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CUADERNOS RICANOS VOL, XXXII g MARZO - ABRIL 1947 * DB MARZO DE 1947 MEx1C0, RuGISTRADO COMO ARTICULO DE SEGUNDA CLASE EN 1A ADMINISTRACION DE CORREOS DE Miixico, D. F. CON FECHA 23 DE MARZO DE 1942, LA CRISIS DE MEXICO Por Daniel COSIO VILLEGAS Mixes viene padeciendo hace ya algunos afios una crisis ‘que se agrava dia con dia; pero como en Jos casos de enfermedad mortal en una familia, nadie habla del asunto, 0 Jo hace con un optimismo trdgicamente irreal, La crisis pro- viene de que las metas de la Revolucién se han agotado, al ‘grado de que el término mismo de revolucién carece ya de sen- tido, Y, como de costumbre, todos los grupos politicos con- tinian obrando guiados por los fines mas iamediatos, sin que a ninguno parezea importarle el destino final del pais. Cudles eran Jas metas de !a Revolucién, cuindo se ago- taron y por qué, son las primeras cuestiones que debieran abor- darse para entender la ctisis y, sobre todo, medirla, La Revolucién Mexicana nunca tavo un programa claro, ni lo ha intentado fotmular ahora, ir artivalo mortis, aun cxando el dia de mafana, post mortem, habré muchos programas, sobre todo los expuestos e interpretados por escritores conserva- dores. Algunas metas o tesis, empero, Hlegaron a establecerse, se, siquiern en la forma simplista a que conduce la mera repe- ticién. Ademés, como en todo proceso histérico de alguna duracién, no todos los propésites iniciales se han conservado hasta el fin; por el contratio, alganas de esas metas fueron de- biliténdose y en cierto momento dieron paso a otras nuevas —unas principales y otras secundarias—y, en consecuencia, inds vigorosas. Esta yuxtaposicién de metas ha hecho atin més confuso el proceso ideotégico de Ia Revolucién, pues las tesis nuevas no reemplavaron a las antiguas, sino que coexistiezon, al menos en Ja forma; y, luego, al lado de tesis realmente fun- damentales, aparecieron designios de una magnitud y de una importancia menores, 30 Rocio Tiempo En todo caso, una de Jas tesis principales fué la conde- nacién de la tenencia indefinida del poder por parte de un hombre o de un grupo de hombres; otra, la de que la suerte de Jos més debfa privar sobre la de_los menos, y que para me- jotar aquélla el gobierno no s6lo no podia ser pasivo, sino que debia ser activo; en fin, que el pais tenfa intereses y gustos propios por los cuales debia velasse, y, en caso de conflicto, hacerlos prevalecer sobre los guistos ¢ intereses extranjeros. Ta reaccién contra el régimen politico posfirista y su derroca- miento final, fueron la meta primera; dentro de la segunda caen la reforma agraria y el movimiento obrero; en Ja tercera, el tono nacionalista que tavo la Revolucién al exaltar lo mexi- cano y recelar de lo extranjero, © combatirlo ‘con franqueza. Algunos pondrian entre les tesis principales de Ia Revolucién Ja necesidad de una accién educativa vigorosa por parte del Es- tado, si bien ha sido notoriamente més débil ¢ inconsistente que las tres anteriores. Esas tesis parecen hoy lugares comunes, y candorosos, por afiadidura; Jo son para Jos poquisimos que siguen creyendo en cllas, y més, por supuesto, para quienes las admitirlan en el papel impreso de wn libro, pero nunca en la realidad histérica de México, En su tiempo, sin embargo, no s6lo fueron nove- dades, sino que cotrespondian tan genuine y tan hondamente a las necesidades del pais, que desviaron Ja ruta de éste durante més de un cuatto de siglo, y pueden cambiarla todavia hasta completar la media centuria, ELL contenido ideolégico propio del porfisismo era pobrt simo (baste secordar que la principal bandera de uno de los pronunciamientos del general Diaz previos a su conquista del poder, fué la condenacién del impuesto del timbre); pero, en cambio, la realidad nacional y la del mundo le dieron ‘dos palabras mégicas: orden, la primera; progreso, la segunda, En la conciencia de todos los mexicanos estaba la necesidad del orden, de la paz, después de casi tres cuattos de siglo de tuna vida manchada de sangre y plagada de hambre y de mi- seria; y luego, por lo que respecta al progreso, a México no habfan tocado hasta entonces siquicra las migajas de la Revo- Jucién Industrial, aquella que se inicié en Inglaterra desde

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