I Timoteo 2:5 (RV) “Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre”
Hebreos 9:15 (RV) “Así que, por eso es mediador de un nuevo pacto, para que interviniendo muerte para la remisión de las transgresiones que había bajo el primer pacto, los llamados reciban la promesa de la herencia eterna”
Hebreos 12:24 (RV) “a Jesús el Mediador del nuevo pacto, y a la sangre rociada que habla mejor que la de Abel 8 Jesú s, Nuestro Mediador
La iglesia, el cuerpo de Cristo hoy en día está en la
dispensación de la Gracia, bajo el Nuevo Testamento y aunque claramente vemos en las tres escrituras anteriores que Jesús es el único mediador entre el Dios Padre y la humanidad, la iglesia sigue orando bajo los ejemplos que encontramos en el Antiguo Testamento.
Mediador en el griego (MESITES), es la persona que actúa en medio de dos lados con el propósito de buscar paz, en este pasaje se nos da a entender que Jesucristo es el único que puede tomar esta posición, entendiendo al hombre en su humanidad y entendiendo la Deidad al ser Dios. Por lo tanto puede traer paz entre estos dos lados. 8 Jesú s, Nuestro Mediador
Orando de esta manera estamos invalidando la
obra de Jesucristo. Es imperativo el tener muy claro en que dispensación estamos y caminar bajo la luz de la misma.
La iglesia se ha quedado frenada en versículos como Job 9:33 “No hay entre nosotros arbitro Que ponga su mano sobre nosotros dos”. Pero la respuesta es indudablemente SI, Jesús, bajo el Nuevo Pacto. 8 Jesú s, Nuestro Mediador
En el Hebreo “árbitro” (YAKACH), tiene el
significado de alguien que justifica, que decide, como una persona que tiene la última palabra en la toma de una decisión. El problema está cuando leemos estos versículos y nos olvidamos de la obra de Jesús y nos vamos a los pasajes donde encontramos la intercesión de Moisés, Abraham y David. 8 Jesú s, Nuestro Mediador
Tengamos en cuenta que oración de intercesión
como la encontramos en Génesis 18:16-33 (Abraham intercede por Sodoma y Gomorra), son buenos ejemplos pero no para nosotros. Ya no estamos bajo el Antiguo Testamento, Dios no está molesto con nosotros, Jesús ya fue a la cruz, ya pagó el precio, resucitó entre los muertos y está sentado a la derecha del Padre, y ahora Él, es el único intercesor que tenemos. 8 Jesú s, Nuestro Mediador
El concepto de la intercesión y la guerra
espiritual que la gente hace hoy en día está basado en el Antiguo Testamento, no entendiendo la obra terminada de Cristo y por lo tanto siendo sus oraciones anti-Cristo.
La batalla se terminó y Jesús ganó, la victoria es
nuestra (Colosenses 2:15 (RV) “y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz”). 8 Jesú s, Nuestro Mediador
Romanos 5:1 (RV)
“Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de Nuestro Señor Jesucristo”
Démonos cuenta que este versículo nos dice que tenemos “paz”, esta palabra significa, la ausencia de guerras y hostilidades, un estado de tranquilidad y relaciones en armonía.
8 Jesú s, Nuestro Mediador
Vemos que esta paz que nos ha provisto
Jesucristo es la ausencia de contienda y discordia, por lo tanto al volver a ello (a las guerras espirituales) la gente suele pensar que eso los hace más espirituales y la verdad es que lo que están demostrando es la ignorancia en la que caminan.
Volver a las guerras espirituales, cuando Jesús lo ha hecho todo, es caminar en la ignorancia. 8 Jesú s, Nuestro Mediador
La espiritualidad está en caminar a la luz de lo
que Jesucristo ha hecho y ha provisto por y para nosotros por medio de su obra redentora. Todo esfuerzo que nosotros hagamos desde este punto de vista, lo que haría es darle a entender a Dios que lo que Su Hijo hizo por la humanidad no fue suficiente y por lo tanto nosotros tenemos que intervenir y terminar lo que Él no pudo hacer. 8 Jesú s, Nuestro Mediador
Hebreos 8:6 (RV)
“Pero ahora tanto mejor ministerio es el suyo, cuanto es mediador de un mejor pacto, establecido sobre mejores promesas”
Jesús es un mejor mediador que cualquier otro del Antiguo Testamento, y aún más, Él es un mediador de un mejor pacto (el Nuevo Pacto), el cual está establecido sobre mejores promesas. 8 Jesú s, Nuestro Mediador
Como podemos ver no hay razón alguna por la
cual tengamos que volver al Antiguo Pacto.
Ya podemos descansar y simplemente caminar en lo que Nuestro Mediador ha hecho por nosotros. ALELUYA!!! 8 Jesú s, Nuestro Mediador