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u 1 Corintios 2:12-16
u 12Y
nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo,
sino el Espíritu que proviene de Dios, para que
sepamos lo que Dios nos ha concedido, 13lo cual
también hablamos, no con palabras enseñadas por
sabiduría humana, sino con las que enseña el Espíritu,
acomodando lo espiritual a lo espiritual.
u 14Pero el hombre natural no percibe las cosas que son
del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las
puede entender, porque se han de discernir
espiritualmente. 15En cambio el espiritual juzga todas
las cosas; pero él no es juzgado de nadie. 16Porque
¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le
instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.
u Efesios 3:14-19
u 14Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre de
nuestro Señor Jesucristo, 15de quien toma nombre
toda familia en los cielos y en la tierra, 16para que os
dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser
fortalecidos con poder en el hombre interior por su
Espíritu; 17para que habite Cristo por la fe en
vuestros corazones, a fin de que, arraigados y
cimentados en amor, 18seáis plenamente capaces de
comprender con todos los santos cuál sea la
anchura, la longitud, la profundidad y la altura, 19y
de conocer el amor de Cristo, que excede a todo
conocimiento, para que seáis llenos de toda la
plenitud de Dios.
u ‰a única forma de satisfacer nuestros más profundos
anhelos y nuestras mayores necesidades es a través de
Dios mismo, mediante el amor que El nos provee en su
Hijo. Por esto Pablo ora para que seamos llenos de toda
la plenitud de Dios. ¡ Eso es lo que debemos desear para
nuestros matrimonios y nuestras familias!
u A medida que Dios llena nuestras vidas y nuestras
relaciones, reflejaremos su imagen, según El lo ha
planeado. En un mundo que busca soluciones, métodos
e información, Dios nos llama a buscarlo a El, a
conocerlo a El, y a llenarnos con su vida.
u En ninguna área de nuestras vidas hay mayor necesidad
de conocer el pensamiento de Dios que en el del
matrimonio.
u Es aquí donde necesitamos aprender a pensar como El y
a reaccionar conforme a su voluntad.
u El mundo nos invita a vivir en base a lo que nos
proporcione más placer, a permanecer juntos entre
tanto la relación contribuya a nuestros objetivos y a
tomar decisiones pensando en nuestros propios deseos.
u Pero Dios nos llama a una relación de entrega y
fidelidad, a darnos el uno al otro sin reservas ni
egoísmo, así como El se ha dado a nosotros.
u *  
 
u Efesios 5:21. ³Someteos unos a otros en el temor de
Dios´.
u ³Someteos unos a otros, por reverencia a Cristo´.
u En ningún momento, en el cuerpo de Cristo, se puede
decir que una persona deba someterse a todas las
demás, sin que haya otras que también se sometan a
ellas. Dios nos llama a someternos ³el uno al otro´.
u Es mediante esta actitud que podemos dar y recibir
unos de otros. Además, esta actitud es la clave para
obtener crecimiento en las relaciones matrimoniales.
u Aun Cristo, el Hijo de Dios, vivió en sumisión a su
Padre. Juan 5:30
u Cuando Dios dice que la esposa se debe someter al
esposo, ella está siguiendo el ejemplo de Cristo, en su
relación con el Padre. Efesios 5:22-24
u ‰a sumisión no es únicamente para la mujer; lo es
también para el varón. 1 Corintios 11:3.
u Y un hombre que no está sometido a Cristo no tiene
derecho a exigir sumisión de la esposa. Esto no quiere
decir que ella no deba someterse, sino que el esposo
rebelde (1 Samuel 15:23: rebelión=pecado de
adivinación) ha perdido el derecho de exigir sumisión a
su esposa.
u Cuando un esposo sigue el ejemplo de Cristo, y trata a la
esposa con amor, ella se someterá más fácilmente. Si un
esposo ama a su esposa con el amor de Cristo, la
reacción de la esposa será someterse.
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AGAPE AMOR ABNEGADO; DIVINO DIOS


AMOR PROFUNDO
Y CONSTANTE
PHI‰IA AMOR FRATERNA‰ AMISTAD HOMBRE
EROS AMOR FÍSICO ERÓTICO SENTIDOS
STORGE AMOR FAMIIAR FAMI‰IAR FAMI‰IA
u ¿En qué manera debe la esposa someterse al esposo?
¡Pues siguiendo el ejemplo de Cristo! El es su ³modelo
de vida´.
u Esta respuesta tiene dos aspectos: uno, en la forma
como El si se sometió a los hombres, la esposa debe
someterse al esposo; el otro, así como Cristo se
sometió al Padre, ella debe someterse a Dios.
u 1 Pedro 3:1,2
u Efesios 5:25

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