TEATRO REALISTA Y NATURALISTA

(SIGLO XIX)
 TEATRO REALISTA Y NATURALISTA
• Aparece en Europa a partir de la segunda mitad
del siglo XIX, luego del teatro romántico.
 TEATRO REALISTA Y NATURALISTA

Puntos de partida del Realismo y el Naturalismo:

• El Realismo surgió como una reacción a la sensibilidad romántica.
Los héroes solitarios y melancólicos dejaron de ser protagonistas. En
su lugar, el realismo prefirió los personajes que vivían en un entorno
social real. Los escritores realistas se preocuparon por estudiar las
relaciones entre el individuo y la sociedad, sus conflictos y problemas
cotidianos.
• El Naturalismo adoptó los planteamientos filosóficos y científicos
del positivismo de Augusto Comte y la teoría de la evolución de
Carlos Darwin y la teoría de la Herencia de Gregor Mendel.
 Principales rasgos del Teatro Realista
 Se ciñe a la realidad
circundante y busca reflejarla
de modo más objetivo y
despersonalizado posible.
 Presenta un lenguaje cotidiano
y familiar, los personajes
hablan en forma natural.
 Los personajes poseen una
psicología de seres comunes.
 Las acciones se asemejan
todo cuanto se pueda a las
acciones de la gente real.
 TEATRO REALISTA Y NATURALISTA

Teatralmente, estas corrientes tienen dos importantes retos:

 Alcanzar la elevación de espíritu y expresión.
 Conseguir el efecto dramático sin perder la sensación de naturalidad.
 APARICIÓN DEL DIRECTOR

• El naturalismo es responsable en gran medida de la aparición de

la figura del director teatral moderno.
• Aunque todas las producciones teatrales a lo largo de la historia
del teatro fueron organizadas y unificadas por un individuo, la idea
de un director que interpreta un texto, sugiere un estilo de
actuación, escenografía, vestuario y da cohesión a la producción,
es moderno.
• Durante mucho tiempo, en la historia del teatro, la función del
director era asumida por el autor de la obra.
• En el siglo XVIII y parte del XIX, el director era a menudo el actor
principal de la compañía.
 REPRESENTANTES
FRANCIA :
André Antoine (1858-1943)
Director teatral
Influyó de modo determinante en las
reformas teatrales del siglo XIX que
derivaron de las ideas naturalistas
de Émile Zolá.

«Quiere hacer un teatro tan real

como una tajada de vida».
Representación de La Terre, de Émile Zola (1900)
 REPRESENTANTES

NORUEGA:
Henrik Ibsen (1828-1906):
Es sus obras se denotan una crítica a la
sociedad actual, develando las corrupciones y
prejuicios que se suscitaban, tambien deja en
evidencia la discriminación contra las mujeres,
y su posterior liberación femenina, le da
relevancia al retrato psicológico de sus
personajes.
Sus Obras: Casa de muñecas (1879),
Espectros (1881) El pato silvestre (1884), La
dama del mar (1888), Al despertar de nuestra
muerte (1900), etc.
 REPRESENTANTES
Henrik Ibsen (1828-1906):

El tema preferido del

teatro de Ibsen es el
derecho del individuo a
su plena realización
personal, frente a las
convenciones sociales y
morales que coartan su
libertad.
 REPRESENTANTES

Suecia:
August Strindberg (1849-1912)
Seguidor del teatro de Ibsen, es considerado el
renovador del teatro sueco. Dentro del naturalismo y
de la denuncia social, escribe obras en las que trata
temas como lucha entre sexos, Posteriormente,
evoluciona hacia un teatro más vanguardista y
simbólico, con lo que se convertirá en uno de los
iniciadores del teatro vanguardista de las primeras
décadas del siglo XX.
Sus obras:
El camino de Damasco (1898-1904), La danza de la
muerte (1900) y La sonata de los espectros (1907).
 REPRESENTANTES
RUSIA:
Antón Chejov:
Fundador del teatro Ruso moderno, en sus
obras describía la decadencia en que se
encontraba la burguesía rusa de finales del
siglo XIX. Una de sus obras más celebres fue
«La gaviota». Cuyo éxito es inseparable de la
fundación del Teatro del Arte de Moscú por
Stanislawsky y Dachenko. Otros realistas
cuya obra también está ligada a este
extraordinario estudio de teatro son Tolstoi y
Máximo Gorki.
Sus obras: El oso (1888), Petición de mano
(1888-1889), La gaviota (1896), Tío Vania
(1899-1900), El jardín de los cerezos (1904), Antón Chejov y León Tolstoi
Las tres hermanas (1901) , etc.
 REPRESENTANTES
INGLATERRA:
Oscar Wilde
Sus obras están cargadas de
intrigas y de humor, en las que
hace gala de un lenguaje elegante,
refinado e irónico.
Sus obras:
La importancia de llamarse
Ernesto (1895), El abanico de
Lady Windermere (1892) y Un
marido ideal (1895)
 REPRESENTANTES
INGLATERRA:
Bernard Shaw (1856-1950)

Destacado dramaturgo, influenciado

por el escritor noruego Henrik Ibsen.

Sus obras:
• “Casa De Viudas” (1892), “La Profesión
De La Señora Warren” (1894), “Cándida”
(1895), “César y Cleopatra” (1899),
“Hombre y Superhombre” (1903), “El
Compromiso “Pigmalión” (1914), “Santa
Juana” (1924), “El Carro De Las
manzanas” (1929) o “Ginebra” (1938).