" El niño es el ser más

incomprendido y el más
conculcado de todos los
tiempos. Todos los males que
sufre l a sociedad actual son
consecuencia de nuestra
incapacidad para
comprender a los niños. Hay
que prepararse para
comprenderlos"
 El medico y el abogado esperan al cliente. El maestro al discípulo.El
cliente busca la salud o la justicia. El discípulo la orientación en la
vida. El niño trae consigo el proceso de la raza, la historia de una
familia, la influencia en una sociedad. La responsabilidad que
asume el maestro, es pues, grave, y lo es en sumo a grado desde
que no es capas de ofrecer un diagnostico seguro.
 Gran parte de esta lamentable deficiencia se debe a que la
escuela ha sido considerada, como una oficina administrativa,
encargada de enseñar sometiendo, en consecuencia, a los
maestros y a los niños a un conjunto de disposiciones
reglamentarias dentro de los cuales es imposible toda experiencia.
 Pocas son las escuelas que educan a los niños en un ambiente de
libertad, menos aun donde se les somete a un permanente y
metódico estudio. Cualquiera que sea la doctrina profesada sobre
la mayor o menor libertad de los niños, la escuela debe conocerlos
y estudiarlos. La presencia del medico, del psicólogo y del maestro
es necesaria. El maestro no puede llenar si no su misión sino a base
de un examen psico – medico. Este papel aparentemente
secundario encuentra resistencia en el magisterio.
 El maestro enseña y educa de acuerdo con los datos aportados por el
examen psico – medico, pudiendo aumentar o disminuir la dosis de la
enseñanza, detener o favorecer tendencias y actividades del niño, según
el proceso que siga determinada norma educativa. Así su libertad no esta
cohibida ni su misión aminorada en importancia y trascendencia. Al
contrario desenvuelve su labor dentro de un ambiente científico,
sometiendo al estudio y a la experiencia no solo los casos marcadamente
anormales, sino aquellos que, con frecuencia, se escapan a la
observación mas perspicaz de un maestro.
 Favorecer la pasividad y detener la inquietud han sido, sin duda, uno de
los mas graves errores cometidos por la escuela.
 En el Perú aun no se ha intentado dirigir la escuela por este camino de la
libertad y de la diagnosis. No podemos darnos el placer de señalar
ninguna institución oficial, o particular, donde se practiquen todas estas
tendencias educativas.
 Hace algunos años que se fundo una “Escuela correccional”, que era
prácticamente una cárcel para menores. Esa Escuela ha estado en
manos de militares y de curas, menos en poder de educadores y
psiquiatras.
 Fuera de este ensayo de Escuela “ correccional” , no encontramos iniciativa
alguna para establecer escuelas para niños anormales, o clínicas psico –
medico – pedagógicas.
 La dificultad de conocer al niño, de clasificarlo y de colocarlo en la Escuela
en el lugar que corresponde, fue, para nosotros, la primera y la mas saltante
inquietud. La Escuela Normal no nos preparo en esa materia.
 Comenzamos por disminuir la cantidad de trabajo mental, improductivo, a la
que estaba sometido el estudiante. Nuestro propósito fue enseñar lo menos
posible, pero en forma eficiente. Excluido el texto y las lecciones de memoria,
el niño respiro en un ambiente de libertad intelectual.
 Ningún niño fue abandonado a su suerte. Muchos de los considerados en
otras escuelas como “casos perdidos”, encontraron en el Centro el ambiente
propicio para mejorar su conducta y ejercitar con mayor éxito su mentalidad
 El resultado inmediato de esta forma de apreciar el valor de los estudiantes
fue el espíritu de solidaridad que reino entre ellos y la confianza que cada
uno tuvo en sus propias fuerzas. La clase para ellos no era para ellos no era
lugar de tortura moral y mental. Cada uno se creía dueño de alguna aptitud
puesta al servicio de la colectividad. Ninguna rivalidad que fuera fruto de la
envidia germino en el espíritu de los estudiantes. Nadie se considero inferior a
otro, ni en el orden de conocimientos, ni en el orden moral, menos en la
mortificante división de clases.
 Solo para cumplir una disposición reglamentaria seguimos usando las
libretas semanales donde se daba cuenta a los padres de familia acerca
de la “conducta” y “aprovechamiento” de sus hijos. Nunca dimos
importancia a esta absurda forma de apreciar la vida de un niño en la
Escuela.
 Los temas no eran, pues, simples cuestiones entresacadas del plan de
estudios o de algún texto; al contrario, fueron problemas mas o menos
difíciles cuya solución requería –de parte del estudiante- una verdadera
disciplina mental, la que solo podía obtenerse mediante un
entrenamiento libre de todos los elementos que la constituyen.
 Solo el maestro, en colaboración estricta con el medico y con el
psicólogo, es capaz de mejorar cada vez Mas las condiciones de la vida
integral del niño.
 El ideal seria el examen para cada alumno en el tiempo y en la forma
que mas conviene a sus necesidades.
 Los niños no fueron preparados artificialmente para un examen. Ellos no
sintieron la tortura de los trágicos días de Noviembre y Diciembre. Puedo
estar seguro que ninguno de ellos desvelo para un examen, pues ya lo
habían rendido mes a mes.
 Es difícil que un jurado compuesto por personas, en su mayor parte
profanas en materia de enseñanza, pueda estar capacitado para juzgar
por lo menos la cantidad de conocimientos que tiene el estudiante,
valiéndose de unas cuantas preguntas capciosas, solicitando la definición
de algunos principios, exigiendo la solución de problemas que son
charadas. siendo en muchas ocasiones, cómplice de una serie de
corruptelas punibles; en Lima, sobre todo, el “oficio de jurado” se ha
puesto casi en publica subasta.
 Felizmente, en Puno el personal del jurado estuvo integrado, sin excepción
alguna, por gentes de un elevado valor cívico. Magistrados, maestros,
intelectuales, todos de probidad intachable, aceptaron con entusiasmo el
rumbo que el centro había dado a los exámenes.
 El centro Escolar suprimió los premios, “la solemne repartición de premios”
dejo de existir. Termino para siempre la petulancia y soberbia enfermiza de
los niños engreídos y dotados de una “buena memoria”, que, especialistas
en dar exámenes orales, monopolizaban todas las recompensas.
 Allí, donde la disciplina significa la mas absoluta obediencia al maestro, la
mas completa pasividad física y mental, reina la fuerza, imponiendo un
régimen de conducta contraria a la naturaleza del niño.