La Aduana es un órgano de la administración pública, que tiene por
objeto percibir los derechos fiscales de importación y exportación y
hacer cumplir las disposiciones prohibitivas y de reglamentación del comercio internacional. Todo lo referente a tal objeto, constituye la legislación aduanera. Nos interesa únicamente el aspecto financiero, o sea, la percepción de los impuestos aduaneros. La legislación aduanera está comúnmente contenida en diferentes cuerpos legales. La cuantía de los derechos se fija por leyes especiales, unas veces, o se incluye en las tablas de las tarifas de avalúos, según el sistema sea ad-valorem o de derechos específicos. Existen además comúnmente un cuerpo de disposiciones destinadas a regir la introducción de mercaderías y los trámites para su despacho a plaza, que en nuestro país se denomina "Ordenanza de Aduana", compuestas de un gran número de reglas, muchas ya anticuadas. Finalmente interesa la productividad del impuesto aduanero que viene a depender de las circunstancias siguientes: a) Del número o importancia de los artículos gravados: se trata de un concepto netamente fiscal, según el cual se tiende a ampliar cada vez más el número de productos gravados. Pero ya hemos visto que en esta materia no debe prevalecer el sólo criterio fiscalista. b) Del tipo de gravamen fijado al establecer el impuesto sobre objetos de consumo que no tiene similares en el país. Ejemplo del té, cacao, etc., pues si le gravan fuertemente, disminuye en consumo y la productividad del impuesto. c) Del clima y posición geográfica del país: en el país que debe importar la totalidad de un determinado artículo, el producto del impuesto será mayor que en otro país donde tales productos se producen en el interior. Es cierto que en el último caso esos productos pagan impuestos internos al consumo. Y como la mayor o menor cuantía de producto que puede producir cada país depende del clima y situación geográfica, ello viene a influir en la productividad del impuesto aduanero. d) De los hábitos y gastos de la población: si estos dan preferencia a los productos extranjeros, los impuestos a los mismos vienen a aumentar el rendimiento aduanero. e) De los reglamentos administrativos: las excesivas y molestas exigencias dificultan la importación y exportación y disminuyen el rendimiento. El proteccionismo, como su denominación lo indica, supone la protección dispensada por el Estado a las industrias nacionales, mediante el recargo de los derechos arancelarios que se señalan a determinados productos extranjeros, con el fin de favorecer a los que resulten iguales o similares en el país. El proteccionismo no solo se vale del recargo en los derechos de importación, sino también de las primas a la exportación, y aún de la prohibición absoluta de importar productos extranjeros. Pero téngase en cuenta que el comercio internacional en nada favorece ninguno de estos procedimientos, porque a la postre los países que se crean beneficiados de momento, quedan de hecho perjudicados, porque sus beneficios momentáneos los devora la competencia internacional. La teoría del libre cambio, supone por el contrario, que el Estado no tome los efectos de la competencia extranjera, señalando a los productos que se importan de otros países simples derechos fiscales o sea una contribución e impuesto semejante al que deben pagar los nacionales. El libre cambio se caracteriza porque no hay recargo alguno en los derechos de importación, sino solamente a los expresados derechos fiscales, tampoco se aplica el sistema de prima portación, por lo que vienen a igualarse los productores de unos y otros países en la producción y colación en el extranjero de la mercancía de que se trata. Es el proteccionismo que se limita a los casos en que e interés general lo reclama, debiendo ello ajustarse a los siguientes puntos de vista. Acordar la protección sólo a las industrias esenciales. El proteccionismo debe ser parcial y temporario. Proteger las industrias no esenciales, pero tan sólo en período de crisis. Los impuestos aduaneros así diferentes formas, a saber: impuestos de importación o entrada, de exportación o salida, de transito y navegación. Los impuestos de importación o entrada constituyen la principal de las cuatro clases y viene a gravar gran número de productos naturales o manufacturados que atraviesan las fronteras de país para ser consumidos en el mismo. El impuesto a la importación constituye “la forma más cómoda, más simple y casi siempre la más productiva de los impuestos indirectos”. Se han dado diversos fundamentos para la aplicación de los derechos aduane la importación, a saber:
a) Constituyen una compensación a los tributos que en diversas formas
soporta la producción del país, evitándose así que los productos extranjeros aparezcan exentos y tratados en mejor forma que los nacionales. b) El Estado por un acto de soberanía tiene la facultad de gravar la riqueza que entra a formar parte del patrimonio nacional y que viene a gozar de las garantías de seguridad política que el Estado proporciona a las cosas que se hallan en su territorio. c) Constituyen una forma cómoda de gravar ciertos productos extranjeros de consumo más o menos general y que se tienen análogos en el país en ciertos casos. d) Son necesarios para defender la producción nacional en el caso de que en el país existan productos similares a los importados. Los impuestos de importación pueden tener diferentes fines:
Fines Fiscales: Si tienden únicamente a asegurar el suministro de recursos al
estado trata únicamente de asegurarse una segura fuente de restas sin ningún otro propósito necesario. Para que un impuesto de importación sea puramente fiscal, debe recaer sobre un producto no puede producirse o elaborarse en el país. Fines Protectores (Económicos): Consiste en gravar las mercaderías a productos extranjeros con el objeto de impedir o atenuar la competencia exterior y para defender cié industrias nacionales de los peligros de la concurrencia de dichas mercaderías extranjeras, o de compensar las desventajas que pueda encontrar, por diversas causas, la industria del país que impone el tributo. Este tipo de impuesto realiza su finalidad, cuando impide o reduce la entrada de mercadería. Consecuencia de esta política fiscal, es la disminución de las entra aduaneras. Fines Sociales: Cuando el impuesto de importación tiende a evitar o disminuir el ingreso en el país de cientos de productos dañosos para la salud física o moral de los habitantes. O veces se trata de verdaderos impuestos al lujo, como cuando se va excesivamente a las modas. La finalidad social puede ser a la inversa, protegiendo mediante tarifas reducidas la importación productos necesarios y útiles para el progreso y cultura del país Ejemplo: papel para libros, revistas, etc. Las tarifas aduaneras consisten en uno o más ejemplares que constituyen la enumeración de los artículos que se importan al país, con la determinación del valor especial que se les fija (aforo) y los derechos aduaneros que Íes corresponde pagar, los que pueden ser advalorem o específicos. Ella tiende a evitar en lo posible los inconvenientes que ocasiona la extrema dificultad de la determinación del valor de cada artículo sometido al gravamen aduanero. La importación para consumo de mercadería en condiciones de dumping podrá ser gravada por la autoridad de aplicación con una tarifa antidumpig, cuando esta importación: a) Causare un perjuicio importante a una actividad productiva que se desarrolle en el territorio aduanero; b) Amenazare causar en forma inminente un perjuicio importante a una actividad productiva que se desarrollare en el territorio aduanero o; c) Retrasare sensiblemente la iniciación de una actividad productiva en el territorio aduanero, siempre que los actos tendientes a concretarla estuvieren en curso de ejecución. Este tributo se aplica a las mercaderías que se importan para consumo y cuyo precio de exportación en el país de origen es menor que el de mercaderías idénticas o similares consumidas en el mercado interno. El fin de esta tarifa es defender la actividad productiva y la industria nacional; por ello se aplica a la mercadería que ingresa y que, en razón de encontrarse en situación de dumping, perjudica la actividad existente o bien dificulta su iniciación. Los tratados comerciales regulan cuestiones económicas, como la reducción de aranceles para los productos importados que procedan de la otra parte del acuerdo. Los Acuerdos Bilaterales se dan entre dos Estados, y los Multilaterales, que concierne a varios estados o afecta a las relaciones entre ellos. Acuerdo, cooperación multilateral. Los tratados pueden ser bilaterales, pero también multilaterales, como sucede con las convenciones de Derecho del mar, la de los derechos humanos o las que regulan los privilegios e inmunidades diplomáticas. Los tratados multilaterales constituyen la base para la formación de organizaciones internacionales y la determinación de sus funciones y potestades. Más recientemente, estos tratados contienen la llamada "cláusula de nación más favorecida", con lo que cada signatario deberá dispensar al otro el mismo tratamiento que se haya dado ya o se dé en el futuro a una tercera nación El tratado multilateral más importante de este tipo es el GATT (Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio), que asegura igual tratamiento a-los nacionales de cualquiera de los países signatarios Otro upo de tratados establece el sometimiento de las disputas entre las partes al arbitraje de tribunales especiales o de instituciones como el Tribunal Permanente de Arbitraje o el Tribunal Internacional de Justicia Existen diversos tipos de tarifas según los criterios adoptados para el mantenimiento impositivo aduanero:
Tarifas generales o autónomas: es el conjunto de derechos fijados por la ley y que no
pueden ser modificados sino por una nueva ley, que recaen en las mercaderías importadas sin consideración alguna de su país de origen. Se usan en situaciones normales. Tiene su origen el poder de imposición del Estado de percibir tributos aduaneros con un tratamiento igual, cualquiera sea origen o procedencia de las mercaderías. Tarifas convencionales: es la que deriva de un acuerdo internacional bilateral o multilateral. Por lo general, es para aplicar un régimen tributario aduanero favorable para los países signatarios del acuerdo. Se estipulan por tratados de comercio, constituyendo derogaciones de la tarifa general, en beneficio del país contratante. Perjudican la libertad de comercio y no buscan garantizar las industrias nacionales, sino establecer condiciones del cambio internacional. Tarifas diferenciales: cuando se aplica un tributo especial, favoreciendo la introducción de la mercadería o exportación o bien aplicando impuestos elevados a fin de desalentar la introducción o salida de mercaderías por razones de política económica. Tarifas mínimas: Es la fijada por la Ley con carácter general. Se caracterizan por la baja tasa de los derechos aduaneros con el propósito de facilitar la introducción de artículos esenciales.
Tarifas Máximas: Es la que la ley de Aduana
Argentina faculta al Poder Ejecutivo para establecer como medida de defensa y represalia contra mercaderías de países que Maquiladora, industria filial de una empresa extranjera que opera con materias primas importadas y exporta toda su producción al país de origen. En nuestro país la Ley 1064/97 De la Industria Maquiladora de Exportación, y el Decreto 9585/00 por el cual se reglamenta la Ley 1064/97 de la Maquila, constituyen el régimen legal vigente En su art. 1 de la ley 1064/97 establece: "La ley tiene por objeto promover el establecimiento y regular las operaciones de empresas industriales maquiladoras que se dediquen total, o parcialmente a realizar procesos industriales o de servicios incorporando mano de obra y otros recursos nacionales destinados a la transformación, elaboración, reparación o ensamblaje de mercaderías de procedencia extranjera importadas temporalmente a dicho efecto para su reexportación posterior, en ejecución de un contrato suscrito can una empresa domiciliada en el extranjero‖. En cuanto a las ventas en el mercado nacional, la ley, en su Capítulo VII autoriza a las maquiladoras a vender parte de su producción en el mercado nacional, limitándolo al 10% adicional al volumen exportado en el último año, con la exigencia de mantener el mismo control y normas de calidad que aplican para sus productos de exportación. Se denominan puertos francos a aquellos que se consideran fuera del territorio aduanero y no se pagan derechos de aduana en ellos. Puerto franco, lugar donde se puede cargar o descargar mercancías sin pagar derechos aduaneros ni aranceles. Sólo se cobran tasas por amarrar en el muelle. Las mercancías descargadas pueden destinarse a otro puerto, pagando un derecho de tránsito, o entrar en el país para consumo interno, tras el pago de los derechos arancelarios correspondientes. El objetivo de los puertos francos consiste en fomentar y facilitar el almacenamiento de bienes y mercancías en tránsito, sin que tengan que pasar por la aduana. Zona franca, son ciertos territorios separados materialmente del resto de una ciudad por muros y verjas que impiden el contrabando y en cuyos límites es posible importar, estacionar, pedir, manipular, elaborar, transformar y exportar mercaderías sin pagar ningún derecho, pero sin poder ser introducidos en el Estado como productos elaborados sin abonar los derechos, ni tampoco consumirse en la zona franca. El art. 287 de la ley 2422/04 establece: La zona franca es parte del territorio del Estado paraguayo asignado para éste en otro país, delimitado físicamente, en la que la introducción de mercaderías extranjeras y la salida de éstas con destino a terceros países no están sujetas al pago del tributo aduanero a la importación, siempre que sean utilizadas, almacenadas y consumidas en las condiciones establecidas en la legislación respectiva, ni les son aplicables ¡as restricciones de carácter económico. La zona franca, puerto franco y depósito franco deben ser establecidos por la ley. La entrada de mercaderías extranjeras provenientes de la zona franca en el resto de! territorio aduanero, estará sujeta al pago del tributo aduanero que corresponda al régimen aduanero en que ésta fuera incluida. Las zonas francas, los puertos francos y los depósitos francos pueden ser: de almacenamiento, comerciales e industriales. Las zonas francas, puertos francos y depósitos francos establecidos en el territorio nacional estarán bajo la fiscalización y el control de la Dirección Nacional de Aduanas. Las zonas francas, puertos francos y depósitos francos concedidos al Paraguay en el exterior, estarán bajo la fiscalización y control de la Dirección Nacional de Aduanas por medio de sus delegaciones representantes. El plazo, la forma y condiciones para la entrada y salida de las mercaderías de o para la zona franca serán establecidos en las normas reglamentarias. La importación consiste en introducir al país mercaderías procedentes del exterior para uso o consumo. La exportación consiste en la salida mercaderías nacionales o nacionalizadas fuera del territorio nacional. El tráfico internacional de mercaderías está sujeto a diversos controles, como tipo de gravámenes, al ser trasladadas o removidas las mercaderías de un sitio a otro: embarque, desembarque, depósitos aduaneros, uso de los servicios portuarios, todo dentro del área de las aduanas y sus espacios anexos. Bajo el nombre genérico de “Derecho Aduanero” se incluyen todos estos tipos de impuestos y tasas de servicios en el movimiento aduanero. Los derechos son la forma tradicional de nombrar todos los impuestos a la exportación e importación. Derecho de Importación: el hecho imponible de este tributo se configura con la importación para consumo, entendiendo por consumo, la introducción de mercaderías en el territorio aduanero por tiempo indeterminado. Derecho de Exportación: son los tributos que inciden sobre la exportación para consumo. El hecho imponible de este tributo se configura con la salida de mercadería de un territorio aduanero, por tiempo indefinido, lo cual hace presumir su destino de consumo.