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2019-II
La formación de minerales es el resultado de procesos químicos y físicos que se verifican en
todas las épocas geológicas y que aun continúan manifestándose.
Magmático
Metamórfico
Sedimentario
Proceso magmático:
Conduce a la formación de minerales por solidificación del magma. Teniendo en cuenta la
rapidez con la que se produce el enfriamiento del magma.
Proceso metamórfico:
Es toda la transformación estructural, mineralógica y química que se produce en las rocas
bajo el efecto de la temperatura, la presión y los fluidos circulantes.
Conocemos dos tipos de metamorfismo: metamorfismo térmico y regional.
Metamorfismo Térmico o de contacto
El metamorfismo de contacto es un conjunto de
alteraciones mineralógicas y estructurales inducidos
en las rocas por la cercanía o contacto con cuerpos
intrusivos de rocas ígneas, produciéndose un
aumento en el grado de metamorfismo a medida
que se aproxima al contacto.
Metamorfismo Regional
Se desarrolla en grandes extensiones de la corteza
terrestre sujetas a hundimientos y dislocaciones. Se
distinguen tres en función de profundidad son:
epizona, mesozona y catazona.
-Epizona: comprendida entre 5.000 y 7.000 m de
profundidad.
-Mesozona: comprendida entre 7.000 y 12.000 m de
profundidad.
-Catazona: comprendida entre 12.000 y 20.000 m
de profundidad.
Proceso sedimentario:
La mayor parte de los minerales que podemos encontrar en las rocas sedimentarias provienen
de la erosión mecánica y alteraciones químicas de rocas ya existentes. Estos procesos se
producen sin la acción de grandes presiones o temperaturas.
Pueden ser clasificados teniendo en cuenta los mismos criterios utilizados por las rocas
sedimentarias, de este modo, tenemos: