-En la historia del cristianismo se han elaborado muchas visiones e imágenes de Jesús, a partir de las tendencias de la época y los presupuestos de los autores. -¿Se ha deformado al Jesús real? ¿Su mensaje también se tergiversa? -La Iglesia ha establecido algunas afirmaciones como verdades, lo que no impide el desarrollo del conocimiento sobre Jesús. Por ejemplo: ¿Cómo es verdadero hombre? La elaboración de las visiones sobre Jesús conjuga 3 formas de conocer • La fe: la creencia cristiana en Jesús (no necesariamente el dogma). • La historia: Jesús, como persona histórica, es susceptible de ser tratado con los métodos e instrumentos de la historia (el hecho de la fe en Jesús es también un dato histórico estudiable). • La hermenéutica: teoría de la interpretación y ciencia/arte de interpretar los datos disponibles sobre Jesús. (que se apoya en varias ciencias) •Hoy podemos distinguir históricamente, diversas visiones sobre Jesús y etapas en su elaboración • Mientras Jesús vivió nadie fue escribiendo lo que hizo o dijo. algunos fueron escribiendo algo de sus recuerdos y experiencias íntimas con él. Después de su muerte, se fueron transmitiendo oralmente los recuerdos sobre Jesús, con los lógicos agregados y modificaciones que las comunidades iban produciendo. Primeras, diversas y fundamentales visiones. Son las del NT, que empiezan a escribirse entre 40 y 70 años después de la muerte de Jesús.
Pablo escribe en Corintios que Dios estaba en
él y en Rmanos y que lo resucitó. Hubo quien escribió algunos dichos y hechos que recordaban como suyos (fuente Q y evangelio de Tomás) Mc y Lc presentan a Jesús como el Hijo de Dios y Mateo, ya pone por escrito algunas formulas trinitarias de los primeros cristianos
El cuarto Evangelio, (años 95-100), presenta a
Jesús completamente entendido como la encarnación de Dios. Él era “la Palabra” que estaba con Dios desde el principio de la creación. La Palabra de Dios “se hizo carne” en la persona de Jesús Durante los primeros siglos de la Iglesia, diversos cristianos fueron reflexionando el mensaje de Jesús y ensayaron sus propias interpretaciones . Segunda etapa: siglos IV a XIV • La elaboración teológica sobre Jesús, con su divinidad como centro y la resurrección como sello legitimador de su misión salvífica, cubrió 10 siglos, desde el primer Concilio de Nicea hasta el Renacimiento. • En este período, la dimensión humana de Jesús pasó a ser casi un accidente sin relevancia. Tercera etapa: siglos XIV a XVIII • Hay 3 intenciones que se convierten en preparatorias de la búsqueda formal del Jesús histórico: • recuperar las fuentes originales (desde el Renacimiento -siglos XIV a XVI) • acentuar el carácter misterioso de la inspiración del hermeneuta (en el Romanticismo -fines del siglo XVII), y • redefinir y mejorar los instrumentos del estudio crítico (en la Ilustración -siglo XVIII). Cuarta etapa: a fines del siglo XVIII nace la Cristología.
Podemos distinguir dos caminos
para abordar el estudio sobre Jesús: descendente o ascendente. De uno nace una Cristología descendente y del otro una Cristología ascendente. El camino descendente
o teológico, parte de la divinidad de Jesús y desde ahí busca comprender su humanidad (Duquoc, Ratzinger…). El camino ascendente,
o histórico parte del Jesús histórico (su
vida y hechos) y llega hasta el Jesús resucitado, Hijo de Dios (Sobrino, Boff, Pagola...). De fines del siglo XVIII a la actualidad se distinguen tres «búsquedas»
La primera búsqueda: 1778 a 1953.
• Tres de los más connotados pioneros (Reimarus, Strauss y Renan –católico-) propugnaron una lectura científica de Jesús. • Época densamente dogmática; fueron repudiados por sus mismas instituciones académicas DAVID FRIEDRICH STRAUSS (1808- 1874) ‘Vida de Jesús’ (1835), Esta etapa produjo una serie de “Jesús” a la carta: “los racionalistas presentaron a Jesús como un predicador de moralidad; los idealistas, como el Hombre Ideal; los estetas, como el maestro de las palabras, y los socialistas como el amigo de los pobres y el reformador social, mientras que innumerables seudointelectuales lo convirtieron en un personaje de ficción” (J. Jeremías; El problema del Jesús Histórico, 5-6) Hacia fines del siglo XIX la fe entra al contraataque, reivindicando que no se puede acceder a Jesús con los solos instrumentos de la ciencia.
• Los 40 años siguientes al inicio de la
primera guerra mundial son de cierto desierto en la búsqueda del Jesús histórico. La segunda búsqueda: 1953 a 1988. Bultmann fue el iniciador de la segunda búsqueda, al aplicar los rigores del método de análisis de las formas (literario-histórico), frente a la concepción que daba por hecho que los evangelios narraban sucesos históricos y expresaban dichos realmente proferidos por Jesús Tras la declaración enfática de Bultmann de que los evangelistas no se preocuparon de escribir sobre Jesús con propósito histórico-biográfico, se creó un impasse de unos 30 años en la búsqueda del Jesús histórico. La tercera búsqueda: a partir de 1988. • Neil y Wright plantean rebasar los ámbitos de la filosofía y la teología, dando entrada a numerosos estudios de diversos campos: sociología, psicología, historiografía, arqueología, etc. • La búsqueda se encamina a encontrar a Jesús fuera de los evangelios, mediante la reconstrucción del contexto religioso- cultural-político de la época de Jesús; en esta línea “paramétrica” surge la imagen de Jesús de la BBC de Londres, en base a los rasgos del judío promedio de los tiempos de Jesús. En síntesis: tres líneas de trabajo en la búsqueda del Jesús histórico:
• La elaboración biográfica simbolizada en 1863, por
Reimarus.
• Los análisis histórico-críticos, consolidados a partir de
1953 por Rudolf Bultman.
• La contextualización en la Judea de Jesús, impulsada en
1988 por Neil y Wright.
Aunque siempre han estado de alguna manera presentes
las 3 líneas, cada época ha privilegiado alguna. Conforme se avanza, la fusión de las 3 es cada vez más reveladora . Siguiendo la corriente biográfica están Ernst Renan (teólogo francés), Karl Adam (católico alemán), Albert Nolan (dominico sudafricano), y José Ignacio y María López Vigil (católicos cubanos en América Latina). Dentro de la búsqueda histórico-crítica, están autores como Duquoc (dominico francés), Sobrino (jesuita español en El Salvador), Boff (exfranciscano brasileño), Schillebeeckx (dominico belga), González Faus (jesuita español), Carlos Bravo (jesuita mexicano), Meier (diocesano norteamericano) y Joseph Ratzinger (alemán, Papa anterior: “la historicidad de Cristo es una cuestión crucial”). En la línea de contextualización en la Judea de Jesús, que es la más nueva, se ubican expertos como Queiruga (católico español) Dunn (protestante inglés) y Pagola (diocesano vasco).