NATURALISMO

Es un estilo artístico considerado una evolución

del realismo, surgido en Francia alrededor de
1880, y extendido por toda Europa hacia los
primeros años del siglo XX.
NADA QUÉ HACER de Jules-Bastien Lepage
De acuerdo con Émile Zola, teórico que dio nombre al
movimiento, el naturalismo es la vuelta a la naturaleza y al
hombre, a través de la observación científica, de la anatomía,
y del análisis y la descripción exacta de lo que existe.

Y agrega: la tarea es la misma para el artista que para el

científico. Uno y otro han tenido que reemplazar las
abstracciones por realidades, las fórmulas empíricas por los
análisis rigurosos.
Contra el romanticismo:

El movimiento romántico no era, decididamente, más que

una empresa descabellada. El siglo no pertenece a estos
soñadores sobreexcitados, a estos pioneros madrugadores
cegados por el sol del amanecer. No representaban nada
claro, no eran más que la vanguardia encargada de
preparar el terreno, de asegurar la conquista por medio de
excesos. El siglo pertenece a los naturalistas, a los hijos
directos de Diderot, cuyos batallones sólidos iban a fundar
un verdadero Estado.
DIDEROT fue un filósofo francés que en 1773 escribe el libro La paradoja del
comediante en donde trata de deshacer los equívocos, desde sus perspectiva,
sobre la interpretación actoral.

Entre sus propuestas más relevantes están:

• El actor debe emocionar al público, no emocionarse él, para lo cual debe tener
capacidad de discernimiento, quedar libre de su propia sensibilidad y desarrollar
mediante técnicas especiales su capacidad de imitación.
• El actor debe recurrir a su imaginación y a su memoria, y procesar todos los
elementos racionalmente.
• Sobre este material, el actor no debe sentir, sino representar los signos externos
del sentimiento; gestos, palabras, voz, ritmo, todo forma parte de la imitación
que se forma a partir de la memoria.
• El actor no puede padecer dolor, ni melancolía, no puede estar alterado, sino
utilizando lo trabajado en los ensayos como una técnica, de lo cual se libera
después de su representación.
• La paradoja del comediante consiste precisamente en esto: el actor suscita
emociones o sentimientos sin sentirlos él mismo, ya que son los espectadores
los que únicos que deben emocionarse.
El encargado de llevar a escena el teatro naturalista fue André
Antoine, pero él fue más allá de los postulados de Zola:

“la puesta en escena de hombres (y mujeres) de carne y

hueso” exigía que la representación se llevara a cabo en
un espacio escenográfico para el que ya no servían los
telones pintados y los decorados de cartón. El efecto de
realidad debía hacerse también visible en la construcción
visual de la escena, y para ello Antoine recurrió a la
introducción de elementos reales y a una reproducción
exacta de los espacios que representaban.
Algunas características del Naturalismo en la escritura:

• El argumento: deja de ser un entretenimiento para convertirse en estudio cuasi

científico del hombre.
• Los temas: Irrumpe con fuerza el mundo del trabajo y el dinero como móvil imperante
de la sociedad. Del amor irrumpen los aspectos carnales y de la pasión interesa el
impulso carnal.
• Los personajes: Son vulgares y grises, sin rasgo ni distintivo especial, destaca la
gran importancia prestada al personaje femenino. En la primera etapa del Realismo
los personajes son encarnación de ideas. Progresivamente los personajes se
aproximan a los seres de carne y hueso. Contrasta la forma de ser presentados. El
naturalismo contempla al personaje como animal sujeto a leyes de la naturaleza y a
las de la sociedad.
• El tiempo: El conflicto se desarrolla a lo largo de unos años que resultan centrales en
la vida del personaje. La obra comienza en el punto más álgido. A continuación se
retrocede en el tiempo para relatar hechos del pasado. Una vez que se ha relatado el
pasado y se alcanza el punto inicial, la narración continúa hacia delante. Esta
estructura narrativa se denomina in medias res, es decir, comenzar desde la mitad
de la historia.
• El espacio: Los espacios son verosímiles y se dibujan con gran acumulación de
detalles. Muchas veces son reales. Aparecen con gran profusión los espacios
urbanos y las zonas alejadas de las ciudades.
• El lenguaje: El habla es coloquial. En el léxico destaca la introducción de términos
científicos.
El naturalismo en el teatro acentuó la realidad externa, es
decir la del espacio escénico y los elementos. Pronto para
el joven Stanislavski, resultó insuficiente.

Como actor director de actores a él no le bastaba la

precisión en la reconstrucción de lo visible: tenía que
procurar la verosimilitud en el proceso psíquico.

Para Stanislavski la espiritualidad constituía una dimensión

irrenunciable del ser humano, que debía encontrar también
su representación escénica.

El criterio de verdad utilizado por él ya no era el de lo real

material sino el de lo real vivido.