La relación entre los hombres, la relación

con Dios y el cuidado de la creación

El clima es un bien común,
de todos y para todos. Ya se
han rebasado ciertos límites
máximos de explotación del
planeta sin que hayamos
resuelto el problema de la
pobreza
(Laudato si. Francisco)
La tecnología pretende ser
la única solución de los
problemas, pero suele ser
incapaz de ver el misterio de
las múltiples relaciones
entre las cosas y a veces
resuelve un problema
creando otro
No es propio de los habitantes de este
planeta vivir cada vez más inundados
de cemento, asfalto, vidrio y metales,
privados del contacto físico con la
naturaleza. Es un gran problema la
privatización de los espacios públicos y
de los entornos de gran belleza.
Ayudar a los pobres
con dinero debe ser
siempre una solución
provisional para
resolver una
urgencia. El gran
objetivo debería ser
siempre permitirles
una vida digna a
través del trabajo
La existencia humana se
basa en tres relaciones
fundamentales
estrechamente ligadas:
la relación con Dios, con
el prójimo y con la
tierra. La Biblia nos
enseña a ver que estas
relaciones se han roto
no solo externamente
sino dentro de nosotros
 La crisis
ecológica es una
manifestación
externa de la
crisis ética,
cultural y
espiritual de la
humanidad
 Los cristianos
descubren que
su cometido en
la creación así
como sus
deberes con la
naturaleza y el
creador forman
parte de su fe
La libertad humana debe
hacer su aporte inteligente
hacia una evolución
positiva, pero también
puede generar nuevos
males y causas de
sufrimiento. Por eso la
acción de la Iglesia –de
todos los cristianos- no solo
nos recuerda el deber de
cuidar de la creación, sino
que también debe proteger
al hombre contra la
destrucción de sí mismo