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Vibraciones en sistemas físicos

Autor: Tadeusz Majewski


Capítulo 11
Respuesta humana a las
vibraciones
TEMARIO

I. Introducción
II. Respuesta a las vibraciones
III. Normas de exposición a
vibraciones
IV. Terapia vibratoria
Objetivos del capítulo 11
Analizar la influencia de las vibraciones
sobre el ser humano, así como presentar
algunas normas que restringen el tiempo
de exposición a las vibraciones.
Se muestra también el uso terapéutico de
las vibraciones para la prevención de
enfermedades.
I. Introducción
El cuerpo humano es complejo y está constituido por
diferentes órganos, siendo su respuesta a las
vibraciones función de su frecuencia y amplitud.
Las vibraciones se transmiten al cuerpo humano
cuando se contacta una superficie vibrante, cuando
se está sentado en un asiento que vibra, de pie
sobre un suelo vibrante, recostado sobre una
superficie vibrante, o se transmiten por las manos
desde herramientas vibrantes (por ejemplo, un
martillo neumático).
I. Introducción
Las vibraciones de cuerpo completo se presentan en
todos los medios de transporte y cuando se trabaja
cerca de maquinaria industrial.
Se originan en diversos procesos de la industria, la
agricultura, la minería y la construcción, al agarrar o
empujar herramientas o piezas vibrantes con las
manos o los dedos.
La exposición a las vibraciones transmitidas por las
manos puede provocar diversos trastornos físicos y/o
mentales.
II. Respuesta humana a las vibraciones
La respuesta humana a las vibraciones depende
de la intensidad y la duración total de la
exposición a las mismas; su nocividad se
clasifica según su intensidad en la
normatividad (ISO 2631, ISO 5349).
Si las características de la vibración varían, la
vibración promedio medida dependerá del
período de medición.
II. Respuesta humana a las vibraciones
Las exposiciones profesionales a las vibraciones de
cuerpo completo ocurren principalmente en el
transporte, pero también en algunos procesos
industriales.
Los medios de transporte terrestre, marítimo y
aéreo producen vibraciones que pueden causar
malestar, interferir con las actividades habituales
o causar lesiones.
II. Respuesta humana a las vibraciones
La vibración que entra por un punto del cuerpo se
transmite a todos los órganos; por ejemplo, la
vibración del asiento se propaga desde el cuerpo
hasta la cabeza, sin embargo la amplitud
disminuye.
Los efectos de las vibraciones de cuerpo completo
son máximos en el límite inferior del intervalo
de frecuencias de 0.5 Hz a 100 Hz.
II. Respuesta humana a las vibraciones
Las frecuencias inferiores a unos 0.5 Hz pueden
causar mareo inducido por el movimiento.
El contenido de frecuencia de la vibración se ve
en los espectros.
En muchos tipos de vibraciones de cuerpo
completo y/o transmitidas a las manos, los
espectros son complejos, produciéndose algún
movimiento a todas las frecuencias.
II. Respuesta humana a las vibraciones
Sin embargo, suele haber picos en las
frecuencias que se presentan en la mayor
parte de las vibraciones.
Dado que la respuesta humana a las vibraciones
varía según la frecuencia de vibración, es
necesario ponderar la vibración medida en
función de cuánta vibración se produce para
cada una de las frecuencias.
II. Respuesta humana a las vibraciones

Las ponderaciones en frecuencia reflejan la


medida en que las vibraciones causan el
efecto indeseado para cada frecuencia.
Se requieren ponderaciones en frecuencias
diferentes para las vibraciones de cuerpo
completo, para las vibraciones transmitidas a
las manos y para el mareo inducido por el
movimiento.
II. Respuesta humana a las vibraciones
El cuerpo humano es parecido a los sistemas
mecánicos vibratorios.
Los órganos poseen masa y elasticidad y están
suspendidos elásticamente de otros órganos
por músculos, tendones o diafragmas.
Hay muchas resonancias en el cuerpo, y las
frecuencias de resonancia varían de una
persona a otra en función de la postura.
II. Respuesta humana a las vibraciones
Cada órgano del cuerpo humano tiene una
frecuencia natural.
Por ejemplo, la resonancia en el tórax y el
abdomen varía entre 3 Hz y 6 Hz.
El malestar causado por la vibración depende de
la frecuencia y de la dirección de la vibración,
del punto de contacto con el cuerpo y de la
duración de la exposición a la vibración.
III. Normas de exposición a vibraciones
La exposición a las vibraciones puede provocar:
Alteraciones en las funciones fisiológicas.
Alteraciones neuromusculares.
Alteraciones cardiovasculares, respiratorias,
endócrinas y metabólicas.
Alteraciones sensoriales y del sistema nervioso
central.
III. Normas de exposición a vibraciones
La exposición a vibraciones puede ser de dos tipos :
a.- De corta duración:
vibraciones pequeñas: mal estado de salud, fatiga
(cansancio, depresión), miedo, insomnio, dolor de
cabeza,
vibraciones medianas: problemas de visión, respiración,
equilibrio, dolor en bajo vientre,
vibraciones grandes: daños a órganos internos,
perturbación en las funciones de órganos internos
III. Normas de exposición a vibraciones

b.- De larga duración:


afectación de la columna, se incrementa el riesgo de
molestias lumbares, se degeneran vértebras y discos
intervertebrales, falta de sentido de tacto en las
extremidades, deformación de huesos y músculos, el
"síndrome de dedos blancos” causado por el martillo
neumático, daños en las articulaciones y músculos de la
muñeca y de la mano, transtornos vasculares, neurológicos
periféricos, de los huesos, de las articulaciones y
musculares
IV. Terapia vibratoria
Las vibraciones se usan en el tratamiento y bienestar
del cuerpo humano a través de la ingeniería
biomédica para la prevención de enfermedades y
para el tratamiento de huesos y músculos; y aún
para la reducción de peso.
Se usan plataformas vibratorias donde se vibra el
cuerpo completo con una frecuencia de entre 3 Hz y
30 Hz como herramienta terapéutica para el manejo
de trastornos de la postura.
IV. Terapia vibratoria
La vibración que se genera en este tipo de
plataformas provoca una contracción muscular
involuntaria a través del cuerpo, aumentando la
flexibilidad de los músculos; además, se observa
una quema de grasa debido al aumento del
metabolismo, mejorando por ende la circulación.
IV. Terapia vibratoria
La lista de las enfermedades y malestares que se
pueden controlar utilizando plataformas
vibratorias u otros dispositivos vibratorios
comprende: mal de Parkinson, diversas formas
de parálisis, dolores de espalda, dolores y
lesiones en tobillos, lesiones en las rodillas,
artritis, enfisema, várices, parálisis cerebral
Estos tratamientos son muy recomendables para
adultos mayores ya que se retrasa el síndrome
de la vejez
IV. Terapia vibratoria
Los dispositivos vibratorios se usan también en los
viajes espaciales para el tratamiento de la
disminución de la densidad ósea y la atrofia
muscular que los cosmonautas sufren a su regreso
debido a la ausencia de gravedad.
Las ondas sonoras (0.8 MHz- 3 MHz) se utilizan en
distintas aplicaciones de ingeniería biomédica;
limpiadores ultrasónicos, traqueotomía ultrasónica,
bisturíes ultrasónicos y litotricia.
IV. Terapia vibratoria
Para la desintegración de cálculos, las ondas
ultrasónicas pasan a través del organismo
hasta que chocan con los cálculos.
Las vibraciones de estas ondas los pulverizan,
y sus residuos pasan con mayor facilidad
por el uréter hacia el exterior del organismo
a través de la orina.

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