El estado de la cuestión (o estado del arte) es un documento básico que sirve como punto de partida de cualquier investigación. Su principal objetivo es exponer, de manera rigurosa y sistemática, los puntos de vista de los expertos o las corrientes de pensamiento más representativos frente a un determinado problema de investigación. Es decir, frente a un pregunta de investigación planteada al interior de un área temática previamente establecida, el investigador expone qué propuestas de solución sostienen las fuentes autorizadas, cuáles son las perspectivas más actuales y relevantes frente a la pregunta en cuestión. Se le considera un documento básicamente informativo, puesto que antes de valorar, criticar o reivindicar una postura sobre otra, su propósito, más bien, consiste en hacer una exposición exhaustiva de las posturas más relevantes en torno a un determinado tema y problema de investigación. Es un escrito que facilita la comprensión y el conocimiento de todas las posibles salidas que ya han sido planteadas por los estudiosos sobre el tema y el problema de investigación. Ya sea que un investigador se dedique a realizar investigaciones teóricas, de corte más bibliográfico o crítico, o se dedique a realizar investigaciones a través de diseños de campo, más experimentales o empíricos, en todos estos casos, el estado de la cuestión es un documento necesario y valioso. Generalmente toda investigación parte de lo que ya han dicho los especialistas sobre el tema (es decir, parte de lo ya investigado y comunicado), y en la medida en que todo investigador, desde el primerizo hasta el más especializado, necesita actualizarse constantemente respecto de los nuevos aportes en el tratamiento de su área temática; para que sus propios aportes no resulten ingenuos, obsoletos o poco informados, parte esencial de todo proceso de investigación consiste en hacer una revisión permanente de la bibliografía existente sobre el tema, sobre todo de la más actual. El estado de la cuestión es producto, precisamente, de esa revisión bibliográfica. Para construir un Estado de la Cuestión, debemos tener presente los tres requisitos imprescindibles: Haber delimitado correctamente un tema de investigación. Haber identificado con claridad y precisión, al interior del tema, un problema de investigación verdaderamente relevante y que merezca ser investigado. Haber reconocido y sintetizado las ideas centrales de las alternativas de solución propuestas por los principales especialistas, corrientes de pensamiento o teorías existentes en torno a dicho problema de investigación. Normalmente todo Estado de la Cuestión posee la siguiente estructura: Parte Introductoria: Debe contener una presentación del tema y de la pregunta de investigación, una justificación del problema (por que es un problema y que sentido tiene planteárselo) y una breve y concisa presentación de los autores o corrientes de pensamiento que se expondrán. Es indispensable, además, contextualizar el tema y problema a investigar. También puede incluirse algunas definiciones o explicaciones básicas, así como mencionar el interés y la motivación propios del autor. Cuerpo o desarrollo: Esta es la parte central y mas extensa del documento. Debemos tener siempre presente que el centro del estado de la cuestión es el problema de investigación, y por ello el cuerpo de la exposición debe estar orientado en función de presentar, analizar y comparar los diversos intentos de solución del problema de investigación. Se trata, pues, de presentar de manera ordenada las respuestas que cada uno de nuestros autores ha dado, directa o indirectamente, a nuestro problema de investigación. Lo que el investigador necesita es revisar cada una de sus fuentes con mucha minuciosidad para poder inferir la forma en que el autor respondería, eventualmente, a nuestro problema. No siempre encontraremos la respuesta a nuestro problema planteada de manera directa en las fuentes que consultemos. Hay distintos modos de presentar sistemáticamente estas propuestas de solución al problema de investigación en el cuerpo de la exposición. Quizás las más usuales sean presentar, una por una, cada postura analizada, ordenarlas históricamente o estructurarlas temáticamente, de acuerdo con las similitudes y discrepancias de las respuestas ofrecidas. El orden de la exposición dependerá tanto del tema y problema elegido como de los intereses y del estilo del autor. Cierre En esta parte final del texto se suele incluir, como mínimo, dos componentes: una síntesis completa de las ideas centrales de las fuentes consultadas y nuevos problemas de investigación que se deriven o queden pendientes luego de la exposición del cuerpo. Asimismo, se puede incluir una suerte de balance personal; el autor puede exponer sus opiniones acerca de las posturas o corrientes que han sido desarrolladas en el cuerpo. En muchos casos, suele incluirse, también, la hipótesis o respuesta personal del autor al problema de investigación. Un estado de la cuestión puede servir para presentar información de manera articulada y sistematizada o para elaborar y definir una respuesta propia al problema de investigación. En el primer caso, tenemos estados de la cuestión cuyo fin es exclusivamente informativo: dar a conocer el panorama del debate actual en torno a un tema y problema de investigación específicos. En el segundo caso, el estado de la cuestión sirve, además, para construir una hipótesis de trabajo propia que se engarzaría con un proyecto de investigación concreto; es decir, contribuiría a emprender, más adelante, investigaciones más complejas y con demostraciones acabadas. BIBLIOGRAFIA Alayza, C., Cortés, G., Hurtado, G., Mory, E., & Tarnawiecki, N. (2010). Iniciarse en la investigación académica. Lima: Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas.