno de los puestos que
deben someterse a elección; el elector señala con una cruz a aquel
que desea como candidato de su partido la próxima elección, que
tiene lugar algún tiempo más tarde. En las primarias abiertas, no se
da la afiliación pública: cada elector recibe dos papeletas, una
demócrata y otra republicana, de las cuales utiliza solamente una, del
modo indicado anteriormente. En las “primarias no partidistas”, que
se celebran e Minessota y Nebraska, una sola papeleta contiene para
cada cargo los nombres de todos los candidatos a la nomination, sin
indicar la pertenencia al partido. El sistema de las primarias ha sido
establecido para disminuir la influencia de los comités de partido.

“GRUPOS DE PRESIÓN” Y “LOBBYING”. Más que por los partidos,


la vida política americana está animada por los pressure groups
(grupos de presión).

1. Los modos de acción de los grupos de presión. Son muy diversos.


De manera general, los grupos actúan simultáneamente sobre la
opinión pública, sobre los partidos y sobre los gobernantes.

2. Los intentos de control de los grupos de presión.

EL LOCALISMO DEL CONGRESO. El “localismo” acentuado de los


parlamentarios. Senadores y representantes se preocupan ante todo
de los problemas de su Estado y no atribuyen más que un interés
moderado (salvo excepciones) a los problemas nacionales, y más
moderado todavía a los problemas internacionales. “Espíritu de
campanario”.

EL SISTEMA ELECTORAL DE LOS ESTADOS UNIDOS: SUFRAGIO


DESIGUAL Y SUFRAGIO RESTRINGIDO. De hecho, en muchos estados,
el derecho de sufragio es un derecho restringido por la misma
legislación electoral que, como es sabido, es de competencia estatal.
Todavía más sorprendente es el carácter desigual del voto. En la
Cámara de Representantes, se da un cierto sobre-representación de
los grandes estados, junto con una sub-representación de los más
pequeños.

EL VICEPRESIDENTE. John Adams decía “Se trata de la función más


insignificante que el ingenio humano ha podido inventar”. Su función
esencial consiste en sustituir al presidente, en el caso de muerte,
dimisión o impedimento en el ejercicio de sus funciones. En este caso,
el vicepresidente se convierte en presidente hasta el término del
mandato del presidente sustituido (pudiendo presentarse a las
elecciones presidenciales, con la limitación de que no puede aspirar a
dos mandatos sucesivos, en el caso de que haya sustituido al
presidente anterior durante un periodo superior a dos años). Además
de este papel de espera, el vicepresidente es presidente del Senado,
en el que sólo vota en caso de empate, con lo que su voto es
decisivo.
EL DESARROLLO DE LAS COMISIONES ADMINISTRATIVAS. Oficinas
administrativas autónomas, denominadas “comisiones
independientes con poder reglamentario”. Regulan y controlan la
actividad privada, en gran número de campos: trabajo, crédito,
banca, comercio, comunicaciones, energía eléctrica, etcétera...
Presentan dos caracteres esenciales: a) no reciben órdenes del
presidente y sus miembros no pueden ser libremente depuestos por
aquél; b) poseen poder reglamentario propio. Algunas poseen
igualmente atribuciones judiciales.

LAS DIFICULTADES DEL EJECUTIVO AMERICANO. El sistema


presidencial americano presenta ventajas muy considerables: unidad
de visión, estabilidad de poder, eficacia, y rapidez en la acción. Si el
poder legislativo americano funciona, en su conjunto, bastante mal, el
ejecutivo, por el contrario, lo hace bastante bien. Sin embargo, un
reverso de la medalla, que deriva de la inmensidad de las tareas
atribuidas al presidente. Todas las decisiones importantes, en todos
los campos, dependen de él. De hecho, le resulta difícil tomarlas. Los
secretarios asumen muchas de ellas; pero la ausencia de solidaridad
ministerial y la independencia de los departamentos son, a menudo,
insolubles cuando no poseen la suficiente importancia para llegar
hasta el arbitraje presidencial.

LA DEMOCRACIA ANTE LA GLOBALIZACIÓN: Los Estados Unidos


no son solamente la primera potencia mundial: son la única.

Tal pareciera que se han convertido en el gran juzgador del mundo y


que se aplique la ley a todos menos a ellos, como si fuera la
soberanía de los estados de la comunidad internacional diferente a la
de ellos.

El gran pretexto para ello es su dizque cruzada contra el terrorismo


sin atacar las verdaderas causas de éste que se llaman pobreza,
subdesarrollo, humillación, injusticia y también la cotidiana
comparación entre la triste realidad de todos los días y la
esplendorosa realidad cosmética, rubia, refinada, rica, depilada y
motorizada que la publicidad y los medios exhiben en todas partes y
a todas horas en medio del hambre y marginación de tres mil
millones de seres humanos. El terrorismo quiere polarizar estas
diferencias y comete atrocidades con la esperanza de que se apliquen
prontas represalias. La guerra contra el terror puede consumir todo lo
demás, alimentando tan sólo sus propias llamas. Que los terroristas
no seduzcan a los pobres pero no hay economía de mercado sana si
los pobres quedan fuera del mercado, sin títulos de propiedad o con
posesiones precarias, sin crédito y sin acceso a la justicia. El
desarrollo es la única cuña posible entre el terrorismo y los pobres.

Hasta ahora, los gobiernos del mundo en desarrollo han obrado con
buen juicio a favor de la macroeconomía: han estabilizado la moneda,
han equilibrado el presupuesto de egresos, han privatizado (aunque
no con justicia o con éxito). Ha llegado la hora de pasar a la
microeconomía, al capitalismo desde abajo. Los pobres podrán tener
activos pero no tienen títulos de propiedad, seguridad y justicia. Hay
una gran disparidad entre las instituciones globales, fuertes en
comercio y finanzas pero débiles en términos sociales. El capitalismo
sirve para generar riqueza pero no para satisfacer necesidades
sociales.

Las propuestas contra la desigualdad y el terrorismo: ¿basta con


transferir recursos de países ricos a países pobres? No, en la medida
en que la asistencia es armada para servir más a los que dan que a
los que reciben. No, si acaba la asistencia en manos de gobiernos
corruptos y autoridades incompetentes. En cambio, si la asistencia se
presta bajo forma de Derechos Especiales de Giro, o sea, de activos
internacionales de reserva que sirven como unidad de cuenta y medio
de pago entre estados, la aplicación concreta de recursos puede ser
controlada y administrada con honestidad y eficacia por Consejos
Meritorios, es decir, formados por individuos de probada capacidad y
honestidad dentro de la sociedad civil. Éstos elegirían los programas
de desarrollo y controlarían su aplicación canalizándolos a través de
organismos no gubernamentales. La otra solución para fortalecer la
democracia económica es activar el mercado interno.

EL SISTEMA POLÍTICO NORTEAMERICANO Y SUS ORÍGENES

El sistema político de los Estados Unidos ha sido determinado


por una gran área territorial, una historia breve, un pueblo joven y
móvil, una sucesión de fronteras que se desplazan y vastos recursos
de riqueza y oportunidad. También ha sido determinado por
individuos y grupos de intereses en competencia; imágenes
desiguales e inciertas de la legitimidad y los hábitos de obediencia;
gran influencia y poder concedidos al dinero y una insistencia general
en la continuidad visible global de la moral y de la cultura básicas de
la nación.

A pesar de sus diversidades y conflictos internos, el sistema


político ha preservado la unidad.

Los Estados Unidos son la primera de las naciones surgida en


América; nacida de una revolución anticolonial, enfrentó los
problemas de construcción de una nación en ciernes. Desde 1791 los
Estados Unidos han tenido el sistema político constitucional más
antiguo, de funcionamiento normal, en el mundo. Comparados con el
de Estados Unidos , todos los demás sistemas políticos han
experimentado cambios más radicales en tiempos recientes.

En menos de dos siglos, el sistema político norteamericano ha


podido organizar un país con dimensiones de continente; dicho
sistema ha triunfado porque desde el principio se basó en una
economía próspera. Durante largo tiempo, esta economía fue casi
automática porque al inicio de la República no había ningún tabú
dogmático que se opusiera a la acción del gobierno en cuestiones
económicas, pero la mayor parte de la expansión de la frontera corrió
a cargo de los particulares, no del gobierno. La mayor parte de
agricultura, las manufacturas, la minería y los transportes del país,
quedó en manos de individuos que en forma espontánea buscaban
beneficios, y se guió en forma automática por el mecanismo del
mercado; el país se encontraba extraordinariamente bien dotado de
mano de obra altamente calificada, además de que los inmigrantes
que llegaron traían capitales muy regulares.

Una de las características primordiales de los Estados Unidos


es su forma de Estado Federalista , que a la sazón era una idea
radicalmente nueva en su aplicación a escala continental e incluso
mundial, este diseño federal combinaba un Congreso Legislativo,
representante del pueblo y de la diversidad de estados, y un solo
primer mandatario para dirigir el poder de la nación. En esa unión
federal, todo individuo está sujeto a la vez a dos gobiernos que
parcialmente son independientes entre sí. El gobierno federal y el
gobierno de cada estado tienen un alcance separado pero un dominio
común, es decir, a quien gobiernan. El federalismo funcionó en
Estados Unidos por la combinación de dos razones básicas. En primer
término, los estadounidenses se convirtieron pronto en un solo pueblo
y se identificaron a sí mismos como tal. En segundo, existía una
antigua tradición de estados independientes y autónomos. La
combinación de ambas razones ayudó a establecer el equilibrio
funcional entre el gobierno local y el nacional que es la esencia del
federalismo. La fórmula federal permitió que los estados grandes
acreditaran el mayor número de representantes en la cámara
respectiva, a la vez que los estados chicos encontraban un punto de
equilibrio en la Cámara de Senadores que es paritaria.

También existe la separación formal de poderes. Para asegurar


la independencia de las tres ramas de gobierno, y al mismo tiempo
asegurarse de que las tres integrarán un gobierno coherente, se
desarrolló un sistema de controles y equilibrios.

Otra invención política ha dado a la Legislatura Nacional


Estadounidense su fisonomía distintiva. Esta invención es la relación
que se establece entre, los estados grandes y pequeños y su
representación el Congreso.

El sistema bicameral o bicameral para acomodar los intereses


de los estados grandes y pequeños en una unión federal de
dimensiones continentales fue un invento de los Estados Unidos.
REPRESENTACIÓN DEL PUEBLO POR SU NÚMERO

La Cámara de Representantes.- En la cámara de


representantes está representado el pueblo cada cierto número de
habitantes determinados por la ley: originalmente uno por cada
30,000, ahora uno por cada 500,000. Este órgano se compone de 453
miembros.

Los representantes congresistas, son elegidos directamente


por el pueblo para períodos de dos años. La elección se hace en
distritos electorales, que deben ser iguales en población. Para lograr
esta igualdad, se supone que los distritos son reajustados, dentro de
los estados como entre ellos, después de cada censo decenal. La
forma del ajuste dentro de cada estado, así como los requisitos para
votar, se deja a la discreción de la legislatura estatal, mientras que la
asignación de distritos a los estados corresponde al Congreso.

En la práctica, la representación en esta Cámara ha resultado


mucho menos igualitaria. Aunque se supone que los distritos deben
ser reajustados cada diez años, a principios de la década de 1960
había algunas legislaturas estatales que habían olvidado esta
obligación por medio siglo. Muchos legisladores de los distritos rurales
se estaban beneficiando de esta negligencia porque no tenían que
compartir su poder con los representantes de las áreas urbanas de
más rápido crecimiento.

En los estados, los esfuerzos importantes tendientes a lograr


una distribución justa de los distritos del congreso sólo adquirieron
vigor en la década de 1960, y eso, con el auxilio de los tribunales.

Para fines de los años sesenta la doctrina de “un hombre un


voto” se había establecido por decisión de la Suprema Corte de los
Estados Unidos, y los tribunales estaban empezando a exigir que los
planes de modificación de distritos, para que fueran constitucionales,
debían lograr que los distritos no variaran en más del 10% en cuanto
al número de sus votantes. Este principio lo aplicaron también los
tribunales a las legislaturas estatales.

Es posible que el período de dos años de los representantes


haya tenido un efecto similar. Esta disposición pretendía mantener a
cada representante en estrecho contacto con sus representados, pero
ha hecho que muchos congresistas tengan que participar, en los
distritos disputados, en campañas de reelección costosas y casi
permanentes, lo que les deja poco tiempo libre para lo que debiera
haber sido su principal responsabilidad: la de legislar para el pueblo.

Los legisladores de un solo partido, son reelectos una y otra


vez; gracias a la costumbre congresista del decanato (que concede la
presidencia de los comités a los legisladores que tengan mayor
antigüedad en la Cámara) dominan los comités importantes de la
cámara y con ello gran parte de la labor legislativa.

Estas condiciones han condenado a muchos electores


urbanos de distritos disputados a una sensación de indefensión. Aun
cuando puedan elegir a un congresista a su gusto, raras veces
progresará en el congreso, aun cuando los votantes pueden cambiar
a sus representantes cada dos años, les llevaría de diez a veinte años
lograr que su representante llegara a encabezar un comité
importante en la Cámara.

REPRESENTACIÓN DEL PUEBLO POR ESTADOS.

EL SENADO.- Mientras que una rama del Congreso debía


representar al pueblo de todas las regiones del país en forma más o
menos igual por cada individuo, la otra debía representarlo
desigualmente como individuos, pero igualmente como estados. Por
esta razón los estados pequeños de la Unión, inferiores a los más
grandes en población y en poder político efectivo, tienen la misma
representación en el senado que sus vecinos más grandes: dos
senadores por estado.

Los estados pequeños son virtualmente unipartidistas, pueden


obtener una influencia desproporcionada en el senado a través del
sistema de antigüedad que con el tiempo tiende a colocar a sus
senadores a la cabeza de los particulares comités del estado.

Los autores de la Constitución esperaban que el senado


sirviera como contrapeso a la Cámara de Representantes. Creían que
los senadores serían más viejos, más conservadores y más
representativos de las élites establecidas de sus estados, a quienes
un escritor del siglo XVIII llamó “ricos, bien nacidos y sensatos”.

Como veremos, no ha sucedido exactamente así desde 1912 en que


se estableció el voto directo para elegir senadores.

Los senadores son elegidos para un período de seis


años, para que gocen de mayor estabilidad e independencia
durante su ejercicio.

En 1912, la Decimoséptima Enmienda a la Constitución


estableció la elección directa por el voto mayoritario de los electores
que “ tengan los requisitos necesarios para los electores de la rama
más numerosa de las legislaturas estatales”. El efecto de este cambio
ha variado algo en diferentes regiones. En la mayoría de los estados
del norte y el oeste los votantes registrados constituyen una gran
parte de la población adulta, aunque , como hemos visto, de ninguna
manera la totalidad. En algunos estados sureños, debido a diversas
prácticas discriminatorias contra los negros y los pobres, menos, de la
mitad de la población adulta se ha registrado para votar, y menos de
una cuarta parte ha votado efectivamente.

Dado que el Senado debe representar a los estados por igual ,


independientemente de su población ha sido particularmente sensible
a las diferencias regionales o seccionales, y más desconfiando de las
mayorías nacionales simples.

Los senadores deben ser electos por los votantes de todo un


estado, de manera que en este caso no tiene efecto la desigual
distribución de los distritos de votación. En esta forma los votantes de
las áreas urbanas e industriales de cada estado tienen toda su
porción de influencia en la elección de senadores. También resulta
mucho más difícil a una maquinaria política, un grupo étnico, o un
grupo especial de interés, dominar todo un estado, en comparación
con la relativa facilidad con que estos grupos pueden barrer en un
distrito.

Para lograr su reelección la mayoría de los senadores deben


responder a los intereses rurales y urbanos de sus estados, a muchos
grupos étnicos diferentes y a distintos grupos de intereses
económicos, y a los votantes independientes que pueden significar la
diferencia en muchos estados bipartidistas. Estas condiciones
favorecen a menudo a la selección de candidatos con mayor
inclinación d estadistas y el período de seis años les confiere una
oportunidad mejor para labrarse una historia de realizaciones.
Aunque muchos legisladores de la Cámara de Representantes, al igual
que los del Senado, han hecho su mejor esfuerzo para servir al bien
público en la medida de sus capacidades, el prestigio de los
senadores ha sido generalmente mayor, tal vez justificadamente.

LA REPRESENTACIÓN LEGISLATIVA Y LA POLÍTICA ESTATAL.

Al nivel estatal, al igual que al nivel nacional, las legislaturas


bicamarales constituyen la regla general (sólo Nebraska tiene ahora
una legislatura de una sola cámara). También en los estados la
tendencia del siglo XX se ha orientado a la elección directa de ambas
cámaras.

A la inversa de la política al nivel nacional, la política estatal


se ha caracterizado más a menudo por distritos desiguales, o distritos
de forma irregular, deliberadamente diseñados para favorecer a un
partido a costa del otro.

Aunadas a requisitos de residencia restrictivos y otras leyes y


prácticas del registro de votantes, estas condiciones han favorecido el
dominio de muchos estados por maquinarias políticas bien
pertrechadas a nivel estatal, de condado y de municipio. En años
recientes, la industrialización, la migración masiva y la creciente
participación de gran número de personas en política, han ejercido
presión decreciente sobre estas prácticas antiguas.

La lucha por el control político a nivel estatal ha sido un factor


persistente en el gobierno de los Estados Unidos, ya que la política
estatal es crítica para el funcionamiento del sistema federal. Esta
política afecta en cuatro formas al sistema federal. En primer lugar,
controla indirectamente la nominación y elección de todos los
senadores de los Estados Unidos, o sea , la composición de una de las
ramas de la legislatura federal. En segundo, los principales partidos
políticos del país son realmente poco más que federaciones de las
organizaciones estatales de partido. Estas organizaciones controlan
más fuerza de trabajo y recursos que el Comité Nacional del Partido
en consecuencia, los dos partidos nacionales dependen críticamente
de la influencia y el patronazgo de que disfruten en cada estado. El
control de los partidos nacionales se gana o se pierde a menudo al
nivel estatal. Sin el control de empleos y favores al nivel estatal, un
partido no puede mantener unida a gran parte de su organización. Sin
tal control un partido puede permanecer durante muchos años fuera
del poder nacional.

En tercer lugar la organización del partido en cada estado


desempeña a menudo un papal decisivo en la nominación y elección
de candidatos a la Cámara de representantes de los Estados Unidos .
Finalmente, la Política estatal, los partidos estatales y en ocasiones
las elecciones primarias estatales, determinan a menudo la
nominación de los candidatos de los principales partidos a la
presidencia de los Estados Unidos. En este sentido, la maquinaría
partidista de cada estado tiende a adquirir mayor importancia que los
votantes del partido. Así pues, la política estatal ejerce
frecuentemente una influencia directa sobre la composición del
Congreso y una influencia indirecta pero poderosa en la selección del
primer mandatario de los Estados Unidos.

LA PRESIDENCIA Y EL PODER EJECUTIVO.


El empleo más exigente del gobierno federal es la presidencia
de los Estados Unidos. Este puesto es el órgano más original de la
Constitución, el que distingue a ésta de los demás regímenes
democráticos occidentales y hace de ella su régimen presidencial.

La presidencia ha sido siempre el puesto más poderoso y con


el advenimiento de las armas nucleares, se ha convertido en uno de
lo más poderosos del mundo.

LA ELECCIÓN DEL PRESIDENTE.- El presidente y el


vicepresidente estadounidenses son elegidos para un período de
cuatro años, y el presidente no puede servir por más de dos períodos.
Ambos son elegidos por todo el pueblo y, en su elección, los votantes
individuales tienen un peso más aproximadamente igual que en la
elección de cualquier otra rama de gobierno.

Sin embargo, aun aquí no es completamente igual la


ponderación de los votos. Como cuestión de forma, el presidente es
elegido indirectamente por un Colegio Electoral. Cada estado tiene un
número de electores igual a la suma de senadores y congresistas; y
su legislatura estatal puede regular el nombramiento o la elección de
estos electores en la forma que estime conveniente. Ese arreglo
favorece algo a los estados más pequeños, puesto que aun los más
pequeños entre ellos tienen por o menos dos senadores y un
representante, de manera que no pueden tener menos de tres votos
en el Colegio Electoral.

La elección del presidente ha resultado efectivamente del voto


popular, y la mayoría de los votantes así lo perciben. Lo electores se
comprometen generalmente a votar por un candidato particular; la
mayoría de los votantes no saben ni les interesa quienes sean los
electores que les prometen emitir sus votos por el candidato que
elijan los votantes.

También es legalmente posible que un elector rompa su


promesa a los votantes y emita su voto por otro candidato. La
Constitución no establece remedio alguno para tal violación de la
disciplina del partido o de la fe de los votantes. Sólo en seis estados,
la ley obliga a los electores a votar por el candidato que sugiere la
votación popular.

El presidente es el único funcionario de gobierno de los


Estados Unidos elegido por los votantes de toda la nación.

En la práctica la presidencia es la rama del gobierno más


sensible a los votantes urbanos e industriales y a las necesidades de
las minorías étnicas, religiosas o raciales. El mecanismo que asegura
esta sensibilidad descansa en la composición del Colegio Electoral y
en el papel decisivo y que juegan dentro del mismo los siete estados
más grandes, altamente urbanos e industriales comprenden una alta
concentración de minorías y los votos de cada estado se deben emitir
como una unidad. Por lo tanto, un candidato presidencial debe ganar
o perder cada estado como un todo; y para ganar depende en gran
medida de los votantes urbanos, industriales y de grupos minoritarios
de cada estado.

Esta disposición de que el ganador se lleva todos los votos


electorales de cada estado que representa, es en cierto sentido, una
injusticia contra los votantes del partido perdedor. Sus votos no
cuentan, y tal vez preferirían algún esquema de representación
proporcional entre los lectores de su estado.

A fines de la década de 1960, se discutieron varias propuestas


para reformar el procedimiento de las elecciones presidenciales.
Parecía existir un amplio consenso en el sentido de que el Colegio
Electoral debía ser sustituido por el voto directo del pueblo, pero no
había acuerdo entre conservar la regla de la mayoría dentro de cada
Estado o sustituirla por algún esquema de representación
proporcional.

Dado que el presidente es parte esencial del sistema debe ser


prontamente sustituido en caso de muerte o incapacidad se han
elaborado reglas detalladas por la sucesión presidencial a fin de
garantizar una transferencia de poder rápida y pacífica: si el
presidente muere en el cargo, lo sucede el vicepresidente. Si
muriesen el presidente y vicepresidente el presidente temporal del
Senado, al secretario de estado, al secretario del tesoro y al resto del
gabinete.

TEORÍA DE LOS PARTIDOS POLÍTICOS

Bajo la denominación de partidos políticos se integra una gran


variedad de organizaciones de características diversas pero
trataremos de dar un concepto para lograr una definición acabada de
estas agrupaciones siguiendo las ideas de los autores renombrados.

Para Max Weber, “el partido político tiene como fin proporcionar poder
a sus dirigentes dentro de una asociación y otorgar por ese medio a
sus miembros activos determinadas posibilidades ideales o materiales
(la realización de bienes objetivos o el logro de ventajas personales o
ambas cosas)”.

Para Andrés Serra Rojas, es “un concepto de hombres y mujeres que


son ciudadanos en el pleno ejercicio de sus derechos cívicos y que
legalmente se organizan en forma permanente para representar a
una parte de la comunidad social con el propósito de elaborar y
ejecutar una plataforma política y un programa nacional con un
equipo gubernamental”.

Luis Sánchez Agesta nos dice que por partido político debe
entenderse a “aquellos grupos societarios y secundarios cuyo fin
inmediato es la posesión y el ejercicio del poder político organizado
para establecer, reformar o defender un orden como articulación de
los fines que responden a las convicciones comunes de sus
miembros”.

Para Jesús Anlén es la “asociación legal creada por un grupo de


ciudadanos, con carácter permanente, en torno a una declaración de
principios y programa de acción para la conquista o conservación del
poder estatal”.

Almond y Powell sostienen que “el partido político debe ser


considerado como la estructura especializada de integración (de
intereses) en las sociedades modernas”.

Para Coleman y Rosberg son “asociaciones formalmente organizadas


con el propósito explícito y declarado de adquirir o mantener un
control legal, bien solos, o en coalición o en competencia electoral
con otras asociaciones similares, sobre el personal y la política de
gobierno de un determinado estado soberano”.

Según F. W. Riggs “cualquier organización que nombra candidatos


para su elección a un parlamento”.

Weber, Coleman y Rosberg acentúan la finalidad de alcanzar el poder


como esencia, sin mencionar los aspectos programáticos o la
consecución de fines e ideales deseables para la comunidad. En
Burke, la persecución de interés nacional es lo que aparece como
fundamental. Este autor esta influido por las nociones de la época en
la que vive (fines del siglo XVIII), en la que parecía indispensable
resaltar la supremacía del iteres de la nación frente a las tendencias
que aparecieran como divisorias.

La necesidad de compartir principios y convicciones está en las


opiniones de Burke y Sánchez Agesta. El elemento programático que
supone una serie de medidas para ejecutar desde el gobierno, se
encuentra en Serra Rojas, Sánchez Agesta y Anlén.

La participación electoral es resaltada por Coleman y Rosberg. En


cambio, es de éste el único elemento que Riggs toma en
consideración. Desde el punto de vista funcional, Almond y Powell
destacan el proceso de integración y conciliación de diversos
intereses que se efectúan en el seno e ciertos partidos políticos
modernos.
Serra Rojas y Anlén estiman como indispensable la operación legal del
partido, la permanencia de la organización y la calidad que deben
tener sus integrantes.

En maestro Eduardo Andrade nos dice que los partidos políticos son
“agrupaciones organizadas con carácter permanente, cuyo propósito
es gobernar o participar en el gobierno mediante la proposición o
designación de personas para ocupar puestos públicos”.

Este concepto como cualquiera que pretenda tener la virtud de la


concisión, es deficiente, sin embargo, presenta a nuestro juicio la
siguiente ventaja: apunta la importancia de la permanencia que
distingue a los partidos de los movimientos sociales y de las facciones
o clientelas formadas en torno a un caudillo transitorio.

La conformación depende de la realidad social en la que se


desenvuelve y se refiere a la manera como esta gana adeptos o
miembros a partir de los grupos que actúan en la sociedad.

La estructura de un partido, en cambio, está condicionada por la


división territorial que impera en el país y particularmente por aquella
que se emplea para fines electorales.

Podemos resumir diciendo que la conformación tiene una raíz de


contenido social, en tanto que la estructura tiene una base territorial
electoral.

A continuación daremos una tentativa de clasificación teórica de los


partidos políticos:

Partidos de clase y pluriclasistas

A partir de su conformación podemos plantear una primera


clasificación de los partidos: partidos de clase y partidos
pluriclasistas. Los partidos de clase buscan representar los intereses
de una sola clase social, entre la cual reclutan a sus partidarios y
reclaman el poder para los pertenecientes a dicha clase con exclusión
de las demás.

Los partidos pluriclasistas, en cambio, tratan de conseguir a sus


partidarios entre diversas clases sociales, los cuales se identifica por
propósitos comunes y comparten ideas similares con relación a los
problemas nacionales.

Partidos de conformación directa y de conformación indirecta

Cuando el partido admite en su integración a organizaciones


completas, estamos en presencia de partidos de conformación
indirecta. Cuando los partidos sólo admiten adhesiones individuales
se denominan, partidos de conformación directa.
Debemos señalar que, en la práctica, estos tipos de partido no sedan
con absoluta pureza y hay muchos de conformación mixta, que
admiten las dos formas de integración señaladas.

Partidos de cuadros, partidos de masas y partidos electorales

Los partidos de cuadros o de armadura, aparece históricamente


primero y se sustentan en las características de sus miembros
procurando que sean personas conocidas por su labor en su campo
específico y, de preferencia, con nivel de ingresos medio o superior.
Estos partidos no buscan afiliar a una gran cantidad de personas sino
tratan de atraer votos a partir de las personalidades que los
conforman, de entre las cuales surgen candidatos. Su actividad se
reduce propiamente a los periodos electorales.

Los partidos de masas o de membresía, por el contrario intentan


reclutar gran cantidad de miembros, si es posible a través de la
afiliación indirecta que ya explicamos. Animados por una ideología
específica, buscan difundirla entre sus seguidores y por ello su
actividad requiere de mayor permanencia y no se limita a la lucha
electoral. Suplen la falta de financiamiento que se derivarían de
fuertes aportaciones de miembros que disponen de recursos, con
módicas cuotas que recaban entre numerosas membresías.

Los partidos electorales o partidos de atracción como prefiere


llamarles Schwartzenberg, no tienen las características de militancias
típicas de los partidos de masas su estructura es mas bien
oligárquica, aunque su membresía en mayor que las de los partidos
de cuadros y su preocupación principal es atraer a un gran número de
electores mediante consignas que no reflejen un gran compromiso
ideológico y puedan resultar atractivas a buena parte de la población.

Estructura de los partidos

La estructura de los partidos se presenta como una pirámide en cuya


cúspide se encuentra el órgano de dirección nacional, que puede
tener diversos nombres: comisión directiva o ejecutiva, o comité,
como denominación más frecuente. En los diversos niveles
jerárquicos siguen los comités correspondientes a la demarcación
territorial de que se trate. En esta estructura hay comités regionales
que dirigen las actividades del partido en toda una zona del país que
puede abarcar varios estados, provincias o departamentos, después
de los comités dirigentes de estas divisiones territoriales están los
comités de poblado o municipios y, dentro de éstos, se encuentran las
unidades básicas del partido, que son un mínimo grupo de militantes
que responden a un conjunto de dirigentes.

Partidos de acción y partidos de expresión


Los primeros son partidos fuertes que ejercen efectivamente el poder
y pueden ejecutar acciones concretas. Sin embargo, en razón de su
propia dimensión, -en la que conjuntan intereses variados-, tienen
que sacrificar partes de sus demandas mediante transacciones que
les permitan satisfacer otra parte de ellas.

Partidos orientados por el poder y partidos orientados por las


políticas

Los primeros tienden a la obtención y mantenimientos del poder


independientemente de las medidas que tengan que tomar y aunque
ello signifique variar los grados de satisfacción para los diversos
grupos que los apoyan, llegando incluso a sacrificar algunos de esos
grupos a fin de ganar el favor de otro. Los partidos orientados por las
políticas, por su parte, buscarán por el contrario, la adopción de las
medidas que proponen, aunque no sean ellos quienes las realicen
directamente.

Documentos básicos de los partidos

Las finalidades de los partidos y las actividades que tratan de llevar a


cabo se expresan en documentos con carácter de manifiestos o
declaraciones, que tienden a proponer al electorado las acciones que
el gobierno debe ejecutar. Estos documentos adquieren un carácter
esencial para la constitución de los partidos cuando la ley exige la
presentación de los mismos a fin de otorgarles el status legal de
partidos; tal es el caso de la legislación mexicana, que señala
expresamente que toda organización que pretenda el registro como
partido político nacional, deberá presentar su declaración de
principio, su programa de acción y sus estatutos.

• Conforma a la legislación mexicana, la declaración de principios


debe indicar las ideas básicas que rigen la vida del partido y las
metas que se propone alcanzar.
• El programa de acción tiene por objeto indicar a los electores
cómo piensa el partido alcanzar los objetivos que se propone.
• Los estatutos son la ley interna del partido, regulan su actividad
ninterior, su estructura y los procedimientos para la elección de
sus dirigentes y la selección de los candidatos que presenta a la
ciudadanía.

Sistemas de Partidos:

Los partidos no actúan aislados, ni de otros partidos ni en general del


medio económico, político, social y cultural en el que se
desenvuelven. Estas relaciones dan por resultado un esquema
específico de actuación de los partidos en el marco político-social al
que se denomina sistema de partidos. En la politología
contemporánea se suelen distinguir dos grandes grupos de sistemas
partidistas, según que se basen en la competencia da varias
formaciones políticas que se disputan a favor del electorado, o bien
que admitan solamente la existencia de una agrupación política que
por definición legal representa los intereses de toda la colectividad
nacional. A los primeros se les llama sistemas competitivos y a los
segundos sistemas no competitivos.

Clasificación de los sistemas competitivos

I. Sistemas multipartidistas
a. Multipartidismo integral
b. Multipartidismo atenuado

II. Sistemas bipartidistas


a. bipartidismo imperfecto
b. bipartidismo perfecto

III. Sistemas de partido dominante


a. de partido dominante
b. de partido ultradominante

Multipartidismo: supone la existencia de tres o más partidos


políticos con capacidad para lograr una participación relativamente
importante en el seno de la representación nacional.

Multipartidismo puro (multipartidismo integral), donde varios


partidos con fuerzas similares se disputan el electorado, como es el
caso italiano, produce ciertos efectos no siempre favorables para la
estabilidad del sistema.

Multipartidismo atenuado se presenta en aquellos casos que si


bien existen numerosos partidos políticos éstos suelen integrarse en
coaliciones sólidas por virtud de las cuales se forman dos grandes
bloques que permiten resolver algunos de los problemas que hemos
mencionado con respecto al multipartidismo integral.

Sistemas bipartidistas

Estos sistemas se producen en países en que, por su experiencia


histórica se llegan a unir numerosos grupos de interés en torno de dos
corrientes políticas principales que se organizan como partidos y que
enfrentan posiciones contra conservadores.

Los sistemas británico y estadounidense han representado


históricamente el ejemplo mas acabado de bipartidismo perfecto, en
que sólo dos fuerzas aparecen como protagonistas de la lucha
electoral. Debemos mencionar ahora las características del llamado
bipartidismo imperfecto, que se sitúa como frontera entre los
sistemas multipartidistas y los bipartidistas. En el bipartidismo
imperfecto aparecen preponderadamente dos formaciones que
obtienen, cada una, un porcentaje muy elevado de votación, sin
embargo, requiere de una alianza con una agrupación menor para
poder alcanzar la mayoría que les permita controlar el gobierno.

Sistema de partido dominante

Estos sistemas se caracterizan por el predominio de un partido sobre


los demás existentes en el país.

Aunque no alcance la mayoría absoluta de los sufragios, su condición


de partido que cuenta considerable mayoría relativa de lo sufragios,
le permite prácticamente determinar la orientación del gobierno. Se
cree que un partido se pueda considerar dominante debe obtener
aproximadamente entre el 30 y el 35 por ciento de los votos emitidos,
aunque no considere indispensable que logre determinar la formación
de un gobierno estable.

Sistema de partido ultradominante

El sistema de partido ultradominante suele caracterizarse por la


existencia de un partido que logra obtener regularmente la mayoría
absoluta de los sufragios. Estos partidos suelen aparecer en los países
tercermundistas y constituyen grandes condiciones de fuerzas
identificadas por su afán nacionalista.

En estos sistemas el partido ultradominante se distingue del partido


único en que su hegemonía no deriva de una disposición de la ley
sino de la correlación de fuerzas sociales existentes en el país.
Existen efectivamente partidos de oposición que, aunque tengan el
carácter de meros partidos de expresión, aglutinan fuerza
considerables que tienen una efectiva capacidad de hacer escuchar
sus puntos de vista y constituyen un mecanismo de control y acción
sobre la opinión pública con respecto a las medidas tomadas por el
partido mayoritario.

Sistemas no competitivos

Los sistemas no competitivos se caracterizan por la prohibición formal


de la actuación de toda la agrupación política que no sea aquella que
es admitida por el estado. En realidad, en los sistemas no
competitivos encontramos la figura del partido único. Sin embargo,
esta exclusividad de actuación de un partido puede estar motivada
por diversas razones sociales y puede intentar alcanzar distintos
objetivos, de ahí que se establezca una diferenciación en el marco de
los sistemas no competitivos, distinguiendo entre sistema de partido
único revolucionario y sistema de partido único conservador.
El modelo clásico de los partidos únicos revolucionarios es de los
partidos comunistas. En este sistema se parte de la idea de que los
partidos son representaciones de clase y, dado que la finalidad del
régimen comunista es la supresión de las diferencias clasistas –en
teoría-, al desaparecer las diferencias de clases, el pluripartidismo no
solamente es inútil sino imposible y así al “estado de una sola clase”
debe corresponder necesariamente un sistema departido único.

En los sistemas de partido único conservador el partido se propone


conservar un orden de cosas, en ocasiones bajo el disfraz de un
propósito de cambios. El sistema clásico de este tipo es el de los
partidos fascistas desarrollados en Italia y en Alemania entre 1920 y
1945.

ANTECEDENTES Y EVOLUCIÓN HISTÓRICA DE


LOS PARTIDOS POLÍTICOS EN MÉXICO

I. El surgimiento de los partidos: el partido político es un


fenómeno relativamente reciente; en realidad no se asienta en la vida
política de los estados sino hasta bien entrado el siglo XIX, aunque
sus raíces más antiguas pretenden encontrarlas en la Inglaterra del
siglo XVIII. Algunos autores van mas lejos; hablan de la Grecia clásica
donde los hombres libres se unían en grupos a favor o en contra de
determinadas personalidades, sin embargo, esto no ocurría en forma
de partidos organizados sino más bien en uniones espontáneas.

Con posterioridad, la confrontación entre el parlamento y la


monarquía dio lugar a las formas partidistas embrionarias. En torno al
parlamento y para defender la capacidad de este y los intereses de la
burguesía, se formo el grupo de los Whiss que pugnaban por mayor
tolerancia religiosa y un incremento en la participación política. A
favor de los intereses reales se organizaron los Tories, individuos de la
aristocracia tradicional y beneficiarios de la autoridad del rey.

En los primeros tiempos de la democracia representativa no era muy


bien visto el espíritu partidista, por que los facciosos actúan movidos
por el impulso de una acción o pasión común o por un interés adverso
a los derechos de la comunidad en su conjunto. Los partidos
irrumpieron en la vida política y se instalaron como un fenómeno
característico de los estados occidentales industrializados, de ahí fue
exportado al resto de los estados del mundo.
Generalmente los partidos constituyen una agrupación que pueden
ser sindicatos, agrupaciones agrícolas, clubes de discusión política,
asociaciones intelectuales, grupos estudiantiles universitarios, logias
masónicas, sectas religiosas, grupos de comerciantes o industriales.
Independientemente de los orígenes organizacionales de los partidos,
algunos autores han analizado las causas sociales que generan
condiciones para la formación de partidos políticos. Para algunos,
surge con ocasión de los procesos de modernización de los estados,
que incorporan a las masas a la vida política haciendo a esta más
compleja. Algunos sociólogos de la política acentúan la importancia
que tienen los grupos sociales y la crisis social, de participación,
integridad, legitimidad. Todas las crisis pueden resumirse en la
participación, que implica un intento de los sectores sociales de
integrarse en la vida política y tomar parte de ella. La necesidad de
estructuración que da origen a un partido político, se presenta cuando
un régimen se constituye a partir de un movimiento nacionalista o
revolucionario, que llega al poder después de una lucha armada y se
encuentra ante la necesidad de organizar a las fuerzas sociales
triunfantes tal como sucedió en México en 1929 con el PNR.

No concebimos la organización estatal de nuestra época sin la


existencia de partidos políticos, ya sea con carácter exclusivo en una
función organizadora de la sociedad o como entidades competitivas
que se disputan el poder mediante la más variada técnica en los
procesos electorales. La finalidad esencial que define la figura del
partido político es la de alcanzar el ejercicio del poder publico
mediante su acceso al gobierno, sino directamente, si ejerciendo
cierta influencia favorable a los intereses.

En el siglo XIX, que marca en el mundo el principio de los partidos


políticos en el sentido moderno de la palabra, no fue muy rica la
experiencia mexicana en la construcción de este tipo de organismo
social. Durante la segunda mitad del siglo XIX, hay en México
referencias cada vez mayores a los partidos políticos, pero quienes las
hacen son miembros de las capas altas de la sociedad que disponen
de cierta educación e información de lo que ocurre en Europa y
Estados Unidos.

II. Los partidos políticos en el movimiento de Independencia: al


concluir los movimientos independentistas de Hidalgo y Morelos, una
división comenzaba a manifestarse entre las principales
personalidades criollas sobre el porvenir del país. Al intensificarse la
inquietud entre las elites dirigentes como consecuencia de los
acontecimientos que se desarrollaban en España, una primera
tendencia busco organizarse: la de los escoceses, llamada así por que
sus dirigentes se reunían en las logias del antiguo rito masónico
escocés. Este partido nació en 1813 a consecuencia de la
Constitución de Cádiz de 1812 que sostenía en su programa
principalmente el establecimiento del sistema representativo.

Los escoceses que en su mayor parte eran españoles, encontraron su


principal sostén en los oficiales de las fuerzas armadas. En 1819 los
escoceses eran ya mayoritarios y las fuerzas virreinales comenzaron a
declinar ante su fuerza. La Independencia de México se debió en gran
medida a una alianza entre las masas campesinos que luchaban ene
le sur y los dirigentes de la oligarquía terrateniente que manejaba al
partido escocés, es decir, la unión del ejercito popular de Vicente
Guerrero con los criollos conservadores de Agustín de Iturbide.

III. Los partidos políticos en los primeros años del México


Independiente: los años de lucha por la independencia afectaron sin
duda las estructuras del país y una de sus consecuencias fue que se
acentuaron las diferencias existentes entre la clase poseedora y el
resto de la población, así como la escisión entre el estado e iglesia y
entre el centro y las provincias. Esta triple fractura que se acentuó
rápidamente iba a ser el origen de las dos grandes tendencias
políticas o partidos que iban a cortar en dos al México del siglo XIX.
Oficiales del ejército, profesionistas y clérigos, comerciantes y
terratenientes, se dividieron en monarquistas y republicanos; ambas
tendencias se agruparon en las primeras organizaciones políticas de
México llamadas logias masónicas: escoceses los primeros, yorkinos
los segundos.

Los borbonistas o monarquistas aglutinaron a miembros del alto clero,


oficiales del ejército, terratenientes, y los miembros de la burguesía
controlaban el comercio y la minería.
El partido republicano agrupaba a su lado al clero bajo y medio, a los
profesionistas y a una fracción del ejercito. La republica reemplazo al
imperio, pero las instituciones continuaban siendo las de la colonia
española. En los primeros días de vida republicana, elites de México
continuaron divididas en dos partidos, por un lado el partido del
progreso, que exigía la ocupación de los bienes del clero, y por el otro
el partido del orden, que pedía fueros y religión.
Las dos tendencias carecían en realidad de un programa claro de
organización. La primera republica federal (1824-1835) estuvo
caracterizada por la gran inestabilidad de los gobiernos. En el curso
de la administración de Guadalupe Victoria la vida de las logias tendió
a debilitarse. En el seno de los escoceses una escisisión se produjo
cuando los mexicanos dejaron sus logias para formar, bajo la
dirección de Nicolás Bravo a las primeras logias puramente
mexicanas.

Los partidos del progreso fundaron entonces el partido yorkino en


1826. Esta bipolarización de la vida política del país condujo a un
periodo de pronunciamiento y violencia, en el curso del cual los
agentes diplomáticos de estados unidos se aprovecharon para alentar
la división de los mexicanos. En tanto los yorkinos eran
pronorteamericanos, los escoceses eran preeuropeos. El éxito de las
logias fue efímero por la falta de un programa de organización sólida
y los caudillos recurrieron otra vez a las armas. Las dos tendencia
continuaron enfrentándose después como Centralistas y Federalistas,
los primeros se identificaban con el absolutismo de la época feudal,
la intolerancia religiosa e ideológica y la constitución de un poder
central fuerte, el segundo se inclinaba por los cambios sociales, la
separación entre el estado y la iglesia y el respeto a los gobiernos
locales. Todos los miembros del ejercito y del clero, los intelectuales y
las facciones políticas existentes se declararon de una de esas dos
tendencias, no obstante, ni uno ni otro llegaron a constituir
tendencias pólizas organizadas como las que comenzaban a
manifestarse en esa época en Europa y los Estados Unido. La palabra
“partido” empezaba a ser utilizada en América Latina con una
simplificación de vocabulario que representaba una voluntad de
reproducir modelos europeos.

IV. Los partidos políticos durante el Santanismo y la reforma: la


tesis de ambos partidos fueron por lo general mal comprendida por
las masas populares. La Constitución de 1824 autorizaba a los
estados a legislar en materia electoral y la mayoría de ellos adoptaron
un sistema de elección indirecta que no permitía mayor participación
a la población, la cual se despolitizo. Durante la primera República
Centralista (1835-1841) el carácter elitista de la vida política se
acentuó creando un voto de tipo censitario y la elección indirecta en
segundo grado; todo esto en las Constitución de 1836.

Durante la segunda República centralista (1841-1846) se redactó una


nueva Constitución que creo nuevas restricciones en materia de
participación política; el partido centralista llevo poco a poco al país a
la dictadura. En el curso de treinta años de vida independiente los
partidos fueron incapaces de crear un aparato de estado sólido para
instaurar un nuevo orden social político y económico. Siguieron
siendo, más que partidos, tendencias de confrontación continua sin
tentativas por ser organizaciones estables y definidas.

A mediados el siglo XIX las dos tendencias cambiaron de


denominación y comenzaron a identificarse como Liberales y
Conservadores. Luego de la derrota de 1848 con los Estados Unidos,
los militares habían perdido mucho de su prestigio y entonces los
intelectuales dominaron el ámbito político. El debate de las dos ideas
fueron mucho más importantes que en pasado. De esta manera hacia
1848 se vislumbraba en el seno de los liberales la división de puros o
radicales y moderados. Durante treinta y cinco años, las fuerzas delos
partidos conservadores habían detenido toda tentativa de
transformación, pero el movimiento de Ayutla en 1854 inauguró una
nueva etapa en la vida política del país. El Congreso Constituyente de
56-57 presento probablemente la confrontación ideológica mas
importante de los partidos en el siglo XIX; luego de los debates, se
impusieron en el seno del Congreso los Moderados”.
V. Los partidos políticos en la república restaurada y en el
porfiriato: la intervención francesa fue el último choque armado de los
partidos, concluyendo con la derrota militar de los conservadores. La
facción liberal toma el gobierno pero su agrupación en torno a los
clubes, círculos intelectuales y periódicos continuaban siendo un
movimiento carente de estructuras que tenían su principal centro de
reunión en las logias masónicas. Los caudillos militares que se
apoderaron en torno a ellos no fueron más que pequeños grupos de
notables locales. Díaz fue el primero en crear un aparato estatal
fuerte y para eso decidió prescindir de los partidos, por que el
dictador quería eliminar las profundas diferencias que existían en las
élites dirigentes, mismas que comenzaban a producir diferentes
enfrentamientos. Tanto liberales como conservadores y positivistas,
fueron los grupos electorales que pueden verse como verdaderos
embriones de la organización partidaria propiamente dicho. Para la
elección de 1892 la Unión Liberal presentó el partido llamado
“científico”, que había adoptado el positivismo y lanzó la candidatura
de don Porfirio Díaz. Una de esas organizaciones políticas
prepartidarias, pero que insistentemente empieza a llamarse partido
es “el partido científico”. Este partido tuvo inmenso poder controlando
inmediatamente las finanzas, la enseñanza, la agricultura e industria;
era una verdadera oligarquía económica y política dirigida por Ives
Limantour.

La existencia del partido científico permitía a Díaz limitar las


ambiciones de varios grupos y, en particular, a los militares, y en las
elecciones de 1896, a fin de limitar el poder de los científicos, don
Porfirio decidió que un círculo Nacional Porfirista se encargase de su
campaña. En 1903, cuando el viejo cayó enfermo Limantour insistió
nuevamente ante el dictador la necesidad de crear mecanismos
institucionales como un partido de estado ya que la base del
porfiriato descansaba en el prestigio personal del oaxaqueño. Como
resultado de esto Díaz solo acepto crear la vicepresidencia.

De las organizaciones que se constituyeron en el curso de estos años


para oponerse al régimen de la dictadura, dos tuvieron una singular
importancia; la primera fue el club Liberal Ponciano Arriaga y el
segundo fue el partido Liberal Mexicano fundado por Ricardo Flores
Magón; ambas organizaciones sufrieron fuerte represión la existencia
del PLM había contribuido a hacerle perder al régimen su legitimidad
y era urgente que los porfiristas tomaran nuevas medidas.

Después de la entrevista con James Creelman, corresponsal de la


publicación Washington Post, en que el dictador dijo que recibiría
como una bendición la existencia de partidos políticos, los científicos
y los militares comenzaron a desarrollar sus actividades en relación a
la sucesión presidencial, y una nueva serie de organizaciones de
oposición se constituyeron no obstante que las promesas del viejo no
iban a ser mantenidas.
La reelección del casi octogenario sureño para otro sexenio constituía
un riesgo efectivo para el sistema en caso de incapacidad o súbito
deceso. Por un lado, un grupo de militares encabezados por el genera
Bernardo Reyes fundo el Partido Nacionalista Democrático, opuesto a
los científicos, y por otro un grupo de intelectuales constituyeron con
el apoyo de altos funcionarios el Partido Democrático. Ante la división
de fuerzas, Díaz desautorizó al Partido Nacional Porfirista, desorganizó
al revista y estrecho vínculos con los del democrático. En 1909 se
funda el Partido Nacional Democrático. El PLM seguía siendo la
formación más organizada.

VI. Los partidos políticos en la Revolución: al caer Porfirio Díaz, ya


en las elecciones de 1911, Madero disolvió al PNAR pero más tarde
fundo el Partido Constitucional Progresista, en tanto que un grupo de
antiguos porfiristas constituyeron a su vez el Partido Católico, adepto
a Madero y a León de la Barra. En fecha 19 de diciembre de 1919, por
primera vez en una ley mexicana se hablaba de partidos políticos, sin
embargo esos mecanismos no correspondían a la realidad del país.

Madero no pudo contar con el apoyo de Zapata y de las otras


facciones por el hecho e no ofrecer garantías sociales a las clases
mas desprotegidas. También cometió el error de incluir en su gabinete
a miembros destacados del antiguo Partido Científico por lo cual no
dejo contentos a muchos e los que ayudaron a hacer caer al antiguo
régimen. Uno de los adeptos al porfiriato que tuvieron cabida en el
gabinete de Madero fue Victoriano Huerta, el cual, con el apoyo del
embajador de EEUU, Henry Lane Wilson, intrigaron contra Madero
hasta derrocarlo y asesinarlo en febrero de 1913.

El gobierno de Huerta constituyó una tentativa de regresar al antiguo


régimen y su primera iniciativa fue la de oponerse a todos los
partidos políticos. Los zapatitas luchaban esencialmente por tierra y
no vislumbrando un proyecto de estado, no intentaron formar un
partido político.

La Constitución de Querétaro no mencionó a los partidos políticos


pero reconoció como derecho fundamental de los ciudadanos
“asociarse para tratar los asuntos políticos del país” aunque en el
seno del congreso constituyente se habló en dos ocasiones de los
partidos políticos. Es importante señalar que la era de los partidos no
empezó con la oposición del porfiriato ni después de que fuera electo
Madero como presidente de la República, sino más bien que detrás de
las denominaciones partidarias se expresaron otras fuerzas e
instituciones como la Iglesia, el ejercito, los caciques, los caudillos o el
propio estado, más adelante es decir, durante un tiempo muy
considerable la sociedad civil, no expreso sus intereses a través de la
forma de partido, sino a través de otras formas , a las que llegó
encubrir con la denominación de partido.

VII. Los partidos políticos en el México post constitucionalista:


culminada la lucha revolucionaria Luis N. Morones y otros dirigentes
obreros de tendencias reformistas crearon el Partido Socialista Obrero
en Febrero de 1917, el cual pretendía convertirse en el Partido de la
clase proletaria mexicana. Por la falta de bases sólidas en su
estructura esta organización iba sin embargo a desaparecer luego de
su fracaso en las elecciones legislativas de ese año. El más
importante de los partido que se manifestaron en el 17 fue sin lugar a
dudas el Partido Liberal Constitucionalista fundado por varios jefes
militares, encabezados por Benjamín Hill, Álvaro Obregón y Pablo
González, los que se consideraban independientes del gobierno. Este
partido se decía inspirado por lo principios de la revolución Maderista
y después por la Constitucionalista. El segundo partido de
importancia nacional que se organizo a lo largo de estos meses fue el
Partido Nacional Cooperativista, creado por grupos de las capas
medias de la población y en particular por estudiantes y
profesionistas encabezados por Jorge Prieto Laurence. La importancia
de estas organizaciones radicó en el hecho de que México
vislumbraba la posibilidad de que los cambios en el poder se dieran
de manera institucional dejando atrás la violencia.

La clase obrera seguía creciendo de un partido de importancia, pero


en Mayo de 1918 nació la Confederación Regional de Obreros
Mexicanos encabezados por Morones, cuya participación política
debía ser muy importante en los siguientes años. Los partidos PNC y
PLC seguían siendo de cuadros y como la mayor parte de las
organizaciones políticas que se constituyeron en el curso de este
periodo, su éxito dependía de la fuerza de los caudillos alrededor de
los cuales giraba su existencia.

En 1919 se fundó el Partido Nacional Socialista, pero en su seno


pronto hubo dos tendencias rivales que le darían la puñalada de
muerte. El Partido Comunista Mexicano nace en noviembre de 1919,
constituido por organizaciones de trabajadores y campesinos, y poco
después de su implantación ya tenía cierto consenso nacional y era la
organización política más combatida de México. En respuesta a la
constitución de PCM, Morones y sus amigos crearon el Partido
Laborista Mexicano, el cual no fue otra cosa que el órgano político de
la CROM y “logro consolidarse rápidamente en el partido Obrero mas
importante del país”.

En 1919-1920 varios partidos y clubes políticos locales y municipales,


comenzaron a organizarse en las ciudades más importantes. La
mayor parte de ellos estaban inspirados por los jefes militares o por
caciques tradicionales. Dentro de esos partidos regionales de
influencia nacional, la excepción más importante es el Partido
Socialista del Sureste, antiguo Socialista Yucateco, que se convirtió
rápidamente en la organización local más importante del país. Fue
fundado con el nombre de Partido Socialista Obrero bajo el impulso
del Gral. Salvador Alvarado, pero bajo la dirección de Felipe Carrillo
Puerto, el partido se amplió con obreros, profesores, pequeños
comerciantes y campesinos. Era un verdadero partido de masas, y la
unidad base del partido eran los subcomités llamados ligas de
resistencia. A diferencia de los partidos caudillistas, este tipo de
organizaciones expresaron las demandas de las clases explotadas y
buscaron una verdadera transformación de la sociedad mexicana,
preocupando al gobierno federal que tendía al conservadurismo.

Venustiano Carranza trató de imponer en la Presidencia de la


República a un civil con realce, embajador de Washington, Ing. Ignacio
Bonillas creando el Partido Civilista Pro-Bonillas, lo que provocó la
lucha de los caudillos.

De los candidatos a la presidencia Álvaro Obregón era el que con más


derecho se sentía y las principales organizaciones del país terminaron
apoyándolo. El prestigio de Obregón radicaba en su fama de
estratega militar y de prospero agricultor dotado de un singular
inteligencia. El primero de los partidos que se constituyo bajo el
Obregonismo fue el partido Nacional Agrarista, el cual tenia como
meta la realización de una amplia reforma agraria. Los principales
dirigentes fueron Antonio Díaz Soto y Gama, Rodrigo Gómez y Aurelio
Manrique. El PLC intento crear un verdadero régimen parlamentario lo
que provoco que el caudillo sonorense no lo siguiera apoyando y
sufriera un proceso de debilitamiento. En las elecciones legislativas
de 1922, el PNC, PLM, PSS y el PNA por inspiración de las autoridades
constituyeron la Confederación Nacional Revolucionara, la cual
presento un frente común al PLC.

Sin embrago lo que había sido una coalición electoral no pudo seguir
subsistiendo. El PNC desaparece de la escena nacional por haber
apoyado la revuelta de Adolfo de la Huerta contra Obregón y Calles.
Surgieron otros partidos dos de los cuales fueron de particular
importancia tomando en cuenta que eran partidos regionales: la
Confederación de Partidos de Guanajuato y el Partido Socialista de la
Frontera, fundado este ultimo por Emilio Portes Gil. La fuerza
fundamental seguía siendo el ejército y la mayoría de los partidos en
esos años vivieron la tentación del regreso al recurso de armas.

La reelección de Obregón en 1928 provoca nuevos enfrentamientos y


el nacimiento de partidos políticos aunque el ejército permanecía fiel
al sonorense, varios oficiales de alto rango se sintieron con derechos
a ocupar la presidencia y lanzaron sus propia candidatura, entre ellos,
Arnulfo R. Gómez y Francisco Serrano, fundando el segundo el Partido
Nacional Revolucionario.
Con motivo del triunfo de Obregón, sus partidarios se organizaron
para alcanzar un frente más importante, de esta manera nace la
Alianza de Partidos Obregonistas, que da como resultado el Partido
Socialista Integral. Entre 1917 y 1928, la política se había desarrollado
en torno al presidente y a los caudillos, la mayor parte de las
organizaciones políticas habían conocido una existencia dependiente
de un caudillo careciendo de una ideología precisa y de una
organización sólida. En términos generales, a finales de los veintes no
había ningún partido político nacional que pudiese prevalecer sobre
los otros.

En la segunda parte del siglo XX parecía que se iba a generar un


sistema de partidos; no ocurrió así. Los presuntos partidos
encubrieron mas bien la lucha caudillista por el poder. El mas ligero
análisis revela que cuanto las denominaciones partidarias pierden el
favor del caudillo que les dio vida concluyen sus funciones publicas o
se mantienen en forma mortecina, ya sin actividad política
importante. Vemos así ficciones partidarias que no llega a tener
organización y una ideología permanente que se vayan
perfeccionando con el tiempo. La expresión mas eficaz, y por los
largos periodos casi única, es la confrontación violenta.

VIII. La creación del partido del estado: La muerte súbita de Obregón


fue el origen de una nueva crisis del régimen postrevolucionario. La
reacción de Calles ante los acontecimientos fue de gran serenidad y
tendió ante todo a mantener la unidad del grupo gobernante. Calles
preparó entonces la instauración de mecanismos de tipo institucional
que pudiesen ser considerados como legítimos por las fuerzas que
componen el grupo social dominante. A pesar de la crisis política el
Presidente Calles gozaba de la confianza de comerciantes,
industriales, fuerzas armadas, de los partidos, grupos locales,
caciques y del gobierno norteamericano. El proyecto de Calles
encontró en sus orígenes una serie de obstáculos que iban a hacer
muy difícil su implantación, pues el grupo revolucionario se
encontraba profundamente dividido por las ambiciones personales. el
punto culminante el proyecto de Calles debía conducir a la
integración de una gran formación política e todos aquellos que
habían participado en la lucha armada. Se trataba de hacer una
“Partido de la Revolución” para consolidar el aparato estatal. El
Partido Nacional Revolucionario nace el cuatro de marzo de 1929 en
la ciudad de Querétaro. Nació en realidad como una creación del
Estado, aunque en su constitución hubo una cierta ambigüedad, por
que oficialmente no lo creaban las autoridades, pero de hecho, todo
el peso del aparato estatal contribuía a su nacimiento. Las principales
reacciones públicas a su constitución vinieron por parte de los
partidos independientes. Frente de organizaciones y no de individuos,
el nuevo partido fue desde su fundación el centro formal de
negociación de los principales dirigentes políticos mexicanos. El
proyecto de Calles, aunque debía reformularse ampliamente en el
curso de las décadas siguientes, no perdería su carácter esencial,
continuaría siendo una institución estatal al servicio de la burocracia
política, “La Obra Maestra de Calles”.

En realidad la caracterización de “Partido de Estado”, sólo surge


plenamente cuando el Presidente Cárdenas reúne en sí el poder
presidencial, el del ejercito y el del partido que nació como
confederación de grupos. Calles había enunciado el fin de los
caudillos y el principio de las instituciones desde fines de 1928 en su
informe presidencial último. Pero el nacimiento en nuestro país de una
institucionalidad política más impersonal sólo empieza a serlo
plenamente cuando el Presidente de la República, cabeza indiscutida
del partido, puede proporcionarle todos sus elementos, la visión de
conjunto, los recursos y apoyos del propio Estado; es aquí en 1935,
cuando podemos hablar de un partido de Estado.

El PNR tuvo sus orígenes una composición popular, pero se trataba de


masas manipuladas por los caciques municipales o estatales, que
permanecían inconscientes políticamente y que fueron utilizados para
darle al partido su carácter popular. La desafección que mostraron al
PNR fue sin embargo muy rápida y este adquirió muy pronto el
carácter de partido de élites . El PNR no desempeño a lo largo de los
años treinta más que un papel secundario en lo que respecta a la
creación de una ideología hegemónica. Al nacer el partido, lo callistas
carecían ya del espíritu de reformas de la década precedente y , con
un programa vago, se dedicaron ante todo a la consolidación del
aparato estatal que procurara ser efectivos los programas de la
Revolución contenidos en la Constitución de 1917.

Luego de los años de lucha contra el callismo, (1934-1936), el partido


devino por primera vez en su historia en el firme sostén del
Presidente de la República. De un instrumento que permitía al “Jefe
Máximo de la Revolución” dirigir la política del País, el PNR pasó a ser
una institución bajo el control del Ejecutivo.

El sistema político mexicano se fue fincando esencialmente durante el


trienio sobre un Presidente cuyos poderes reales comenzaban a ser
superiores a sus facultades Constitucionales y que se convirtió en el
centro de la vida política del país.

A lo largo de la primera mitad del periodo Cárdenista, la fuerza del


partido aumentó considerablemente al crear mecanismos que
permitían una cierta participación de los campesinos y obreros
organizados en su proceso interno de nominación de candidatos.

El PNR se convirtió en una organización de masas sin paralelo. En


1938 se transforma en el Partido de la Revolución Mexicana, siendo
presentado como legítimo representante de la Nación y disponer por
consiguiente de un formidable apoyo popular.
A principios de 1945, era evidente para el grupo gobernante que
encabezaba Manuel Ávila Camacho, que algunos rasgos del PRM no
facilitaban el proyecto de los años por venir y, aprovechándose del
prestigio del partido – atacado por empresarios, derechistas y sus
propios dirigentes- decidió transformarlo oficialmente. El Jefe del
Ejecutivo pudo convencer a los jefes de las fuerzas armadas que su
época había concluido mucho tiempo atrás y que para aplicar el
nuevo proyecto nacional, el país tenía necesidades que el futuro de
un gobierno civilista y de un partido institucionalizado de manera
definitiva, surgiendo así el Partido Revolucionario Institucional.

EL SISTEMA SEMIPRESIDENCIALISTA
FRANCÉS EN LA ACTUALIDAD

El sistema político francés es resultado de una larga evolución a partir


de 1789 en que se ha buscado sobre todo la estabilidad. Éste sistema
–al que habitualmente se le denomina V República- fue establecido
por la Constitución de 4 de Octubre de 1958 y sus reformas del 6 de
Noviembre de 1962. Con esta reforma, el Presidente de la República
pasa a ser elegido por sufragio universal en vez de serlo por un
colegio de unos 80 000 notables; deja de ser un jefe de estado
parlamentario, sin prestigio ni poderes, y se convierte en el jefe
supremo del gobierno. De esta forma se pasó del régimen
parlamentario a un régimen semipresidencial en el que también se
hallan un primer ministro y su gabinete, ambos responsables ante el
parlamento. Fuera de Francia, el régimen semipresidencial funciona
en la actualidad en Finlandia, Austria, Portugal e Islandia, bajo muy
diversas modalidades.

1. LOS CIUDADANOS: Existe una democracia liberal que se basa en


la soberanía de los ciudadanos, quienes la expresan mediante su voto
en elecciones competitivas. Utilizan también el referéndum y su único
defecto a los principios democráticos se debe al sufragio senatorial
dada su desigualdad. Los ciudadanos ejercen sus derechos también a
través de los partidos políticos.

2.- LAS ELECCIONES A LA ASAMBLEA NACIONAL Y AL SENADO:


Se realizan las primeras cada cinco años para elegir los diputados y
pueden serlo con mayor frecuencia en caso de disolución. Las
elecciones para el senado se realizan cada tres años en un tercio de
los departamentos, ya que los senadores son electos para un
mandato de nueve años y se renuevan fraccionadamente. Las
elecciones a la asamblea nacional se realizan mediante sufragio
universal directo y secreto y votan las personas mayores de 18 años.
Se ha suprimido el voto por correspondencia aunque en determinados
supuestos y cumpliendo ciertos requisitos puede ejercerse el voto por
representación.
El sistema electoral es mayoritario, plurinominal y a dos vueltas, con
excepción de la elección de los diputados de ultramar regulada por
normas particulares. Para ser elegido en la primera vuelta es
necesario obtener la mayoría absoluta de los sufragios emitidos y que
los votos signifiquen por lo menos la cuarta parte de los electores
inscritos. Si ningún candidato consigue reunir estas condiciones se
debe efectuar una segunda vuelta. A ésta pueden acudir únicamente
aquellos candidatos que lo hallan sido en la primera y hallan obtenido
en ella al menos el 12.5% de votación de los electores inscritos.

El senado de la República se elige por sufragio indirecto siendo los


representantes de los consejos municipales (un número mayor a 100
000) el elemento básico de su cuerpo electoral aparte de los
diputados de la asamblea nacional que son 470 y los
aproximadamente 3 000 consejeros generales.
3. LAS ELECCIONES PRESIDENCIALES Y LOS REFERÉNDUMS: El
presidente es electo para un mandato de siete años. La elección tiene
lugar entre 20 días y un máximo de 35 antes de que expiren los
poderes del presidente en ejercicio. El sistema electoral es el
escrutinio mayoritario a dos vueltas con modalidades particulares. Si
en la primera vuelta ningún candidato obtiene la mayoría absoluta de
los sufragios, el segundo domingo siguiente se celebra la otra vuelta.
A ésta sólo pueden presentarse los dos candidatos que hayan
conseguido el mayor número de sufragios en la primera vuelta. Esto
favorece las coaliciones entre partidos. Existen dos tipos de
referéndum desde el punto de vista de la preparación del texto que se
va a someter a los electores: en el primer caso el texto sometido a
referéndum es preparado por el parlamento a partir de un proyecto
del Presidente de la República o de una propuesta parlamentaria; en
el segundo, el texto es redactado por el propio presidente.

4.-LOS PARTIDOS POLÍTICOS: Se ha ido formando progresivamente


un gran partido que poco a poco ha unificado casi todo el espectro de
la derecha y que ha captado sectores del centro y también de la
izquierda: es la unión de los demócratas para la república que
funciona como tal desde 1967. Son difíciles de clasificar los partidos
políticos franceses, por ello es preferible adoptar una distinción
simple y objetiva llamándolos partidos conservadores liberales y por
otro los partidos socialistas.

Los partidos conservadores liberales: la UDR; los Republicanos


Independientes y los Centristas. Los partidos de corte socialista: el
Partido Comunista y el Partido Socialista.

5. LA ORGANIZACIÓN CONSTITUCIONAL: Encontramos una


diarquía en el poder ejecutivo, es decir, el Presidente de la República
y el Gobierno. Este dualismo se encuentra mucho más acentuado que
en un régimen parlamentario donde el Jefe de Estado no tiene más
que un papel simbólico y aquí no es fácil precisar el reparto de la
autoridad porque las instituciones difícilmente pueden funcionar sin la
colaboración del Presidente de la República y del Gobierno, los cuales
no son órganos absolutamente separados ya que el Gobierno no
puede ejercer su poder de decisión más que de forma colectiva en el
seno de consejo de ministros y éste es presidido por el Presidente de
la República, el cuál forma parte del Consejo o, lo que es lo mismo, el
Gobierno. Sin embargo, constituyen dos órganos distintos tanto por su
designación, duración de sus funciones, su estatuto jurídico y sus
poderes.

Dijimos que el Gobierno es un órgano colectivo; los ministros tienen


un poder de decisión personal sobre su ministerio, en éste sentido
son los jefes de los distintos sectores de la administración pública,
pero desde el punto de vista político están obligados a ejecutar
dentro de su sector las decisiones adoptadas colectivamente.

El conjunto de los ministros, ministros de estado y secretarios de


estado, agrupados en torno al primer ministro, forman el gabinete. La
reunión del gabinete bajo la presidencia del jefe de estado, constituye
el consejo de ministros, que es la formación gubernamental más
importante desde el punto de vista jurídico y tiene competencia en
las deliberaciones de los proyectos de ley o con la autorización dada
al primer ministro para que pueda comprometer la responsabilidad
del gobierno ante la Asamblea Nacional; el primer ministro no puede
suplirle en la presidencia del consejo más que en casos
excepcionales. Los consejos interministeriales reúnen a los ministros y
secretarios en un problema concreto derivado de complejidades
técnicas que no puede resolver una sola cartera sino que requiere el
auxilio de otras.

En sentido estricto, el gobierno se compone del primer ministro, de


los ministros, ministros de estado, secretarios de estado y secretarios
autónomos. Sin embargo, a pesar de las apariencias del artículo 21
constitucional, el primer ministro no es el jefe de gobierno ya que
ésta cualidad pertenece casi íntegra al presidente de la república.

Nadie puede obligar al presidente de la república a dimitir y no


depende ni del gobierno ni del parlamento su nombramiento o
revocación. Por el contrario, el gobierno depende del presidente y del
parlamento en ambos casos.

El nombramiento de los miembros del gobierno se efectúa por el


presidente de la república que escoge y nombra al primer ministro y
éste a los ministros y secretarios de estado que los presenta al
presidente y éste los nombra. Sin embargo, el gobierno debe contar
con la confianza de la asamblea nacional para mantenerse en el
poder. Los ministros y lo secretarios de estado deben ser ratificados
por la mayoría de la asamblea nacional.
Tanto el primer ministro como los miembros del gobierno cesan en
sus cargos por una moción de censura de la asamblea nacional o por
la pérdida del voto de confianza. Oficialmente el presidente de la
república no puede cesar ni al primer ministro ni a su gabinete
mientras conserven la confianza de la asamblea nacional. Sin
embargo, el presidente puede negarse a firmar los decretos que
hayan sido discutidos en consejos de ministros y en la práctica posee
el mecanismo para conseguir la dimisión del gobierno.

La mayor parte de los poderes constitucionales no pueden ser


ejercitados más que por mutuo acuerdo entre el presidente y el
gobierno.

El presidente de la república posee cuatro poderes esenciales sobre el


parlamento: el poder reenviar las leyes para una segunda lectura; el
poder sobre las sesiones; el derecho a enviar mensajes y el derecho
de disolución. Estos dos últimos se ejercen sin referéndum ministerial.
En materia judicial, el presidente tiene poderes para designar tres de
los nueve miembros que integran el consejo constitucional y además
ejerce el derecho de gracia. Puede utilizar el referéndum a propuesta
formal del gobierno en las materias fijadas por la constitución y tiene
poderes extraordinarios si se cae en el “estado de necesidad”. Esto
abre la puerta a la arbitrariedad puesto que es el propio presidente de
la república el que aprecia si se trata de una verdadera amenaza y si
es grave e inmediata.
El primer ministro posee poderes propios muy importantes y los
puede ejercer personalmente sin intervención del presidente de la
república: el poder de ejecutar las leyes y el poder reglamentario; la
dirección general del gobierno; el derecho de entrar y hablar en las
sesiones del parlamento; solicitar sesiones extraordinarias del
parlamento o convocar a una comisión mixta en caso de desacuerdo
entre la asamblea nacional y el senado; en este mismo orden de
cosas el primer ministro puede solicitar ante las dos cámaras la
declaración de política general.

Los ministros básicamente poseen dos tipos de poderes propios: la


gestión del departamento ministerial correspondiente y el derecho de
entrada y de palabra al parlamento.

Por lo que respecta a los poderes comunes entre el presidente y el


gobierno se pueden distinguir tres clases: los poderes presidenciales
sometidos al refrendo ministerial de entre los cuales se pueden
distinguir el nombramiento de altos funcionarios, la promulgación de
leyes y el veto, la convocatoria y clausura de sesiones extraordinarias
del parlamento y los poderes diplomáticos; los poderes del consejo de
ministros se refieren a la iniciativa legislativa y al acuerdo para
comprometer la responsabilidad del gobierno ante la asamblea
nacional; y el tercer grupo de poderes comunes es el de legislar por
vía de ordenanzas (decretos-leyes) son discutidos en consejo de
ministro y firmados por el presidente de la república. Este poder
puede ejercerse únicamente si el parlamento lo autoriza por medio de
una ley de habilitación legislativa, previa petición del gobierno y por
un tiempo y objeto limitados.

6. LOS CONTRAPESOS: El parlamento y los órganos jurisdiccionales


y consultivos.

El parlamento de compone de dos cámaras: la asamblea nacional


formada por 490 diputados, de los cuales 473 pertenecen a la
metrópoli, toda Francia, y el senado compuesto por 283 senadores de
los cuales 264 son de la metrópoli. Es indiscutible el claro predominio
de la primera. Para ser diputado se requieren 23 años y 35 los
senadores y los naturalizados no son elegibles más que diez años
después de su naturalización. La Constitución regula minuciosamente
con la finalidad de disminuir las prerrogativas de las cámaras y
aumentar la acción del gobierno sobre ellas. Las dos cámaras tienen
mesa directiva con un presidente, vicepresidente, secretarios y
vocales. Existen tres tipos de comisiones: las permanentes
especializadas, las comisiones especiales y las comisiones de
encuesta y control. La principal limitación que tiene el parlamento es
el concepto de reserva material de ley; la Constitución autoriza al
presidente de la república a quedar por encima del legislativo
mediante la utilización del referéndum; también lo limita
estableciendo un sistema eficaz del control institucional de las leyes;
también con un sistema de aprobación de leyes que deben ser
votadas por el pueblo si no gozan de la confianza del gobierno. Si el
parlamento no aprueba el proyecto de presupuesto de egresos en un
plazo de 70 días, el gobierno puede ponerlo en vigor mediante
ordenanza. Uno de los grandes poderes del parlamento es el de
revisión constitucional, ratificación de los tratados, declarar la guerra,
el derecho de amnistía, el nombramiento de los miembros de la
suprema corte de justicia y la declaración del estado de sitio. En
Francia se practica un semi-parlamentarismo mayoritario.

Existen también el consejo constitucional, el consejo económico y


social y el tribunal supremo de justicia. El primero controla la
constitucionalidad de las leyes y la regularidad de la elecciones; el
segundo es una asamblea consultiva en la que se asegura la
representación de las categorías profesionales y especialmente de los
sindicatos para orientar al gobierno y al parlamento en materia
económica; el tercero es un órgano intermitente que sólo se reúne
cuando se le presenta un problema determinado. Es el encargado de
juzgar al presidente de la república y a los miembros del gobierno y
se destaca que jamás se ha reunido.

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