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Monárquicos

Moderados Amadeistas e
Narváez Alfonsinos
Unionistas
Liberais (Unión Liberal)
O’Donnell

REPUBLICANOS
Progresistas Federalistas
Espartero Demócratas (Pi i Margall)
Prim Unitarios
(Castelar)
1ª GUERRA CARLISTA (1833-1840)
1º victorias carlistas: Cabrera e Zumalacárregui perto de Madrid.
2º morte de Zumalacárregui (1835) Carlos fuxe a Francia.
Fin: Convenio de Vergara entre o isabelino Espartero e o carlista Maroto.
2ª GUERRA CARLISTA (1846-1849): Cataluña.
Carlos V abdicou en 1845 no seu fillo Carlos VI.
Derrota carlista en Barcelona.
3ª GUERRA CARLISTA (1872-1876)
Durante o reinado de Amadeo I
Derrotas na Seo de Urgell e Montejurra (Navarra)
Soldados: Vamos a cumplir una noble y gloriosa misión. El pabellón español ha sido
ultrajado por los marroquíes, y la reina y la patria confían a nuestro valor el hacer conocer a
ese pueblo semibárbaro que no se ofende impunemente a la nación española.
La campaña que vamos a emprender será dura y penosa: el enemigo contra quien vamos a
combatir es valiente y fanático, pero vosotros sois tan valientes como él y tenéis la ventaja
que os dan la disciplina y la instrucción sobre masas desorganizadas, que son tanto más
fáciles de vencer, cuanto más numerosas se presenten en el campo de batalla. (...)
Soldados: Mostraos dignos de la confianza de la reina y de la patria, haciendo ver a la
Europa que nos mira, que el soldado español es hoy lo que ha sido siempre cuando ha
tenido que defender el trono de sus reyes, la independencia de su patria o vengar las
injurias hechas a la honra nacional. Nuestra causa es la de la justicia y la civilización contra
la barbarie. el Dios de los Ejércitos bendecirá nuestros esfuerzos y nos dará la victoria.
Leopoldo O'DONNELL. Arenga [ás tropas para combater en Marrocos]. Cádiz, 18-XI-1859.

Después de una breve discusión se acordó por unanimidad lo siguiente.


1. Que el objeto y bandera de la revolución en España es la caída de los Borbones.
2. Que siendo para los demócratas un principio esencial de su dogma político el sufragio
universal y admitiendo los progresistas el derecho moderno constituyente del plebiscito, la
base de la inteligencia de los dos partidos fuera que por un plebiscito (...) o por unas Cortes
Constituyentes elegidos por el sufragio universal, se decidiría la forma de gobierno que se
había de establecer en España, y siendo la Monarquía, la dinastía que debía reemplazar a
la actual (...) Que se reconocía como jefe y director militar del movimiento al general Prim.
Pacto de Bruxelas. 5-VII-1867.
1814-1833: FERNANDO VII
1814-1820: SEXENIO ABSOLUTISTA
1820-1823: TRIENIO LIBERAL
1823-1833: DÉCADA OMINOSA
1833-1868: ISABEL II.
1833-1840: REXENCIA DE MARÍA CRISTINA DE BORBÓN.
1840-1843: REXENCIA DE ESPARTERO.
1843-1868: REINADO DE ISABEL II
1844-1854: DÉCADA MODERADA.
1854-1856: BIENIO PROGRESISTA.
1856-1868: DÉCADA MODERADA-UNIONISTA; FIN DO REINADO.
1868-1874: SEXENIO REVOLUCIONARIO
1868-1869: REVOLUCIÓN E CONSTITUCIÓN DE 1869.
1871-1873: REINADO DE AMADEO DE SABOIA
1873-1874: 1ª REPÚBLICA
1814-1820 Restauración Fernando VII
absolutista
1820-1823 Trienio liberal Constitución de 1812 Riego
1823-1833 Decada
ominosa
1833-1840 Rexencia de Isabel II Constitución de 1812/
María Cristina (Rexencia) Constitución de 1837
1840-1843 Rexencia de (máis moderada) Espartero
Espartero
1844-1854 Década Isabel II Constitución de 1845 Narváez
moderada
1854-1856 Bienio Constitución de 1856 O’Donnell
progresista (non nata)
1856-1868 Década liberal Constitución de 1845 Narváez/
conservadora O’Donnell
1868-1873 Revolución de Amadeo I Constitución de 1869 Serrano
1868 Prim
1873-1874 1ª República Constitución de 1873 Figueras
1875-… Restauración Alfonso XII Constitución de 1876 Cánovas
borbónica
Españoles: La ciudad de Cádiz puesta en armas, con todo su provincia, con la Armada
anclada en su puerto (...), declara solemnemente que niega su obediencia al gobierno de
Madrid (...) resuelta a no deponer las armas hasta que la nación recobre su soberanía,
manifieste su voluntad y se cumpla (...).
Hollada la ley fundamental (...), corrompido el sufragio por la amenaza y el soborno, muerto
el municipio, pasto la Administración y la Hacienda de la inmoralidad (... ), tiranizada la
enseñanza, muda la prensa (...). Tal es la España de hoy. Queremos que un Gobierno
provisional que represente todas las fuerzas vivas del país, asegure el orden, en tanto que
el sufragio universal echa los cimientos de nuestra regeneración social y política.
Contamos para realizar nuestro inquebrantable propósito con el concurso de todos los
liberales (...), de las clases acomodadas (...), con los ardientes partidarios de las libertades
individuales (...), con el pueblo todo y con la aprobación, en fin, de la Europa entera (...).
Acudid a las armas, no con el impulso del encono, siempre funesto; no con la furia de la ira,
siempre débil, sino con la solemne y poderosa serenidad con que ¡a justicia empuña su
espada.
¡Viva España con honra!
DUQUE DE LA TORRE [Serrano), Juan PRIM, Domingo DULCE, Francisco SERRANO
BEDOYA, Ramón NOUVILAS, Rafael PRIMO DE RIVERA, Antonio CABALLERO DE
RODAS, Juan TOPETE. Manifiesto. Cádiz. 19-IX-1868.
Querida Dolores: Esta mañana salí de casa, ya muy tarde, porque soy muy poco madrugador, y
recorrí esas calles y plazas, llenas todas de gente regocijada. Al principio todo era júbilo inocente,
colgaduras en los balcones, bandas tocando el himno de Riego, vivas a la libertad, mueras a los
Borbones y a toda su descendencia. Sólo parece que algunos ciudadanos se acaloraron
demasiado y dieron muerte a uno o dos polizontes. Los nombres de muchas calles y plazas se
borraron como por ensalmo (... ) y se pusieron (...) otros de los de los jefes sublevados. Se fue a la
cárcel, donde estaban encerrados los presos políticos, y todos se pusieron en libertad. A todo esto
la junta de Gobierno se había formado ya de los primeros hombres notables que llegaron a la casa
del ayuntamiento (...).
A eso de las cuatro de la tarde, la cosa empezó a tomar muy mal aspecto. El paisanaje se armaba.
En las esquinas aparecieron unos carteles llamando al paisanaje a las armas. Le firmaba Amable
Escalante, titulándose Presidente de la Junta revolucionaria. Esto nos dio a conocer que había dos
juntas y que el pueblo iba acaso a dividirse y a pelear (...). Pasamos por medio del pueblo armado
con fusiles de aguja. A cada paso se escapaba un tiro (...).
En fin, mañana llegarán Prim y Serrano y todo se ordenará. Entretanto, la gente del pueblo, ebria
de vino y de verse soberana, no creo que robe, pero puede hacer alguna que otra barrabasada
(...). Están tocando a fuego. Quiera Dios que no hayan quemado por ahí alguna casa. Desde hace
tres o cuatro horas, estoy pidiendo a Dios abundante lluvia, a ver si se agua y remoja un poco el
entusiasmo.
Juan VARELA. Carta [a súa dona]. Madrid, 29-1X-1868.

La Junta Superior Revolucionaria, fiel a su elevado origen, hace la siguiente declaración de


derechos: Sufragio universal. Libertad de cultos. Libertad de enseñanza. Libertad de reunión y
asociación pacíficas. Libertad de imprenta (... ). Descentralización administrativa que devuelva la
autoridad a los ayuntamientos y a las provincias. Juicios depurados en materia criminal. Unidad de
fuero en todos los ramos de la Administración de Justicia. Inamovilidad judicial,
JUNTA SUPERIOR REVOLUCIONARIA. Proclama. 8-X-1868.
Art.2. Ningún español ni extranjero podrá ser detenido ni preso sino por causa de delito.
Art.5. Nadie podrá entrar en el domicilio de un español o extranjero residente en España
sin su consentimiento, excepto en los casos urgentes de incendio, inundación u otro peligro
análogo.
Art.7. En ningún caso podrá detenerse ni abrirse por la autoridad gubernativa la
correspondencia confiada al correo, ni tampoco detenerse la telegráfica. ( ..)
Art. 13. Nadie podrá ser privado temporal o perpetuamente de sus bienes y derechos, ni
turbado en la posesión de ellos, sino en virtud de sentencia judicial.
Art, 15. Nadie está obligado a pagar contribución que no haya sido votado en Cortes, o por
las corporaciones populares legalmente autorizadas para imponerlo, y cuya cobranza no
se haga en la forma prescrita por la ley.
Art. 16. Ningún español que se halle en el pleno goce de sus derechos civiles podrá ser
privado del derecho de votar en las elecciones de senadores, diputados a Cortes,
diputados provinciales y concejales.
Art. 17. Tampoco podrá ser privado ningún español del derecho de emitir libremente sus
ideas y opiniones, ya de palabra, ya por escrito, valiéndose de la imprenta (...). Del derecho
de reunirse pacíficamente. Del derecho de asociarse para todos los fines de la vida
humana que no sean contrarios a la moral pública,( .. ). Del derecho de dirigir peticiones a
las Cortes, al rey y a las autoridades.
Art.21. La nación se obliga a mantener el culto y los ministros de la religión católica. El
ejercicio público o privado de cualquiera otro culto queda garantizado a todos los
extranjeros residentes en España sin más limitaciones que las reglas universales de la
moral y del derecho.
Constitución de 1869.
La nación española, y en su nombre las Cortes constituyentes, elegidas por sufragio
universal, deseando afianzar la justicia, la libertad y la seguridad y proveer al bien de
cuantos vivan en España, decretan y sancionan la siguiente Constitución. (...)
Art.32. La soberanía reside esencialmente en la nación, de la cual emanan todos los
poderes.
Art.33. La forma de gobierno de la nación española es la Monarquía.
Art.34. La potestad de hacer leyes reside en las Cortes. El rey sanciona y promulga las
leyes.
Art.35. El poder ejecutivo reside en el rey, que lo ejerce por medio de sus ministros.
Art.36. Los tribunales ejercen el poder judicial.
Art.38. Las Cortes están formadas por dos cuerpos colegisladores: Senado y Congreso. (...)
Art.68. El rey nombra y separa libremente a los Ministros.
Constitución de 1869.
REINADO DE AMADEO I DE SABOIA
Ruptura da unidade revolucionaria (unionistas, progresistas e demócratas)
Morte de Prim
Guerra de Cuba
Terceira Guerra Carlista (1872)
Oposición republicana
Amadeo de Saboya era joven, si de algún corazón, de corto entendimiento.
Desconocía de España la historia, la lengua, las instituciones, las costumbres, los
partidos, los hombres; y no podía, por sus talentos, suplir tan grave falta. Era de no
muy firme carácter. No tenía grandes vicios, pero tampoco grandes virtudes (...). Una
cualidad buena manifestó, y fue la de no ser ni parecer ambicioso. Mostró escaso afán
por conservar su puesto. Dijo desde el principio que no se impondría a la nación por la
fuerza, y lo cumplió, prefiriendo perder la corona a quebrantar sus juramentos. Esta
lealtad puede asegurarse que fue su principal virtud y la única norma de su conducta.
No eran dotes éstas para regir a un pueblo tan agitado como el nuestro. (...) No le
querían ni los republicanos ni los carlistas, (...) ni los antiguos conservadores (...). No
le acogía con entusiasmo nadie.
Francisco Pl I MARGALL. Opúsculos. Amadeo de Saboya. 1884.
Señor. Hoy, que arribáis a nuestras costas conducido por los mismos hombres que os
aclamaron majestad, como de ellos, no habéis de oír el lenguaje sincero de la verdad,
quiero lo oigáis de mi, y por eso me acerco a vos con todo el respecto que me merece
un hombre y toda la repugnancia que me inspira un rey.
Posáis, rey Amadeo, vuestra extranjera planta en una ciudad siempre celosa de su
españolismo, y que siempre rindió culto a la santa idea de su independencia. Veréis
una calle que se llama María Pita (...), otras calles, los principales, se llaman Cantón de
Porlier, Cantón de Lacy, calle Acevedo y de Espoz y Mina. Ya comprenderéis, señor,
que un pueblo que en tanto estima estos recuerdos, cuando esculpe esos nombres
sagrados en las esquinas de sus calles para que sean repetidos millones de veces al
día por hombres, mujeres y niños, ha de sentir que seáis extranjero. El grito de guerra
que dio la heroína María Pita para que los demás imitasen su valor fue: -Atrás el
extranjero!. Lacy y Porlier, Acevedo y Mina también daban ese grito a las huestes que
acaudillaban: “Atrás el extranjero”. Por eso no habéis de extrañar que a vuestra llegado
el pueblo no grite, no pueda gritar, la voz se le ahogaría en la garganta: “Adelante el
extranjero, viva el rey extranjero”
Es, además, La Coruña, una ciudad republicana. Desde la Revolución de septiembre,
su diputado a Cortes ha sido republicano. El Ayuntamiento actual también es
republicano. (...) Estáis, pues, rey Amadeo, en país enemigo, completamente enemigo;
pero enemigo leal. El pueblo os ve llegar, os deja pasar y se preparara. La mayoría de
los pueblos de España envía representantes como el de La Coruña, las Cortes serán
republicanas, seréis destronado y perderéis vuestra corona, rey Amadeo.
Ramón PÉREZ COSTALES. Carta a don Amadeo de Saboya, elegido rey de España
por ciento noventa y uno diputados de las constituyentes. A Coruña, 15-VIII-1872.
Grande fue la honra que merecí de la nación española eligiéndome para
ocupar su trono (...). Dos años largos ha que ciño la Corona de España, y
la España vive en constante lucha, viendo cada día más lejana la era de
paz y de ventura que tan ardientemente anhelo.
Si fuesen extranjeros los enemigos de su dicha, entonces, al frente de
estos soldados, tan valientes como sufridos, sería el primero en
combatirlos, pero todos los que con la espada, con la pluma, con la
palabra, agravan y perpetúan los males de la nación son españoles, todos
invocan el dulce nombre de la patria, todos pelean y se agitan por su bien;
y entre el fragor del combate, entre el confuso, atronador y contradictorio
clamor de los partidos, entre tantas y tan opuestas manifestaciones de la
opinión pública, es imposible atinar cuál es la verdadera, más imposible
todavía hallar el remedio para tamaños males.
Lo he buscado ávidamente dentro de la ley no la he hallado. Fuera de la
ley no ha de buscarlo quien prometió observarlo. (...)
Estas son, señores diputados, las razones que me mueven a devolver a la
nación, y en su nombre a vosotros, la Corona que me ofreció el voto
nacional, haciendo de ella renuncia por mí, por mis hijos y sucesores.
AMADEO I. Discurso de abdicación. 2-XI-1873.
A I REPÚBLICA (1873-4)
• DIVISIÓN ENTRE:
• Partidarios dunha República Unitaria.
•Partidarios dunha República Federal:
• Federais gradualistas (Pi i Margall): Federación dende arriba.
• Federais intransixentes ou cantonalistas: Federación dende abaixo.

Cartageneros: Los que por la voluntad de la mayoría del pueblo republicano de esta
localidad hemos constituido la Junta de Salud Pública de la misma, tenemos el
deber imprescindible de hacer una declaración (...). Proclamado como forma de
gobierno para España la República Federal, el pueblo republicano (...) reclamaba
que se organizase la Federación, estableciendo inmediatamente la división regional
de los cantones (...), pero el pueblo no ve ni en el Gobierno ni en la Cámara
constituyente una predisposición para la inmediata ejecución de las reformas. Esta
Junta se levanta en armas porque cree que está en peligro la santo causa de la
República Federal.
Aquí no hay verdugos ni víctimas, opresores ni oprimidos, sino hermanos prontos a
sacrificarse por la libertad y la felicidad de sus conciudadanos.
¡Viva la República Federal! ¡Viva la soberanía del pueblo!
JUNTA REVOLUCIONARIA. Proclama. Cartagena, 12-VII-1873.
Art. 1. Componen la nación española todos los Estados de Andalucía Alta, Andalucía Baja,
Aragón, Asturias, Baleares, Canarias, Castilla la Nueva, Castilla la Vieja, Cataluña, Cuba,
Extremadura, Galicia, Murcia, Navarra, Puerto Rico, Valencia, Regiones Vascongadas. Los
Estados podrán conservar los actuales provincias o modificarlas según sus necesidades.
Art.39. La forma de gobierno de la nación española es la república federal. (..)
Art.42. La soberanía reside en todos los ciudadanos, y se ejerce en representación suya
por los organismos políticos de la república constituida por medio del sufragio universal (...)
Art.43. Estos organismos son: El Municipio. El Estado regional. El Estado federal o Nación
(.. ).
Art.45. El poder de la Federación se divide en poder legislativo, poder ejecutivo, poder
judicial y poder de relación entre estos poderes.
Constitución federal [proxecto]. 1873.
Sr. Calvo: A Garda Civil entra no edificio preguntando aos porteiros o camiño [do hemiciclo]
e dicindo que se desaloxe o edificio por orde do capitán xeneral de Madrid.
Sr. Benítez de Lugo: Que entre e todo o mundo ao seu asento.
Sr. Presidente [da Cámara]: Rogo aos Sres. Deputados que se sirvan ocupar os seus
asentos, e que só estea en pe aquel que vaia a facer uso da palabra (...).
Sr. Benítez de Lugo: Pedín a palabra (...) para rogar aos Sres. Deputados da esquerda e do
centro, que votaron comigo, eu que non podo ser sospeitoso, porque consumín un turno en
contra da política do Sr. Castelar, que neste momento a Cámara enteira dea un voto de
confianza ao Sr. Castelar.
Sr. Castelar: Xa non tería forza e non me obedecerán.
Fuxida dos deputados ante a entrada das tropas con Pavía.
Sr. Presidente: Rogo aos Sres. Deputados que ocupen os seus asentos. Non temos máis
remedio que ceder ante a forza, pero ocupando cada quen o seu posto. Veñen aquí e
desalóxarnos. ¿Acordan os Sres. Deputados que debemos resistir? ¿Deixámonos matar nos
nosos asentos? (Varios Sres. Deputados: Si, si, todos).
Sr. Castelar:Sr. Presidente, eu estou no meu posto e ninguén me arrincará del: eu declaro
que me quedo aquí, e aquí morrerei.
Un Sr. Deputado:Xa entra a forza armada neste salón.
Varios Srs. Deputados: ¡Que escándalo! (...)
Sr. Presidente: ¡Que vergoña!
Varios Srs. Deputados: Soldados, ¡Viva a República Federal! ¡Viva a Asemblea soberana!
(...)
(Óense algúns disparos, quedando rematada a sesión no acto). Eran as sete e media da
maná.
Diario de Sesións do Congreso dos Deputados. 3-1-1874 (cast.)
O poder executivo, que nestas circunstancias anormais resumiu en si
toda a autoridade política e revestiuse de facultades extraordinarias,
crese no imprescindible deber de dirixirse á nación para explicar a súa
orixe, xustificar a actitude e expor leal e sinceramente os seus propósitos.
A orde social, a integridade da patria, a súa honra, a vida mesma, foron
salvados por un arranque de enerxía. (...) Reunidos e consultados os
homes de importancia que residen en Madrid e representan dignamente a
todos os partidos liberáis, aclamaron e recoñeceron ao xeneral Serrano
por xefe do poder executivo. A adhesión entusiasta do pobo e do exército,
comunicada por teléfono de case todas as provincias, confírmou esta
elección. Mentres (...) sigan alzados en armas os carlistas nas provincias
do norte (...); mentres o pendón antinacional siga en pe en Cartaxena (...)
e mentres nas provincias de ultramar arda a tea da discordia (...), é
imposible o exercicio de todas as liberdades. Por iso compre un poder
robusto (...) que estamos dispostos a exercer con espirito firme (...).
Unha vez vencida, como esperamos, a anarquía material e moral que
hoxe nos devora (...) volverá a Constitución de 1869 a dar ao pobo todos
os dereitos que nela se consigna, a patria e as actuáis institucións
estarán a salvo e (...) libres da coacción e das paixóns que hoxe fan
fermentar a guerra civil, irán as urnas os cidadáns e votarán aos seus
representantes, que aprobarán ou desaprobarán os nosos actos.
Francisco SERRANO. Manifestó á nación. 8-1-1874 [cast]
Creo (...) que la forma más perfecta de Estado, ahora y siempre, (...) es la forma monárquica.
No digo que sea la única, podrán organizarse en otra forma las sociedades humanas, no lo
niego, (...) pero creo que el instrumento más grande de su progreso, de su desarrollo histórico
es la Monarquía hereditaria. (...).
Si queréis conservar la libertad como yo quiero que se conserve, menester es que salvéis
también la religión y la Monarquía. La libertad, la religión, la monarquía, preciso es estar ciego
para no verlo, son los tres grandes y fundamentales sentimientos de que está poseída la
noción española.
Antonio CÁNOVAS DEL CASTILLO. Discurso [no Congreso]. 8-III-1869.

El principio hereditario (...) he aquí lo que el Gobierno ha llamado Constitución interna (...). El
nuevo reinado ha creído, bajo mi responsabilidad, que, viniendo aquí sin otra afirmación que
la del principio hereditario, al país, a las Cortes tocaba resolver lo demás. Conste que
estamos aquí para resolver esto, y que estamos aquí con el principio que este Gobierno
profesa (...), que la soberanía, en su forma reside en las Cortes con el rey, y que, residiendo
en las Cortes con el rey, las Cortes con el rey son las que han de fallar libremente, (...). Sobre
la forma constitucional que convenga aceptar a España bajo la base de¡ principio hereditario.
Antonio CÁNOVAS DEL CASTILLO. Discurso [no Congreso]. 11-III-1876.
Por virtude da espontánea e solemne abdicación da miña augusta nai, tan
xenerosa como infortunada, son o único representante do dereito monárquico
en España. Arranca este dunha lexislación secular, confirmada por todos os
precedentes históricos, e está indubidablemente unida as institucións
representativas, que nunca deixaron de funcionar legalmente durante os trinta
e cinco anos transcorridos desde que comezou o reinado da miña nai ata que,
aínda neno, pisei con todos os meus o chan estranxeiro.
Orfa a nación agora de todo dereito público e indefinidamente privada das
súas liberdades, é natural que volva os ollos ao seu acostumado dereito
constitucional (...).
Por todo isto, sen dúbida, o único que inspira xa confianza en España é unha
monarquía hereditaria e representativa, mirándoa como irreemprazable
garantía dos seus dereitos e intereses desde as clases obreiras ata as máis
elevadas.(…) Pola miña parte, debo ao infortunio estar en contacto cos homes
e as cousas da Europa moderna, e se nela non alcanza España unha posición
digna da súa historia (...) culpa miña non será nin agora nin nunca. Sexa a que
sexa a miña propia sorte, nin deixarei de ser bo español, nin, como todos os
meus antepasados, bo católico, nin, como home do século, verdadeiramente
liberal.
Afonso de BORBÓN. Manifestó á nación española. Sandhurst, 1-12-1874
[cast]
Don Alfonso XII por la gracia de Dios, rey constitucional de España a todos los que las
presentes vieren y entendieren sabed: Que en unión y de acuerdo con las Cortes del reino,
actualmente reunidas, hemos venido en decretar y sancionar la siguiente Constitución de
la Monarquía española.
Art 18. La potestad de hacer las leyes reside en las Cortes con el rey.
Art.19. Las Cortes están formadas por dos cuerpos colegisladores iguales en facultades: el
Senado y el Congreso de los Diputados.
Art.20. El Senado está formado de senadores por derecho propio, de senadores vitalicios
nombrados por la Corona, de senadores elegidos por las Corporaciones del Estado y
mayores contribuyentes en la forma que determine la ley.
Art.27. El Congreso de los Diputados está formado por los que nombren las Juntas
electora en la forma que determine 1a ley (...).
Art. 28. Los diputados se elegirán y podrán ser reelegidos indefinidamente por el método
que determine la ley.
Art. 50. La potestad de hacer ejecutar las leyes reside en le Rey (...)
Art. 51. El Rey sanciona y promulga las leyes.
Constitución de 1876.

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