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1. BASES CONCEPTUALES
El concepto de Salud Pública ha tenido un largo desarrollo a través de la historia social, política y
médica. Su origen más remoto curiosamente apuntó a un concepto más propio de la política y se
empleó durante la Revolución Francesa para señalar un claro propósito ideológico de controlar o
eliminar a adversarios políticos o a elementos “indeseables”, que pudiesen dañar o alterar los
propósitos políticos de un determinado grupo de poder, eso era hacer “santé publique”.
No obstante lo anterior, con el transcurso del tiempo el concepto adquirió una connotación
científica y médica y progresivamente fue aplicado a temas de salud que aquejaban a
determinado conglomerado humano y que por su magnitud o gravedad se constituían en un
“problema de salud pública”. Lo anterior necesariamente colocó a la Salud Pública como un
campo de interés y competencia de la medicina y posteriormente en el amplio campo de la
salud realizado necesariamente de forma multidisciplinaria.
Una primera definición explícita de Salud Pública la debemos a C.E.A. Winslow, quién en 1920
entrega la siguiente definición: ”La salud pública es la ciencia y el arte de prevenir las
enfermedades, prolongar la vida, y fomentar la salud y la eficiencia física mediante esfuerzo
organizados de la comunidad para sanear el medio ambiente, controlar las infecciones en la
comunidad y educar Al individuo en cuanto a los principios de la higiene personal, organizar
servicios médicos y de enfermería para el diagnóstico precoz y el tratamiento preventivo de las
enfermedades, así como desarrollar la maquinaria social que le asegure a cada individuo un
nivel de vida adecuado para el mantenimiento de la salud"(2).
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La definición de Winslow surge de una determinada realidad sanitaria, portal motivo destaca los
problemas infecciosos y transmisible y tal vez enfatiza menos los problemas que enfrentamos en el
siglo XXI: enfermedades crónicas no transmisibles, accidentes y violencias, adicciones, etc.
Es así como hacia 1990, Milton Terris ofrece una nueva definición que incluye tanto la salud física
como la salud mental, la prevención y control no solo las enfermedades infecciosas si también de
aquellas no infecciosas y agrega entre los servicios de atención los destinados a la
rehabilitación(3).
Durante la década de los noventa se debatió ampliamente sobre lo que se denominó la “crisis de
la Salud Pública”. Durante esa década, especialmente en América Latina se vive una profunda
alteración política, social y económica. En lo político, un importante número de países de la región
son gobernados por dictaduras militares; en lo económico surge con fuerza una estrategia
neoliberal que modifica estructuras estatales, entre ellas la de los sistemas de salud y en lo social
un claro predominio de conductas más individualistas. Lo anterior repercutió severamente en la
forma y sentido de hacer la labor sanitaria destacando una actividad más preocupada de
solucionar problemas individuales desde una perspectiva curativa y debilitándose de manera
grave en algunos países el enfoque de salud pública.
Una comprensión moderna de la salud pública debe llevarnos a entenderla como un campo de
conocimientos y también un espacio de práctica profesional dirigida a realizar esfuerzos
sistemáticos para la identificación de las necesidades de salud y la organización de servicios
integrales con una base definida de población.
En un esfuerzo por recuperar el espacio que le corresponde, los profesionales de la salud que han
comprendido que la solución, si no definitiva, pero claramente más racional y costo efectiva de
muchos de los problemas salud, se logrará con un abordaje promocional, preventivo y mediante
intervenciones a nivel poblacional, han buscado redefinir el concepto de Salud Pública a partir del
conocimiento científico y tecnológico actual y asumiendo una realidad social y económica compleja
y dinámica. Una destacada iniciativa en este sentido ha sido promovida por la Organización
Panamericana de la Salud, la cual ha buscado establecer y definir lo que se han denominado
Funciones Esenciales de la Salud Pública (FESP)(4).
Este interesante trabajo, tiene a mi juicio, dos consecuencias positivas para desarrollar y fortalecer
el trabajo de la Salud Pública:
La iniciativa continental de la O.P.S. denominada “La Salud Pública en las Américas”, para
definir las FESP tiene los siguientes objetivos:
El concepto de Salud Pública en el que se basa la definición de las FESP y que pasa a ser una
nueva definición de esta “ciencia y arte” es el siguiente: “la acción colectiva, tanto del Estado
como de la sociedad civil, encaminada a proteger y mejorar la salud de las personas.
Supone una noción que va más allá de las intervenciones poblacionales o comunitarias e
incluye la responsabilidad de asegurar el acceso a la atención de salud y su calidad”. A su
vez las FESP se han definido como “las condiciones que permiten un mejor desempeño de la
práctica de la salud pública”.
Es importante referirse aquí a la dificultad que entraña el establecer una separación nítida entre
las responsabilidades propias de la salud pública en la conducción de servicios dirigidos a la
prevención de enfermedades y a la promoción de la salud en grupos de población definidos, y
aquellas que tienen que ver con la organización de servicios dirigidos a la atención curativa
individual. Los énfasis en esta materia son diferentes. Es característica esencial de la salud
pública el dedicarse a la primera de estas funciones. En lo que respecta a la segunda, sus
responsabilidades esenciales apuntan más a la preocupación por el acceso equitativo a los
servicios, a garantizar su calidad y a incorporar la perspectiva de la salud pública en las políticas
nacionales de salud.
• Desarrollo y fiscalización del cumplimiento de los códigos sanitarios y/o las normas dirigidas a
control de los riesgos de salud derivados de la calidad del ambiente; acreditación y control de
la calidad de los servicios médicos; certificación de calidad de nuevos fármacos y sustancias
biológicas para uso médico, equipos, otras tecnologías y cualquier otra actividad que implique
el cumplimiento de leyes y reglamentos dirigidos a proteger la salud pública.
• Protección de los consumidores en sus relaciones con los servicios de salud.
• Educación, capacitación y evaluación del personal de salud pública para identificar las
necesidades de servicios de salud pública y atención de salud.
• Definición de requerimientos para la licenciatura de profesionales de salud en general y
adopción de programas de mejoramiento continuo de la calidad de los servicios de salud
pública.
• Desarrollo de capacidades para el trabajo interdisciplinarios en salud pública.
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• Innovación constante, que va desde los esfuerzos de investigación aplicada para impulsar
cambios en las prácticas de salud pública hasta los esfuerzos de investigación científica formal.
• Desarrollo de investigación propia de las autoridades sanitarias en sus diferentes niveles.
El conjunto de FESP que se han descrito en sus principales atributos y características, puede ser
entendido desde la doble dimensión que señalábamos inicialmente: un conjunto de conocimientos
en sí, pero, también acciones o actividades concretas que nos señalan, lo que es o debe ser en la
práctica la Salud Pública, esto nos lleva al sentido final del quehacer de esta “ciencia y arte”,
donde más allá del interés académico, que es significativo, está el propósito científico y valórico de
construir una mejor salud desde y con la comunidad(5).
BIBLIOGRAFÍA
1.- Frenk J.: La nueva salud pública. En: La Crisis de la Salud Pública: Reflexiones para un debate.
Publicación Científica N° 540. Organización Panamericana de la Salud. Washington 1992.
2.- Winslow CEA.: The evolution and significance ofthe modern public health campaign. Yale University
Press. New Haven 1923.
3.- Terris M.: Epidemiology and Leadership in Public Health in the Americas. J Public Health Policy . 9: 250-
260;1988
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4. – Muñoz F.; López-Acuña D.; Guerra de Macedo C.; Hanna W.; Larrieu M.; Ubilla S.; y Zeballos J.L. : Las
funciones esenciales de la salud pública: un tema emergente en las reformas del sector salud. Rev
Panam Salud Pública 8(1/2):126-134; 2000
5.- Menéndez E.: Salud Pública: Sector estatal, ciencia aplicada o ideología de lo posible. En: La Crisis de la
{Salud Pública: Reflexiones para un debate. Publicación Científica N° 540 Organización Panamericana
de la Salud. Washington. 1992