ÉTICA

¿¿¿CRISTIANA??
? 1ª Pedro 1: 14-16
 Viene del griego "ta ethica" =
los asuntos morales,
Ética: y se deriva de hechos =
costumbre.
Parte de la filosofía que trata de la
moral y las obligaciones del
hombre.
“Es la ciencia de la conducta".
Un código de reglas o principios
morales que rigen la conducta,
considerando las acciones del hombre
referidas a su justicia o injusticia, a su
tendencia al bien o al mal.
 Disciplina filosófica que estudia el
comportamiento humano en cuanto al bien y
Moral: el mal // Conjunto de costumbres y normas
que se consideran buenas para dirigir o juzgar
el comportamiento de las personas en una
comunidad.

La moral es un conjunto de normas,

creencias, valores y costumbres que dirigen o
guían la conducta de grupos de personas en
la sociedad. Se distingue de la ética en que
esta es una moral transcultural o universal,
aunque ambas se suelen confundir.

Moral es una palabra de origen latino, que

proviene del términos moris(“costumbre”). Se
trata de un conjunto de creencias,
costumbres, valores y normas de una
persona o de un grupo social, que funciona
como una guía para obrar. Es decir, la moral
orienta acerca de que acciones
son correctas (buenas) y cuales
 Por ello se dice que es
normativa, porque
busca un ideal o norma,
según el cual se pueden
formular las reglas y
leyes de la conducta.
Así que la conducta
ética viene a ser
sencillamente una
conducta de
acuerdo con ciertas
normas.
¡EL HOMBRE Está dotado por Dios
ES UN SER de una mente capaz
ÉTICO! de razonar y de un
albedrío responsable

Escoge continuamente su
futuro de entre muchas
opciones, deliberando sobre
El ser humano los valores o bienes a
“se va haciendo” conseguir, que le sirven de
motivación para actuar, o le
progresivamente empujan a una decisión en
cada momento de la vida.
Reformalizan a 35
carabineros por megafraude
Caso Catrillanca: el
y monto sube a casi $28 mil registro de mentiras
HA de los policías del
millones
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nefasta: Fiscalía
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Durán pastor evangélico
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IED en Guatemala
Trump y la trama rusa: la
sexuales contra menores de liderar
acusado
investigación de la injerencia A red de
narcotráfico
del Kremlin en las elecciones
SQM:
de EE.UU. en 300 palabras A D
Minera confirma
Caso Penta: El día más
nombre de políticos
oscuro para el combate
involucrados por pagos
contra la corrupción "indebidos"
 La
Ética Cristiana norma al
cristiano en su vida completa….,
con asiento en la Biblia.

“… estamos pensando en la
conducta que debe observar el
cristiano en todo momento (1ª
Pedro 1.14-16).”

“… nos desafía a mejorar nuestra manera

de vivir porque demanda que vivamos
según las normas de santidad que Cristo
vivió. Ya lo dijo Juan… (1ª Juan 2.6).”
La Biblia es mucho más que una lista de mandatos
positivos y negativos; nos da instrucciones
detalladas sobre cómo debería vivir el cristiano.
Sin embargo, no trata
explícitamente cada
situación que podamos
enfrentar en la vida.
¿Cómo, entonces, es
suficiente? Por ello la
Ética Cristiana.
Consta de los principios, derivados de la fe cristiana por
los cuales actuamos, asentada en la Biblia, dándonos
un estándar por el cual debiéramos conducirnos en
todas las situaciones, incluídas donde no hay
instrucciones explícitas.
 LA NECESIDAD
DE ESTE
TEMA…
Somos parte de una sociedad sin Dios que
está gobernada por un relativismo moral
alarmante.

Hay una falta total de ejemplos de ética en

todas las esferas.
El Herald, de Miami publicó tiempo atrás un artículo
titulado "El fracaso moral de la civilización", que
expresa:
"Desde el Decálogo de Moisés a través de toda la poderosa
influencia moral del cristianismo, la civilización occidental
había mantenido tenazmente un conjunto de reglas morales
y de principios éticos que constituían la base misma de la
educación y de la conducta civilizada. El reconocimiento de
esos grandes principios morales llegaban a conformar una
manera de distinguir fácilmente entre lo que era el bien y lo
que era el mal. Lo que ha ocurrido desde la Primera Guerra
Mundial equivale a una inmensa hecatombe moral de
nuestra civilización. Se ha ido estableciendo tenazmente un
divorcio entre los principios éticos y las realidades de la vida
social, con inmensas consecuencias destructivas del ideal
mismo de una civilización digna de ese nombre"
Lo grave es que ese relativismo
moral de la sociedad ha ingresado
a las iglesias.
Conocemos la situación moral de
nuestros países latinoamericanos. Sus
dirigentes políticos no son un
modelo de conducta ética: La
mentira, la vida ostentosa, el fraude,
la corrupción, la impunidad, la falta de
justicia y de seguridad y un nivel de
transgresión generalizado, han creado
un ambiente de libertinaje.
Cada decisión en la vida moral
presupone un criterio, una norma,
algo tomado como la verdad en la
que se basa tal decisión.
Nuestro propósito es hacer más clara
esa norma con base en la Biblia.
 “La ética cristiana es aquella ciencia
teológica que estudia la vida moral y
cristiana, declara el hacer la voluntad de
Dios, revelada en su Palabra, como el
ideal fundamental para esa vida, y
procura encontrar la manera por la cual
este ideal pueda realizarse por el
cristiano como agente moral en todas
sus relaciones de la vida.”
Para efectos de este curso,
esta será la definición que
tendremos presente.
LA URGENCIA DE LA TAREA ÉTICA
La verdadera urgencia de la tarea ética se
halla en las circunstancias especiales en que
nos encontramos hoy.., por varias razones:
 El gran número de nuevos problemas morales,
difíciles y complicados que las condiciones de
la vida actual nos ha echado encima.
 La tendencia actual deliberadamente
anticristiana de la moralidad y la ética, aun en
los países nominalmente cristianos.
 Nuestra innegable negligencia en el estudio de
la ética, como iglesia.
Nota textual
importante:
1. La complejidad y dificultad del moderno problema moral.-
“Gran número de serios problemas morales, propios de la modernidad y
postmodernidad, exigen solución. Unos son nuevos, traídos por las nuevas
formas de pensar y los descubrimientos científicos; otros son nuevas formas
de antiguos problemas éticos. Además, lo que muchos llaman la tarea social
del cristianismo y posturas hacia la ecología en realidad son la tarea moral.
Afirmamos que sólo los principios de Cristo ofrecen una verdadera solución
para las enfermedades morales de nuestra época. Para ello, es menester
comprobar su verdad en la vida actual. Y esto depende de un sincero
desempeño de nuestra tarea ética. Todo mejoramiento social, todos los planes
prácticos para aliviar las condiciones intolerables, y cada programa cristiano
para la reforma moral deben arraigarse en un concepto sano de la base, del
motivo, del ideal y de la meta máxima de la vida moral cristiana, vistos a la luz
de la revelación de Dios. En el pasado casi toda la energía de la iglesia se
disipaba tanto en la formulación teológica de su doctrina como en la búsqueda
de soluciones en las controversias doctrinales - actividades absolutamente
esenciales - y actualmente podemos pensar mejor como cristianos debido a
ellas, pues nos dan un fundamento seguro para sostener nuestro pensamiento
ético.”
Pero ahora la iglesia necesita aplicar su energía
también a la solución de los grandes problemas
morales de nuestra época. Esto constituye un reto
grande para la ética cristiana.
No obstante, se debe advertir algo: Su pensamiento
ético no debe estar orientado sólo hacia los
problemas que actualmente buscan solución. Hay
que ver más allá. Positivamente tenemos que buscar lo
bueno, lo recto, lo debido y lo ideal, en relación con
cualquier problema, situación y condición de la vida. La
ética tiene que desarrollar los principios bíblicos que
conforman la base para tomar las decisiones ético-
morales. La vida ética cristiana tiene que ver con la
toma de decisiones más que con simplemente aceptar
las normas sugeridas por otros, aunque sean del
2. La tendencia anticristiana en la moralidad de la ética actual.
Este aspecto es evidente en todas las expresiones de la vida y pensamiento actuales,
tanto en Europa como en las Américas. El cristianismo ha sido excluido como fuente y
norma de valores y como la pauta del pensamiento.
 En cuanto a la moralidad actual. En la vida de mucha gente, cristiana por tradición,
se ve un repudio creciente de las normas cristianas en la vida práctica y moral. Uno
de los fenómenos más asombrosos en la actualidad es el de la «descristianización» o
«secularización» de grupos cristianos. Aun en un libro publicado recientemente, un
autor puso como título la pregunta: «¿Todavía podemos ser cristianos?» Muchos
«cristianos» deben preguntarse: ¿Somos todavía cristianos? Presenciamos una
tendencia cada vez más fuerte de un alejamiento de los modos cristianos de vivir.
Esto se nota sobre todo en el decaimiento del matrimonio (y de la vida familiar) como
una institución divinamente ordenada. El divorcio es aceptado por la sociedad en
general y la fidelidad dentro del matrimonio ya no se estima como altamente
deseable. Este es uno de los muchos ejemplos posibles, que evidencia que el ser
humano está separándose rápidamente de los valores cristianos de la vida y del
deber.
 En cuanto a la ética actual. El repudio de las normas morales cristianas de la vida
práctica se debe en gran parte a la diseminación de teorías y sistemas anticristianos
a través de la enseñanza universitaria, conferencias, y los medios de comunicación.
Son dos, por lo general, los tipos básicos de la ética moderna que corresponden a los
dos principales tipos de la filosofía anticristiana en la época actual: (1) el idealismo y
(2) el naturalismo.
(1) La ética idealista moderna. Se considera el más respetable. Muchos de los eruditos
universitarios la siguen. En algunos casos la unen con el cristianismo, resultando una forma de
moralismo religioso. La mayor parte del modernismo (o liberalismo) teológico aboga por ella. Pese
al “ropaje cristiano” que usa no puede ocultar su verdadera identidad. Si bien está de acuerdo con
la ética cristiana en postular que la realidad última sea «espiritual» (no simplemente biológica o
material), y mantener que ha de existir una norma objetivamente válida de lo correcto, ello no hace
que sea una ética cristiana. Al contrario, es sutilmente anticristiana. En casi todas sus formas
presenta una confianza (o una fe) en la capacidad natural del hombre para realizar su ideal y hacer
lo bueno; supone una perspectiva evolutiva que rechaza la enseñanza bíblica de la caída; niega la
operación de la gracia sobrenatural en la redención y en la regeneración; no cree en el pecado y la
culpabilidad; considera que toda maldad no es más que lo bueno todavía por realizarse; y
mantiene que el ideal moral es básicamente la autorrealización del ser humano a través del
desarrollo de todas las potencialidades nativas del hombre. Aboga por la autonomía del ser
humano: da por sentado de que el hombre sea autónomo. Este tipo de ética, especialmente por su
alianza con la teología modernista, ha sido una de las influencias más potentes en las tendencias
anticristianas en la ética moderna.
(2) La ética naturalista moderna. Se inspira en el repudio de que haya (o que pudiera haber) una
realidad espiritual en cualquier forma. Es plenamente anticristiana y menos sutil. Aboga por la
ciencia natural y la teoría de evolución. El punto de vista biológico es la última categoría. Implica
una ética utilitaria y hedonista. El placer es el bien más alto - esencialmente el placer sensual,
aunque sea de un tipo refinado -. Además, todo lo que sea útil para conseguirlo se justifica. La
ética naturalista es francamente hostil al cristianismo. Nitzsche y Dewey son dos de sus
exponentes modernos. La ética marxista - que ya no se enseña mucho, y es básicamente
naturalista - ha dejado sus huellas en ella. Es la ética que está ascendiendo en la mayoría de las
universidades latinoamericanas y europeas, y predominante en muchas de ellas. Se viste de una
perspectiva humanista, pero muy hostil a todo lo sobrenatural y teológico, y a lo que es básico en
la religión y la moralidad. Esta perspectiva, perfilada por numerosos líderes intelectuales,
constituye el ataque más serio y franco hoy día contra los principios y normas de la ética cristiana.
3. Nuestra deficiencia en el estudio de la ética bíblico-teológica en
tiempos pasados. Todo lo dicho antes acentúa la urgencia de la tarea
ética.
Existe una urgente necesidad de un testimonio fuerte e inteligente en
cuanto a las implicaciones morales de nuestra fe, frente al relativismo ético
de hoy. La iglesia cristiana tiene que hablar claramente, no sólo sobre los
puntos doctrinales sino también sobre los principios éticos. La teología
debe indicar la diferencia entre los fundamentos éticos corrientes de
nuestros días y los de la ética que se sujeta a la Palabra de Dios. La tarea
apologética de la iglesia cristiana también tiene su fase ética. El cultivo del
estudio ético sobre la base bíblica puede ser un estímulo grande para una
apreciación más a fondo del aspecto ético de la predicación. Enfrentándose
a las corrientes modernas de la moralidad y la ética, el pueblo cristiano
necesita de un profundo sentido ético en su conciencia. No debemos
confundir la moralidad con la ética, pero sí podemos estar seguros de que
el estudio de la ética, si está bien hecho, sin lugar a dudas dará aliento a la
vida moral del cristiano, tanto al que la estudia como a los que están bajo
su influencia espiritual. El estudio de la ética es también una
«precondición» para resolver los muchos problemas, confusos y
complicados, que la vida moderna presenta al cristiano.
 EL AGENTE
MORAL CRISTIANO

Ahora vamos a ocuparnos en considerar al agente (o

actor) de la vida moral cristiana: el cristiano. Aquel
que se esfuerza para vivir cristianamente.
Para entender al cristiano en su papel de agente moral
lo estudiaremos:
Primero, como hombre creado por Dios;
Segundo, como hombre caído en el estado de
pecado,
Finalmente, como hombre redimido por Cristo y
regenerado por el Espíritu de Dios.
 LA NATURALEZA DEL SER
HUMANO
 El hombre es espíritu, pero
espíritu finito (es decir, creado).
 Aunque el hombre es
esencialmente espíritu, tiene
cuerpo (o habita un cuerpo).
 Su naturaleza es racional-
moral. Esto ya está implícito en
que el hombre, siendo espíritu,
está hecho a la imagen divina.
Las implicaciones éticas de la
doctrina bíblica de la
naturaleza del hombre son
importantes y significantes.
Las implicaciones tocan a tres
puntos:
 El fin verdadero del hombre
 La libertad humana
 La conciencia humana
 El Fin verdadero del Hombre.-

Glorificar a Dios
Una vez que el hombre alcance este
propósito, esforzándose para hacer su
santa voluntad, podrá realizarse como
tal.

 La libertad humana.-
¿Es libre el hombre? Y si lo es ¿con referencia a qué? Si el
hombre tiene lo que se llama el «libre albedrío»: ¿Es libre el
hombre (y su voluntad) en cuanto a las fuerzas de la
naturaleza?; ¿Es libre el hombre (y su voluntad) en cuanto a la
omnipotencia y providente voluntad de Dios?; ¿Es libre el
hombre (y su voluntad) con respecto a la realización de su
verdadero fin?
 La conciencia humana.- Tanto en el AT como en el
NT la palabra “corazón”
significaría conciencia.
 Es la capacidad moral del hombre
de enterarse o darse cuenta.
Es la facultad de juzgar sus
hechos, futuros o pasados,
aprobando los que considere
correctos y condenando los que
considere equivocados.
El ser humano se da cuenta de que se da cuenta y
está enterado de que está enterado. También podemos
decir que la conciencia es la capacidad de estar
consciente de que se está consciente.
El hombre es entonces un ser «autoconsciente». Se da cuenta de sí
mismo. Puede ser, a la vez, el sujeto y el objeto de su pensamiento.
Puede pensar en sí mismo y contemplar sus pensamientos. Cada
juicio que hace conscientemente en cuanto a su conducta tiene su
aspecto moral y está moralmente condicionado. Se evalúa por sus
actos a la luz de ciertas normas morales. Esta capacidad del hombre
de darse cuenta y de funcionar como juez de sus propios hechos es la
conciencia humana.