CUARENTENA,

¿UNA OPORTUNIDAD?
Nota de un Boletín del Budismo Theravada Hispano
Según la enseñanza del Buddha, para poder escapar (nissaraṇa) del sufrimiento o
insatisfacción (dukkha), uno debe conocer directamente (abhiññeyya) a través de la
contemplación (vipassana) los fenómenos (dhammas) que surgen, con sabiduría
(pañña). Para acercarse a este correcto punto de vista (samma diṭṭhi), el Buddha insta
a tres tipos de reclusión. La del cuerpo (kāya viveka) , la de la mente (citta viveka) y
la de las corrupciones mentales (uppādi viveka). Viéndolo desde esta perspectiva, la
cuarentena podría convertirse en una oportunidad, ya que cumplimos con el primer
tipo de reclusión, la del cuerpo. Ahora, ¿cuál es el significado de esto? Es básicamente
lo que hacemos en un retiro de meditación para el desarrollo mental (bhavana),
recluirnos principalmente de la estimulación sensorial que inunda nuestra actividad
mental y hace que las tendencias subyacentes surjan y se afiancen junto a las
corrupciones mentales, o también llamadas intoxicantes (asavas). Principalmente nos
separamos de las actividades que no son fundamentales para la vida, las cuales, por
nuestros oscurecimientos mentales, las vemos como “Lo esencial”. Este
oscurecimiento que nos ha llevado a esta situación de crisis de valores, desigualdad y
desastre ecológico global. Este año 2020 ha sido particularmente complicado por los
cambios que hemos visto ocurrir, como por ejemplo, el distanciamiento social, un
sistema económico ahora comprometido por el desempleo, cambios en los modos de
consumo y producción, etc. De alguna manera, en menor o mayor grado, a todos nos
han afectado las circunstancias actuales a nivel mundial de pandemia, problemas
sociales, económicos, políticos, etc. Esto no quiere decir que hay que quedarse
estáticos ante estas situaciones, más bien, son circunstancias que nos invitan a la auto
observación para medir nuestra capacidad de adaptación y respuesta al mundo. En tal
sentido, una muestra ha sido el giro que ha tomado el mundo académico en la
educación a distancia, la cual nosotros hemos venido desarrollando y mejorando
progresivamente. Pero no solamente en el mundo académico sino también en el tema
de la salud y medios de producción, entre otros. Prácticamente todos nuestros
espacios ahora se ven reevaluados de alguna manera, con nuevos retos por afrontar,
para sufrir una transformación que se adapte a los cambios. Desde nuestras
organizaciones seguimos trabajando sin descanso con el fin último de ser una fuente
óptima para el estudio y práctica de las enseñanzas del Buddha. Todavía son muchos
los proyectos que requieren atención, tanto en el monasterio como en nuestros
canales de enseñanza. Es por esto que invitamos a unir esfuerzos y ser eco en las
diversas áreas en que se puedan desarrollar. Winston Velazco Presidente IEBH C