En el juicio sobre la bondad o maldad de un acto,

es preciso considerar 3 aspectos que constituyen

las raíces o fuentes de la moralidad de un acto.

Estos aspectos son los

siguientes:
 a) Objeto del acto
Los actos humanos se determinan moralmente por el valor moral de sus objetos.

El objeto constituye el dato fundamental: es la acción misma del sujeto, pero tomada bajo su
consideración moral.

Nótese que el objeto no es el acto sin más, sino que es el acto de acuerdo a su calificativo moral.

Un mismo acto físico puede tener objetos muy diversos, como se aprecia en los ejemplos siguientes:

OBJETOS
MISMO ACTO
DIVERSOS

APROPIARSE DE
MATAR HABLAR
ALGO AJENO
• ASESINATO • MENTIR • ROBAR
• DEFENSA PROPIA • DIFAMAR • UN PRÉSTAMO
• PENA DE MUERTE • ALABA • APROPIACIÓN PARA
SOBREVIVIR
 b) El fin o intención que el sujeto se
propone con ese acto

La finalidad es la intención Como ya se ha visto, cada acción

que tiene el sujeto al
realizar un acto y puede
coincidir o no con el objeto
de la acción.
humana es moral y, por tanto, ha
de ser un medio para alcanzar la
verdadera felicidad. Por ello, todo
acto humano debe estar
ordenado al fin último.
 c) Las circunstancias que rodean el
acto

Son diversos factores o aspectos accidentales del

objeto o de la intención del sujeto que afectan, de
algún modo, a la bondad de la acción.

Por tanto, si el acto es bueno por su objeto y su

fin, las circunstancias acrecientan o disminuyen su
bondad, y llegan incluso a convertir un acto bueno
en malo.

En consecuencia, al juzgar un hecho moral se ha

de tener en cuenta todos esos factores que
acompañan la acción.
 c) Las circunstancias que rodean el
acto
Las principales circunstancias que rodean a un acto y poseen un
influjo moral son:

Características o Cantidad y
Motivo por el que
cualidades de la cualidad del
se realiza el acto
persona que obra tiempo

Cualidad y
cantidad del
Las consecuencias
objeto sobre el Modo de obrar
de la acción
que versa la
acción

Lugar en que se
Medios empleados
realiza la acción
 c) Las circunstancias que rodean el
acto
• Evidentemente, cada sujeto es responsable de sus propios actos, pero
eso no quita que una determinada actuación esté considerada por las
acciones realizadas por otras personas.

• Pueden enumerarse tres modos de inducción a acciones ajenas:

a) La petición
b) La persuasión
Consiste en pedir
o mandar una La ejemplaridad
Consiste en
acción ya sea de aconsejar, alabar,
manera explícita Consiste en la
criticar o influencia querida
o tácita. incentivar las o sólo prevista
acciones ajenas. que la acción de
una persona
puede causar
sobre la voluntad
de otra.